My favourite loser | Huskerdust

2: The extermination

Mientras miraba alrededor de los escombros del hotel después de que los exorcistas se hubieran ido, Husk no pudo evitar mirar a Angel y agradecer a... ¿Dios? Eh, gracias a todos y a todos... porque su amigo araña había sobrevivido. No es que Husk hubiera dudado ni por un segundo de que Angel no podía manejarse solo, pero aun así estaba más que aliviado. Angel estaba abrazando a Cherri, quien acababa de ver al hombre que había besado momentos atrás, bueno, evaporarse.

El grupo se quedó en silencio por un momento, pensando en el soldado caído y su sacrificio, y por primera vez en mucho tiempo, Husk se encontró rezándole a alguien, a cualquiera, que Charlie tuviera razón acerca de la redención después de todo: joder, si alguien la merecía. para ser redimido, era Pentious. Husk soltó una pequeña risa para sí mismo, pensando en el demonio serpiente apareciendo en el cielo; Cómo deseaba poder ser una mosca en la pared en ese momento.

Todos se reunieron en las ruinas del hotel, recomponiéndose lo mejor que pudieron. Lo habían hecho, habían sobrevivido. Por supuesto, extrañaban a algunos miembros de su loca familia y eso dolía muchísimo, pero Adam estaba muerto y, por ahora, estaban a salvo.

"Hciste bien, chico", dijo Husk refiriéndose a Sir Pentious mientras se acercaba a Angel, "Tú también, Cherri. Lo siento por Pentious, él era... bueno, era uno de los buenos y extrañaremos a ese bastardo resbaladizo por aquí."

"Sí", sonrió suavemente, "ese cabrón estaba bien". Ambos fueron abrazados abruptamente por Angel, quien los rodeó con sus seis brazos con fuerza. "Estoy tan feliz de que todavía estés aquí", le susurró al oído a Husk, "Realmente feliz". Husk sintió que su corazón se aceleraba mientras apretaba a su amigo; tal vez no estaba tan frío y muerto después de todo.

El trío se soltó el uno del otro (aunque Husk estaba seguro de que Angel lo soltó mucho más lentamente que Cherri) y comenzaron a ayudar a los demás a limpiar los escombros. Fat Nuggets saltó hacia Angel, quien rápidamente lo levantó y lo acurrucó contra su esponjoso pecho.
"Papá te tiene, mi dulce principito", le susurró Angel al oído, dejando besos por toda la cara del cerdo. Husk miró con una sonrisa, sabiendo lo mucho que significaba para Angel que su mascota estuviera sana y salva.

El equipo se puso a trabajar reconstruyendo el hotel poco a poco hasta que fue más grande y mejor que antes. Husk notó que dondequiera que fuera, Angel nunca estaba lejos, hasta que se acercó mientras Husk estaba a punto de colgar el nuevo letrero del bar.

"Déjame ayudarte con eso, Whiskers", dijo mientras ponía su mano sobre la de Husk, "No quiero que te lastimes ni lo que sea". Husk abrió la boca para protestar que era perfectamente capaz de colgar el cartel por sí solo y que Angel no necesitaba fingir ser de ayuda, hasta que notó lo agradable que se sentía tener las manos de la araña sobre las suyas, se sintió... natural.

Husk miró sus manos entrelazadas y luego miró a Angel, que le devolvía la mirada. Cuando Husk vio su mirada, Angel tosió y apartó las manos, como si le avergonzara haber sido sorprendido mirándolo.

"Voy a ayudar a Cherri a arreglar esa pared de allí, nos vemos luego", tartamudeó, antes de darse la vuelta y alejarse rápidamente. Husk estaba a punto de seguirlo, cuando Charlie se acercó y le pidió ayuda para montar el nuevo bar. Supongo que descubriré qué está pasando con él más tarde, pensó mientras se giraba y seguía a la princesa.

Angel caminó hacia Cherri tan rápido como sus largas piernas le permitieron, casi chocando contra ella en su prisa por evitar avergonzarse nuevamente.

"Maldita sea, Angie, ¿qué te molesta?" preguntó mientras él se agachaba a su lado con la cabeza entre las manos.

"Solo soy un maldito idiota para variar, qué hay de nuevo..." murmuró, antes de mirar a través de las patas de la mesa para ver si Husk se había ido.

"¿Qué has hecho esta vez?", suspiró Cherri.

Pensó en mentirle, pero sabía que al final ella le sacaría la verdad.

"Husk simplemente me sorprendió mirándolo después de que puse mi mano sobre la suya, estaba tan avergonzado - Ni siquiera sé por qué estaba mirando a Cher, algo se apoderó de mí y no pude evitar mirarlo a él, tocarlo..." balbuceó, antes de notar que Cherri reprimió una risa.

"¿Qué es tan gracioso?" preguntó indignado.

"Oh, Angie, cariño, estás totalmente colado por ese viejo gato gruñón", se rió.

La araña frunció el ceño por un momento, antes de que su rostro decayera. "¿Es tan obvio?" le susurró a su amiga, mirando a su alrededor para asegurarse de que Husk no estuviera al alcance del oído.

"Cariño", dijo con una sonrisa, "es obvio para todos menos para ti y para él. Joder, hazlo, digo, ¿por qué no? ¡Podrías aprovechar al máximo tu tiempo libre en este infierno!"

Angel consideró las palabras de su mejor amiga por un segundo; ¿Valió la pena arruinar la amistad que había construido con Husk solo para que lo rechazaran? ¿Husk lo rechazaría? No estaba seguro de querer correr ese riesgo y enfrentar otro desamor.

"¿Estás bien ahí abajo, Piernas?" escuchó decir una voz ronca, sobresaltándolo. Intentó levantarse rápidamente pero se golpeó la cabeza con la mesa encima de él, antes de caer no tan grácilmente sobre la figura robusta pero suave detrás de él.

"Umm, sí, solo, err... se me cayó un pendiente, eso es todo", dijo, girándose para mirar a Husk, con un sonrojo ahora familiar arrastrándose por su rostro. "¡No estoy tratando de esconderme de ti ni nada, jaja!" Bien Angel, jodidamente bien.

"¿Te sientes bien?" preguntó Husk, con preocupación en su rostro, "¿Hice algo mal?"

Cherri tomó esto como una señal para escabullirse, dejándolos a ambos allí de pie, incómodos.

"No, por supuesto que no Husky, yo solo..." suspiró Angel, pasándose la mano por el cabello, "Solo estoy intentando procesar algunas cosas en mi cabeza".

Husk le dedicó una pequeña y dulce sonrisa. "Bueno, si necesitas un barman, o un amigo, con quien hablar sobre esas cosas, entonces siempre estaré aquí para ayudarte". Le dio un ligero apretón al brazo de Angel, antes de darse la vuelta y regresar al bar para pasar la noche.

Angel volvió a sentir ese latido en su corazón. Oh no, pensó, estoy jodido.