Cap 9

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Hyunjin entró al carro con Félix en brazos. Se sentó y acostó a Félix, mientras acomodaba su cabeza en sus piernas. Félix ni se inmutó por aquello.

Clara echó una miradita por el retrovisor a los mejores amigos, viendo cómo Félix estaba muy dormido y con marcas de lágrimas ya secas en la cara. Decidida a preguntar lo siguiente:

—Despertó sentimental hoy, ¿qué hiciste para que esté así? ¿Le hablaste duro o pelearon?

—Ah, no, nada de eso. Solo que quitaron su kdrama fav de Netflix. No sabes el trabajo que es cuidar a Félix en este estado, es todo un bebé, un bebé muy lindo. —Hyunjin sonrió como un idiota por lo último que dijo.

—Umm, ya veo... —hubo un silencio extenso algo incómodo se podría decir.

—Ojalá y cuando Félix me presente a su pareja seas tú. Nadie lo cuidará más que tú, ni lo conocerá tan bien como tú; eres un amor, Hyunjin.

—Ay, ma, no me digas eso, que me sonrojo—dijo Hyunjin, dándole caricias al pelo de Félix y sonriendo aún más idiota que antes.

—Ya admítelo, mi niño lindo, te gusta Félix, hace mucho, ¿no? —preguntó Clara con una sofisticada sonrisa plasmada en su rostro.

Hyunjin miró fijamente los ojos de Clara por el retrovisor y le dio una inocente sonrisa con los ojitos brillantes.

—Es muy obvio, mami —preguntó con esa sonrisa, esa sonrisa que solo grita un idiota enamorado.

—Oh, sí, que se nota. Mira cómo sonríes —Clara respondió.

—Mi amor, si algún día se hacen pareja, no te preocupes por mí, sabes que siempre te escogeré a ti. Tienes todo mi permiso.

Las palabras de Clara hicieron que su corazón se estremeciera.

—Gracias, mamá, eres la mejor.

—Pero no te pongas a experimentar con Félix, a tener sexo. Sabes que Félix es doncel y es demasiado fértil. Estoy muy joven para ser abuela, aunque no creo que lleguen a esos extremos. Félix es un bebé aún, no creo que tenga el atrevimiento de tener sexo con su mejor amigo, él no haría eso y tú menos.

—Ay, ma, ¿cómo crees? Yo no me atrevería! —desde que Clara mencionó "sexo" se le bajó el azúcar y no lo negaba.

—Y si lo hacemos sin querer, o no sé —se excusó Hyunjin, mordiéndose una uña y evitando a toda costa hacer contacto visual con la mujer que manejaba.

Clara frenó repentinamente porque había un semáforo en rojo y por el comentario de Hyunjin.

—No me digas —gritó Clara, mirando hacia atrás, haciendo un ojo lateral.

—Ay, mami, te juro que usamos protección —Hyunjin se lamentó por decir eso en voz alta. Félix lo iba a matar, pero no más que Clara en este momento.

—En la casa hablamos, Hwang Hyunjin —pronunció Clara, amenazante.

Hyunjin tragó saliva, rogando porque se pinchara una goma o se le acabara el combustible para no llegar a la casa, pero lamentablemente nada de eso pasó. Hasta sintió que el camino se hizo más corto de lo normal.

Llegaron y Félix se levantó por el grito que pegó su mamá al salir del carro.

—¡DESPIERTA! ¡YA HAY QUE HABLAR! —gritó la mayor, dirigiéndose a la casa. Félix miró a Hyunjin, el cual se encontraba orando hasta la Ave María y ni católico era.

—¿Qué le dijiste y por qué me está gritando? —sollozó Félix, con ojitos cristalizados.

—Yo le dij... —Hyunjin fue interrumpido por Clara, quien gritó que fueran rápido a la sala. Clara los sentó en el mueble de la sala, quedando frente a ellos. Félix no entendía nada y Hyunjin estaba a nada de ponerse de rodillas.

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