Bwen Oneshots

One-shot 16: El amor vive

Capítulo 16: El amor vive

Este one-shot es un crossover con tres de mis programas favoritos de la infancia, en caso de que no sepas que hay otras parejas aquí.
Ben 10 X Hogar Foster para amigos imaginarios X Gravity Falls X Transformers Prime.

Cuatro morenas y un adolescente de cabello negro azabache estaban sentados alrededor de una vieja y desvencijada mesa de madera.
La cocina dentro de Mystery Shack estaba en silencio mientras los Cuatro adolescentes, y el único adolescente, se sentaban en silencio.
Los cinco chicos se habían hecho amigos durante el primer mes del verano; o eso les había dicho Dipper Pines.
"Chicos, somos amigos. Creo que ¿verdad?" Se sentó torpemente a la mesa como los otros cuatro jóvenes.
Ben Tennyson estaba sentado a un lado de la mesa, jugueteando con el extraño reloj de pulsera negro que nunca se quitaba.
Mac McFaust se sentó frente a Dipper, sacó su teléfono de su mochila y le envió un mensaje de texto a alguien,
antes de volver a centrar su atención en la pregunta de Dipper.

"Uh, sí. Creo que sí. Quiero decir, no he sido exactamente bueno haciendo, eh, amigos de verdad".
Se rascó la nuca tímidamente. Un resoplido llamó su atención hacia el adolescente de cabello negro, conocido como Jackson Darby.
"Sólo nos conocemos desde hace unos dos meses, Mac. Estamos casi en la etapa de amistad, pero eso requiere
ejercicios de fomento de la confianza". Se encogió de hombros y se desplomó en su asiento. "O eso me han dicho las revistas para adolescentes y los especiales de mierda para después de la escuela". Mac se removió en su asiento por un momento, una expresión extraña pasó por su rostro. "Podemos contarnos un secreto, algo en lo que confiaríamos a los amigos.
Amigos, en realidad". Jack levantó una ceja y luego se encogió de hombros. "Ah, qué diablos. ¿Qué secreto oscuro y profundo quieres saber?"
Dipper golpeó la mesa con sus manos, mirando al adolescente. "¿¡Es cierto que estás en la ciudad con Aliens!?"
Jack resopló, recostándose en su silla. "¿Extraterrestres? ¿Qué te dio esa idea?" Dipper Pines consiguió una revista
que mostraba un Chevrolet amarillo de aspecto familiar. Jack maldijo mentalmente y luego se cruzó de brazos. "Me acojo a la quinta."
Dipper suspiró y guardó el cargador en su chaleco. "Vale la pena intentarlo." Miró a Ben, que le estaba dando a Jack una mirada extraña.
"¿Ben?" Sus ojos se encontraron con los de Dipper y levantó una ceja. "Mi abuelo es plomero, mi mamá es una gurú del fitness y mi papá es un drone de oficina.
No hay grandes secretos, lo prometo". Dijo, jugueteando de nuevo con el reloj. Dipper frunció el ceño, pero abandonó su línea de preguntas.
No se molestó en interrogar a Mac, había visto las criaturas con las que había llegado a la ciudad. Estos: 'Amigos Imaginarios', con los que trabajó.

"Bueno..." Fue Mac quien habló.
"Se me ocurrió la idea, así que ¿por qué no empiezo?" Suspiró, nerviosamente mirando hacia otro lado. "Tengo..." Cerró los ojos con fuerza.
"Estoy enamorado de una mujer catorce años mayor que yo". Dipper rió disimuladamente, con una ceja levantada. "¿Ese es tu secreto?" Mac lo fulminó con la mirada.
"¿Qué hay de ti, Pine Tree? ¿¡Quién es tu gran amor platónico, eh!?" Una mirada extrañamente defensiva pasó por encima de Dipper y suspiró.
"Una maderera loca que vive con sus tres hermanos y su padre, en el bosque, fuera de la red, y es unos tres años mayor que yo".
La ira de Mac se desvaneció y sonrió. "Es más normal que MI amor platónico, Dip". Dipper se rió entre dientes, rascándose la nuca.
"Sí, supongo que lo es." Ben golpeó la mesa con las manos, su rostro se puso rojo brillante y una expresión de determinación se destacó en su rostro.
"Los tengo a ambos vencidos". Cerró los ojos con fuerza y ​​respiró profundamente. "La persona que me gusta es la chica más hermosa,
inteligente, sarcástica y asombrosa que he conocido". Se sentó en su asiento, cruzándose de brazos con una sonrisa arrogante. "Y ella es MI prima".

