Faye Peraya, una mujer que en parte de su infancia lo tuvo todo, pero la vida no fue justa con ella, Yoko Apasra, una mujer que a pesar de estar rodeada de lujos su familia la ve como un estorbo a excepción de su abuelo. Sus caminos fueron unidos p...
La vida es un libro que es complicado de interpretar, para fortuna de muchos, para la desdicha de otros, todo está milimétricamente escrito y no podía cambiarse, de hecho nada podría estar basado en casualidades, esta no me cabe duda de que es una idea perfecta para romantizar como la trama de la vida empezaba a mostrar los cambios necesarios para que su protagonista pudiera comenzar a crecer de nuevo y florecer de alguna u otra forma, así el camino fuese el más difícil que pudo haber imaginado forjando carácter y nuevos aprendizajes. Eso lo había entendido prácticamente desde que nací, todo en mi familia estaba milimétricamente escrito no podía haber cambios, no por el bien de nuestro nombre, nuestra reputación, nuestra imagen ante el mundo.
Mi nombre es Lertprasert Apasra, sin embargo, mi abuelo desde niña me dice Yoko y es el nombre con el que la mayoría de las personas que conozco me suele llamar, he crecido rodeada de privilegios, por lo cual la gente debe pensar constantemente que mi vida es sencilla y sin preocupaciones, como la nieta preferida de Khun Sakda, pero esto estaba muy lejos de la realidad, muy a mi pesar mi vida era de todo menos fácil, aunque era consciente que mi abuelo me amaba con locura por ser la única persona que lo entendía y mostraba un interés genuino de su compañía y su amor, toda la familia Apasra sentía un gran desprecio sobre mí, llamándome de diversas formas, como el estorbo de la familia, la inútil que siempre estaba cerca del abuelo para protegerse o conseguir algo a cambio, la verdad no me interesaban las riquezas, lo único que deseaba era sentirme amada, apoyada y protegida.
La vida ha sido dura conmigo, quizá no he vivido calamidades, pero estoy segura que no merecía nada de lo que me pasaba, pero esto no hacia que creyera en que una casualidad cambiaria mi vida y la haría mas llevadera, sin embargo de algo estaba segura, no estaba lista para el cambio de trama que tendría mi vida, no estaba lista para entender que las casualidades si existían y que esa, la única y mas hermosa casualidad en la que creería y además podría nombrarla, Faye, mi más hermosa casualidad jamás imaginada, cambiaría mi vida para siempre.
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