30- Y eres la culpable

2K 133 10
                                    

Pov Chiara.

Habían pasado dos dias desde la
quedada en la que Violeta quiso hablar. En estos dos dias habíamos quedado todo el grupo otra vez, pero Violeta no volvió a acercarse. Más que nada porque no me quedé sola ni un momento. Le pedí a Ruslana que fuera mi sombra. Oirla pedirme perdón otra vez no sé si lo aguantaría, y ahora mismo ese perdón no se lo merecía.

Hoy sábado íbamos a ir a su bar, pero esta vez sin salir de fiesta luego. Una semana hacia ya de todo y a mi me seguía pareciendo que fue ayer.

Fui al armario a coger la chaqueta y
vi la que le dejé a Violeta en Teruel. Sin poder controlar mis actos, la cogí y olí el cuello de esta. Olía a ella. Cerré
los ojos y la vi enfrente de mi, con mi
chaqueta puesta, girando bajo la nieve.

Volví a mi y con mas rabia que dolor, la eché a lavar.

Rus me espera abajo para ir juntas
al bar. Ya que antes de ir quería cenar
bien para que las cervezas no me
afectaran y liarla otra vez. Cuando salí la vi sonriente. Estaba pasando por un buen momento y se notaba.

- Que contenta te veo amiga- le dije
empezando a andar.

- Porque lo estoy- contestó sonriéndome.

- Entonces con Vicky todo bien, ¿no?- le pregunté.

- Si, es que es otra. Me demuestra todo
y eso es la solución a todo- sus palabras sin querer, me dolieron.

- Claro, es lo suyo- miré al suelo-,
Me alegro mucho de verdad- le dije
pasando el brazo por su hombro.

Cuando llegamos al bar, estos ya iban
por la segunda ronda.

- Parece que esperáis eeeh- dije
quitándome la chaqueta para sentarme.

- No es nuestra culpa que os pese tanto el culo, cariños- dijo Naiara levantando su cerveza.

Se nos acercó el chico para que
pidiéramos. Hoy nos atendía él y no
Violeta. Suspiré aliviada.

- Acompáñame al baño- Me pidió
Vicky.

- ¿Que?- le pregunté muy extrañada.

Cogió mi brazo y me levantó. No me
fiaba nada de ella, pero poco podia
hacer.

Pasamos por delante de la barra para
ir al baño. Ahi estaba Violeta. Con su
lengua fuera mientras limpiaba la
barra con un trapo. Otra vez llevaba el colgante puesto.

- Escuchame, tengo que hablar contigo- Me dijo Vicky nada más cerrar la puerta. Yo me tensé.

- ¿De qué?- pregunté de malas.

- Tranquila, nada que ver con lo tuyo- parecia nerviosa-, es otra cosa.

- Pues tu dirás- dije ya más relajada.

- Pues necesito que me ayudes...- en ese momento entró Rus y Vicky se calló.

- ¿Que hablais?- preguntó Ruslana
sonriendo.

- De un pique luego al SingStar- dije sin pensar.

- Lo veo- dijo Rus entrando al
cubículo.

Vick respiró tranquila por mi
disimulo y salimos del baño. Esta vez
pasé sin mirar hacia la barra. Nos
sentamos y seguimos hablando. Rus
llegó enseguida.

- ¿Ya lo has comentado?- Me preguntó,
captando la atención de todos.

- ¿El que?- pregunté extrañada.

- Lo del SingStar que hablabais- dijo
bebiendo.

Miré a Vicky rápidamente, que casi se
ahoga con la cerveza.

PERMANECER // KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora