Era un día como cualquier otro en la escuela, los populares rodeaban a Hyein en el patio, burlándose de ella por su apariencia y sus gustos "raros".
-¡Miren a la tonta nerd¡ Seguro está estudiando para algún tonto examen, típico de nerds-se burló uno de los chicos, provocando risas entre sus amigos.
Hyein apretó los puños con impotencia, tratando de ignorar las palabras hirientes que le lanzaban. En ese momento, T/n la nueva estudiante de intercambio apareció en escena, con una expresión determinada en el rostro.
- ¿Qué hacen todos ustedes tontos? -preguntó T/n, mirando fijamente a los abusadores con una mirada desafiante.
Los populares se quedaron momentáneamente sorprendidos al ver a T/n enfrentándolos, pero rápidamente recuperaron la compostura y se burlaron de ella también.
- Oh, miren a quien tenemos aquí , la chica nueva valiente que defiende a la estupida nerd. ¿Qué te importa lo que pase con ella? -dijo una de las chicas con tono despectivo.
T/n se acercó a Hyein y le tendió la mano, ofreciéndole ayuda para ponerse de pie.
- Me importa porque nadie merece ser tratado de esta manera, personas como ustedes me repugnan. Y si quieren meterse con ella, primero tendrán que pasar sobre mí -declaró T/n con determinación.
Hyein miraba a T/n con los ojos brillantes de gratitud y admiración. Nunca antes alguien se había atrevido a enfrentar a los abusadores por su causa, y mucho menos una persona de reciente ingreso como T/n.
Los populares intercambiaron miradas incómodas entre ellos, sin saber cómo reaccionar ante la firme postura de T/n. Finalmente, optaron por retirarse murmurando insultos cobardes a sus espaldas.
Una vez que los abusadores se alejaron, Hyein se volvió hacia T/n con una sonrisa temblorosa en los labios.
- Gra.. gracias por defenderme. Nadie nunca se tomaba la molestia de ayudarme y yo sola no lo lo conseguía -susurró Hyein, sintiendo un nudo en la garganta por la emoción.
T/n le devolvió la sonrisa y le rodeó los hombros con un gesto reconfortante.
- Siempre estaré para ti, Hyein. Eres especial y mereces ser tratada con respeto y amor, no permitiré que nadie te lastime nunca máster -aseguró T/n con sinceridad.
Y así, entre palabras de aliento y gestos protectores, la amistad entre Hyein y T/n se fortaleció aún más, convirtiéndose en un vínculo indestructible basado en el apoyo mutuo y el amor incondicional.