Habían transcurrido los días desde aquel día que fueron al mall, en sí había pasado ya un mes; Amy no había conseguido algún empleo aún y se sentía culpable por lo que compró con la tarjeta de su mamá, pero lo bueno es que su madre no estaba molesta o rencorosa con la eriza, después de todo, es hija única, aunque eso no significaba que le tenían que dar todo lo que quiera. Amy se hallaba en su habitación echada sobre la alfombra con los libros que Sonic le había dado para que leyera, y sí cumplió con ello, estaba leyendo mucho sobre la Psicología; teorías, corrientes, condicionamientos, tests, lo básico, pero para empezar estaba bien. Asimismo tenía un diccionario a su para buscar palabras que no conocía. De repente la eriza se pone de pie para cambiar de vinilo, pues se le había apetecido oír Radio Ga Ga, tenía todo una biblioteca de vinilos en su habitación. Regresó a su sitio, y siguió profundizando la lectura, pero de repente oye que su madre, la cual era la única en ese momento que se encontraba en casa, abre la puerta.
Un saludo es lo que escucha Amy, quien decidió ponerse de pie con facciones de confusión en su rostro para así acercarse a la puerta de su cuarto y escuchar de quién se trataba. ¿Qué pasó, cariño?, fue lo que escuchó Amy, al parecer su papá, el señor Rose, había regresado a casa. Amy volteó los ojos, pues no era tan cercana a su padre. "Había olvidado mi billetera", escuchó a su padre decir, generando en Amy decir un "ash". La puerta suena otra vez, suponiendo Amy que su papá se volvió a ir; últimamente estaban sus padres algo distanciados, pareciera que algo iba a pasar, pero Amy intentaba no tomarlo o pensarlo mucho. La puerta suena, por tercera vez, llamando de la atención de Amy, pero creyó que era su papá, pues quizá andaba muy distraído.
"¡Hola, Sonic!", escucha a su madre decir, alterando a Amy, y se puso más nerviosa aún cuando su mamá dijo: "sube, está arriba en su cuarto". Amy se puso de pie rápido y caminaba sin saber qué hacer; pasaba por su tocador, arreglaba sus púas, veía el piso, arreglaba los libros.—¡Hola, Amy! —saludó Sonic con una gran sonrisa al abrir la puerta.
—¡Sonic! ¿Qué te trae por aquí? —saludó Amy nerviosa.
—Vaya, se nota que has estado leyendo —comentó el cobalto al ver todo el escenario en el piso.
—Sí, y la verdad es muy interesante, creo que ya me estoy decidiendo —dijo Amy mientras se dentaba en un lado de su cama.
—Sería genial, así te paso todas las cosas que iré aprendiendo —comentó Sonic sentándose a lado de Rose.
—Apenas irás un ciclo para ese entonces, Sonic —bromeó Amy—. Ni que estuvieras por culminar la carrera —comentó.
—Tampoco era para humillarme —fingió Sonic estar ofendido.
—Bueno, y aún no me has respondido, ¿qué te trae por aquí? —preguntó Amy por segunda vez mirando al erizo.
—Ve hacia tu ventana.
Amy, confundida, se acercó hacia su ventana con curiosidad, y lo que observó fue un hermoso cielo nublado, su jardín limpio con la basura ya recogida en un lado, el buzón de correo; pero vio algo que no era familiar en su visión, y era una vespa color roja muy juvenil y bonita. La eriza estaba confundida, ¿acaso se refería a la vespa el erizo?
—¿Es tuya?
—Absolutamente.
Volteó a mirarlo con una gran sonrisa y se sentó frente a él, esta vez en su silla de escritorio.
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Recuerdos reprimidos [Shadamy & Sonamy AU]
FanfictionAmy Rose atraviesa una de las etapas más complicadas de la vida, la adultez temprana, junto a Sonic y Shadow, dándose cuenta que tiene recuerdos reprimidos.