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-Jennie mi amor el desayuno está listo- gritó Rosé sirviendo en los platos los huevos revueltos que había preparado para la pequeña- Jennie- volvió a llamarla hasta que por fin la pequeña apareció en la cocina abrazando a su rosado peluche

-Buenos días mami- saludo sentándose en la mesa que estaba frente a la cocina, Jennie suspiró sonoramente llamando la atención de Rosé

-¿Estás bien mi amor?- preguntó- desde ayer estas apagada ¿No estás feliz de que desperté?- preguntó

-Claro que si mami- se apresuró a contestar, la rubia colocó el desayuno en la mesa y tomó asiento frente a su hija- es solo que....mamá estaba llorando ayer- dijo agachando la mirada- yo no quiero que ella esté triste

-¿Estaba llorando?- preguntó tratando de ganar tiempo sin saber qué responder

-Mami- se quejó, no había manera de mentirle a Jennie- yo creo que está triste porque vine contigo

-Mi amor ya desperté, tenías que volver conmigo a casa, con mamá- trató de explicarle suavemente

-Ella también es mi mamá- Rosé tuvo que apretar los dientes para no soltar ningún comentario que dañara a su hija, al parecer Jennie ya estaba lo suficientemente encariñada con la pelinegra- ¿Por qué no dejas que ella venga aquí? Así no está sola

-Porque ella tiene su apartamento y debe cuidarlo

-Entonces vamos a vivir con ella- le pidió- tú puedes dormir con ella y yo en mi habitación, ya sé que ustedes eran novias y se besaban en sus bocas ella me lo contó- la rubia no sabía si reír ante la inocencia de su hija o ir a matar a Jisoo por soltar su lengua

-Yo debo cuidar de esta casa- trató una vez más- además ya estoy aquí, no necesitas otra mamá, yo voy a cuidarte siempre- Jennie suspiró sonoramente y asintió con la cabeza- ahora desayuna que luego iremos a ver a tía Somi y tía In-ah que se pondrán muy contentas al saber que regresaste

-Esta bien- dijo sin estar muy convencida- pero ¿puedo ir a ver a mamá mañana?

-Ya lo veremos- respondió levantándose de la mesa- ahora desayuna

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Jisoo entró a su oficina sorprendiéndose al notar quien la esperaba, aquel día había llegado un poco más tarde porque tuvo que pasar por su departamento a alistarse y luego salir al banco, aunque había dormido sin interrupciones y por al menos nueve horas su cuerpo de sentía agitado, al parecer su cansancio emocional estaba afectándola.

-¿Qué haces aquí mamá?- preguntó sacándose la chaqueta y colgándola en su perchero para luego tomar asiento

-Dime por favor que Jennie está en clases y que tardaste porque pasaste a dejarla- dijo con alguna lágrimas en los ojos

-Lamentablemente no- dijo suspirando- Siento no haberte llamado ayer, no estaba en condiciones

-¿Entonces Rosé fue a tu casa?- preguntó

-Si y se llevó a Jennie- trató de mantener su compostura- además tengo un juicio dentro de un par de días y me pidió que renuncie a cualquier derecho que pudiera tener sobre Jennie

-No pensarás en acceder a semejante locura- Jisoo no respondió y simplemente miró hacia afuera y la maravillosa vista que tenía- No puedes hacer eso, es tu hija es mucho más hija tuya que de ella ¡Jisoo!- gritó llamando su atención

-No lo sé mamá- dijo rompiendo en llanto y Jiwon se levantó a abrazarla- yo no quiero separarme de Jennie pero tampoco quiero que me odie

-Jennie te ama- dijo mirándola a los ojos- no hay manera de que deje de hacerlo

NO ME RENDIRÉ || CHAESOODonde viven las historias. Descúbrelo ahora