Al acabar la desastrosa prueba, volvimos al salón de clases. Debo admitir que el edificio de la UA es gigantesco; cualquiera al entrar podría perderse fácilmente. Por eso seguí a un chico alto, de pelo azul y con motores en las piernas, para no perderme. Tenía pinta de saber lo que hacía. Seguía sumida en mis pensamientos hasta que entré al aula y tomé asiento. Mi asiento está detrás de una chica de pelo negro. Realmente debería aprender sus nombres; tratarlos por sus colores de pelo y quirks no es muy cómodo, para ser honesta.
Al no tener nada que hacer y viendo que por ahora las clases estarán pausadas ya que pronto iniciará el almuerzo, empecé a analizar a mis compañeros de clase, sobre todo al peliazul veloz y al chico de pelo blanco y rojo. Se me hacen conocidos; estoy segura de que debo haberlos visto antes. O estar sola tanto tiempo con el pollo de Keigo me está afectando.
Ya sé... Al menos recordé que el de pelo blanco y rojo es parte de la aclamada familia Todoroki, porque además de escuchar que el peliverde lo llamara así, cuando era niña mis papás me llevaban a eventos. Creo que no lo mencioné, mi familia paterna está llena de héroes bien vistos en la sociedad, por lo que me llevaban a lugares llenos de héroes famosos y sus familias. Por eso supongo haber visto al chico ahí. Ahora solo debo recordar de dónde conozco al peliazul veloz.
Supongo que hablar con él me quitará la duda, aunque me da pena porque ya parece que tiene un grupo de amigos con el peliverde y una chica de pelo marrón. Ya nada, hora de hablar. Igual, errores muchos y aún soy joven. Pero, ¿y si les hablo y quedo como loquita y luego nadie me habla, y a pesar de mi poderosa familia me quedo sola y no hablo con nadie más que el pájaro por el resto de mi vida, y muero con 20 gatos en un mini departamento? Bien, ya estoy sobrepensando mucho y ya están empezando a salir todos del salón para el almuerzo, y como dije, total no pierdo nada hablando.
—¡Hola! —dije con el tono más amigable posible a los tres chicos que tenía frente a mí—. Disculpen que les moleste, pero ¿podría ir al almuerzo junto a ustedes? —Mientras decía eso, tenía unas ganas increíbles de enterrarme viva o pedirle al pollo que me tirara al vacío para no volver ni tener que hablar con más gente.
—¡Hola, sí, claro! —respondió el peliverde con algo de entusiasmo en su tono de voz—. Creo que aún no nos hemos presentado, soy Izuku Midoriya —dijo estirando su mano como forma de saludo.
—Un gusto, yo soy Tn Kobayashi. No he tenido tiempo de hablar con nadie de la clase, pero espero que nos llevemos todos bien —dije mientras sonreía, algo apenada al olvidarme de un detalle tan importante como lo es presentarse al hablar con alguien nuevo.
—¡Hola, yo soy Ochako Uraraka! Él es Tenya Iida. Ven, vamos a comer, tengo ganas de mochis, espero que haya en la cafetería —dijo la chica pelimarrón con demasiado entusiasmo mientras me agarraba del brazo y nos alejábamos de ambos chicos al dirigirnos con más velocidad hacia la cafetería.
—A mí también se me antojan los mochis, pero primero quisiera algo de katsudon. He escuchado que la comida de la cafetería es deliciosa —dije mientras pasábamos por la puerta.
Para no hacerles larga la historia, almorzamos todos juntos y, al convivir con el peliazul, que ahora sé que se llama Tenya Iida, también lo conocí como a Todoroki, sin embargo, en un evento diferente y siendo ya niños como de 10 años. Por eso su cara se me hacía demasiado conocida, aunque no toqué el tema; capaz y ni se acuerda. Terminamos de comer y fuimos a clases. Era la primera clase con All Might y, según lo que sé, su primera vez siendo maestro. Realmente no sé qué esperar, solo queda observar.
—¡Yo estoy entrando como una persona normal! —gritó All Might entrando al salón de clases mientras la mayoría de la clase lo observaba con sorpresa.
—¡Llegó All Might! —dijo con sorpresa un rubio con un rayito negro en el pelo; se parece mucho a Pikachu.
—¡Vaya! Era verdad que es profesor —dijo otro chico igualmente sorprendido.
—Ese traje parece de la Edad de Plata, ¿no? —dijo una chica de pelo verde.
—Impartiré "Entrenamiento Básico de Héroes". Aquí practicarán los conceptos básicos de cómo ser un héroe. Será su materia con más horas. Empecemos ya, hoy tendrán batalla, ¡entrenamiento de combate! —dijo mientras sacaba una tarjeta que decía "batalla"—. Para hacerlo, tendrán que ponerse esto —hablaba mientras señalaba en la pared donde aparecían cajas con números—. Trajes hechos con base en sus dones y las solicitudes que enviaron antes de empezar.
Ahora que lo recuerdo, ¿qué había pedido yo como traje de héroe? Supongo que en un momento lo descubriré, eso me pasa por andar en las nubes.
—Después de que se cambien, vayan al campo Beta —agregó antes de que pudiéramos salir a los respectivos vestidores de primer año. Al revisar mi nuevo traje, se ve bonito aunque ahora que lo pienso, al ser la camisa de manga larga no va a ser muy cómodo; creo que lo voy a mandar a arreglar en la tarde. Pero definitivamente amo los bolsillos que tengo, puesto que yo puedo controlar los elementos, más no crearlos, y así voy a poder tener acceso a agua, fuego y tierra siempre que me sea necesario.
Al acabar de ponerme el traje, salí junto con Uraraka hacia el campo beta. Me alegra haber hecho una amiga, aunque en el camino no hablamos casi nada, y me dio vergüenza decirle que su traje me parecía realmente bonito.
—Dicen que el traje es lo que hace al héroe, jóvenes hombres y mujeres. Ténganlo presente porque, a partir de ahora, ustedes son héroes —dijo con una sonrisa en su cara y, tras hacer una pequeña pausa, volvió a hablar—. Es fantástico. Todos lucen geniales. Entonces, ¿empezamos, aprendices de héroe?