Dipper y Mac se sentaron en silencio, con la boca bien abierta. "Vaya, eso es MUCHO más raro que el tuyo, Mac". Dijo Dipper,
sintiéndose un poco incómodo. Ben se cruzó de brazos y frunció ligeramente el ceño. "Ella ha estado saliendo con un chico malo,
estoy tentado de molestarla si él sigue así..." Jack se levantó de su lugar, alejándose con las manos en los bolsillos.
"¡Darby, vamos!" Gritó Ben, su rostro volvió a la normalidad. "No se puede mantener a los Bots en secreto". Dipper miró dos veces, de Jack a Ben, con
los ojos muy abiertos. "¿Ustedes se conocían de antes?" Ben asintió. "Mi abuelo en realidad trabaja con EXTRANJEROS, y Jack también".

Los ojos de Dipper no podían abrirse mucho más, pero su sonrisa casi le partió la cara. "¿¡En serio, Jack!? ¡¿Puedo conocerlos?!" Jack suspiró y
apretó los puños. "Bien, ¿quieres saber mi vida amorosa, de verdad?" Giró su silla, inclinándose hacia adelante contra el respaldo.
"Los vencí a todos ustedes, perdedores, porque me enamoré de una mujer de 1000 años,
que también es un robot ninja que cambia de forma y que lucha en una guerra secreta en suelo estadounidense". Suspiró y una sonrisa apareció en su rostro.
"Ella es tan hermosa y puedo montarla todo el tiempo". Los tres chicos estaban en silencio, con los rostros rojos brillantes a su alrededor.
La cara de Jack se puso roja y miró al resto de ellos. "¡Ella es un robot que cambia de forma, es mi motocicleta! ¡Mierda, chicos!"
Se puso de pie y se echó la mochila al hombro. "Mira, ella estará aquí en un momento, así que te agradecería que no dejaras pasar nada, ¿vale?" Ben sonrió y levantó
una mano en saludo de explorador. "Lo juro, el honor de los exploradores". En un momento, Dipper replicó el movimiento que había compartido con Wendy hacía tanto tiempo.
Le sonrió al adolescente de cabello negro y luego miró a Mac. "¿Qué? Simplemente asumirán que conocí a otro amigo imaginario, así que no es que importe".
Mac declaró a la defensiva, cruzándose de brazos. De repente, su teléfono vibró. Los ojos de Mac se abrieron mientras jugueteaba con él, con el rostro sonrojado.
"¡Hola, Frankie!" Se puso de pie y él y Jack se dirigieron hacia la salida de la Cabaña. Dipper saltó de su silla,
se sacudió el polvo y miró a Ben. "¿Vas a despedirlos?" Ben se encogió de hombros, se cruzó de brazos y los colocó sobre la mesa.

"El abuelo Max todavía está abajo con tu Grunkle Stanford, Gwen probablemente regresará en un momento".
La puerta principal de Mystery Shack se abrió de golpe y una mancha de algodón multicolor entró corriendo.
"¡Dip-Dip! Nunca adivinarás con quién me encontré". Dipper sonrió y arqueó una ceja. "¿El fantasma del adolescente Elvis Presley?"
La mancha se resolvió en la forma de la hermana de Dipper; Mable, quien hizo una exagerada cara de asco.
"¡Uf, no! ¡Me encontré con otra pelirroja! ¡Wendy debe tener familia en la ciudad!" Llamaron a la puerta y Mable se apresuró a abrirla. "¿¡SÍSSSS!?"
Se escuchó un fuerte grito ahogado y una mujer joven de cabello rojo brillante fue arrastrada de regreso al comedor. "¡ELLA VINO AQUÍ! ¿¡Ves, Dipper!?"
Los ojos de Dipper se abrieron y sus ojos se dirigieron a Ben, quien evitó la mirada de la adolescente. "Oye, tonto." Dijo la pelirroja con una sonrisa.
Ben suspiró, un pequeño sonrojo tiñó su rostro. "Oye, tonto." La niña, a quien Dipper reconoció como Gwen, estaba sentada frente a su prima.
"El abuelo y Stanford todavía no han terminado, ¿eh?" Ben se reclinó en su silla con un resoplido. "Esos dos nerds han estado haciéndolo desde el almuerzo."
Mientras Ben y Gwen hablaban de un lado a otro, Mable tenía una mirada extraña en sus ojos. Dipper reconoció dicha mirada
y rápidamente la llevó a la sala de estar.

"¿Qué? ¿Por qué no puedo decírselo?" Dipper se pellizcó el puente de la nariz. "Son familia, Mable. Primos.
Eso no es exactamente tan tabú como solía ser, pero deberíamos dejar que ellos dos lo resuelvan".
Dipper se metió las manos en los bolsillos y se dirigió hacia el comedor. "Si ella realmente siente algo por él, se lo dirá. O él se lo dirá a ella primero". Dipper miró a Mable, quien parecía bastante sorprendida. "Hermano, ¿cuándo volviste a madurar?" Dipper se rió entre dientes,
sacando su teléfono del bolsillo y mirando los mensajes de texto que le envió a Wendy. "No lo sé, hermana. No lo sé."