Kim había despertado esa mañana con más energía, había pasado alrededor de 3 días desde la gran velada por los Park y Hwang Hyunjin.
Seungmin reconocía que esos últimos instantes no podía sacar al chico de su cabeza y eso estaba empezando a molestarlo demasiado, por lo que se cambió y fue a la parte trasera donde se hallaban los caballos de su padre, tomando una para pasear por el alrededor.
Aseguro las correas y el bolso que llevaba en su hombro, amarro la capa negra y se puso la capucha, poniendo su pie derecho en el estribo para tomar impulso y colocar el otro pie en el otro extremo, tomando las riendas.
— Vamos amigo —tiro de ellas para sentir como empezaba a andar.
El clima estaba denso, la niebla era apenitas, el sol aun no salía, pero era de notarse que iba a quemar cuando ya fuese tarde.
El castaño jalo de las correas para que valla más lento, y poder ver como empezaba a ser más angosto el camino.
Kim estiro sus brazos y soltó un bostezo cuando su rostro choco con una rama y soltando un leve jadeo sobando su nariz, abrió los ojos cuando sintió que su caballo freno y frunció sus cejas.
— Valla, pero si el destino nos quiere juntos —dijo el contrario.
Seungmin rodo los ojos y empezó a dar la vuelta para ir por otro lado, escuchando como el caballo negro se colocaba a apenas a su lado rozando las botas.
— ¿A dónde te diriges? —inquirió hyunjin, sobando el cabello de su yegua.
— Que te importa.
— Mucho. —asintió el pelinegro— ¿Puedo ir contigo?
El castaño giro su rostro mirando como el otro lo estaba ya mirando, teniendo que desviar la mirada, escuchando una risa burlesca que le hizo soltar un bufido.
— No vez que disfruto tu compañía —ironizo la frase.
— Lo noto.
— ¿Así como también el sarcasmo? —soltó un suspiro cuando el camino dejo de ser más angosto y pudo alejarse un poco de el contrario— ¿Qué haces acá?
— No te estoy siguiendo si es lo que piensas —dijo con las manos en alto— por ese camino te lleva a mi posada y había decidido salir un rato ya que alguien ha estado en mi cabeza estos días —Hyunjin miro de reojo al castaño que no dejaba de mirar al frente y apretó sus labios— ¿podemos caminar?
Kim negó, pero luego de un rato silencioso e incómodo paro el andar del cabello para poder bajarse y caminar hasta un árbol, aun siendo consciente que Hwang lo estaba siguiendo desde hace buen rato. Amarro las riendas al árbol y saco una manzana de su bolso marrón, yendo al caballo del contrario a darle algo.
— Oh —abrió sus ojos el de cabellera larga— gracias por eso, no había traído nada.
— Claramente no —le fulmino acariciando el lomo de aquel caballo bien cuidado.
— Se llama Sum.
El de piel canela asintió sin querer seguir hablando y se fue a sentar bajo el árbol, viendo por el rabillo del ojo como Hwang se movía a amarrar a sum al mismo árbol que a Amigo.
— ¿Qué vas a leer? —consultó cuando estuvo sentado al lado suyo.
Alejándose apenas, le extendió el libro, viendo como la mano contraria lo tomaba.
— "Dime como poder amarte" —leyó el titulo— se escucha muy triste.
— No lo es —recibió el libro de tapa amarilla.
— ¿Ya la empezaste? —y vio como Kim asentía— ¿y de que trata? Siendo honesto y para no mentirte, no me apasiona la literatura, pero respeto a los lectores que se pasan la vida entre páginas y líneas.
— Lo tomare como un cumplido —sonrió de lado— pero bueno, trata sobre una mujer que toda su vida ha sido en cumplir las reglas de la familia real... —Seung miro como Hyunjin prestaba atención mientras jugaba con algunas hojas del suelo y no pudo evitar mirar la pequeña cicatriz en su mejilla, pero giro su rostro cuando sintió que estaba pensando de más— ajam... —aclaro su garganta— en uno de los días que estaba recibiendo clases de esgrima-
— ¡¿Esgrima?! —consulto asombrado— valla, olvídalo, prosigue.
— Apareció un hombre, ella conocía a todas las personas de su palacio puesto ver a ese legitimo rey le parecido muy extraño pero la cautivo por su cordialidad y belleza. El problema sucede cuando ella se da cuenta que no sabía nada de lo que estaba sintiendo, pero el muchacho estaba dispuesto a mostrárselo.
— Espera —apresuro a decir Hyunjin con las cejas fruncidas— ya la leíste —sentencio.
— Es una buena novela —se encogió de hombro.
— ¿Y cómo termina? —se enderezo en su lugar.
Kim le extendió el libro de tapa amarilla, viendo como le fruncia sus cejas y agarraba la obra, aun si quitarle la mirada a Kim, quien ya empezaba a sentirse algo nervioso.
— ¿Por qué me lo das?
— Ya que nunca has leído algo, que esta sea tu primera vez haciéndolo con una que te ha llamado la atención.
— Pero... —apretó sus labios algo disgustado, aun así, asintió soltando un leve suspiro— al menos dime si termina bien, que nadie muere porque no aguantaría la ansiedad.
— Descuida —apoyo su mano en su hombro— los libros de esta autora siempre terminan bien, ya sea casados ambos o muertos los dos.
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Libro de Amor (Yuanfen) HYUNMIN
RomanceEl sol tocó su punto en el cielo, haciendo que varios rayos de luz se vieran por todo el pequeño pueblo de B'Teams, pero eso no era lo único, sino los que vivían en ella. Toda la gente era demasiado noble, se ayudaban entre sí, festejaban como en fa...