Nuestro atardecer

𝟗- 𝐄𝐥 𝐝í𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨𝐬 𝐜𝐨𝐧𝐨𝐜𝐢𝐦𝐨𝐬

Parte narrada por Oliver:

Los problemas familiares son una mierda.

En todas las familias hay problemas, algunos peores y otros mejores.

Pero en la mía, es un infierno.

Solo se escuchan gritos por todos lados, peleas, ( que por suerte no llega a manos), insultos...

La verdad es que estoy harto.

Si algún día alguienme preguntara. ¿Cómo puedes seguir viviendo haci?

Yo le respondería que no quería vivir, hasta que llegó Ada.

Ella fue la pequeña estrella que vi en la oscura.

La que me hizo sonreír por primera vez después de mucho tiempo.

La que me hizo entender que la vida hay que vivirla, (aunque aveces cueste.)

Conocí a Ada hace trece años, cuando eso, yo era "el pequeño Oli."
El pequeño niño comprensivo que nunca se metía en problemas, ni los creaba.

Flashback...

Voy caminando por una calle lo más rápido que puedo con mis pequeñas piernas.

Hasta que tropiezo con una piedra.

Me caigo y se me raspa las rodillas y las palmas de la mano.

-Au- gimo de dolor.

-¿Estás bien?- me pregunta una niña mientras se agacha a mi lado.

-Si, solo me caí.- le miento.

-Mentir está mal- me recrimina con los brazos cruzandos.

-Quién te ha dicho que estoy mintiendo.-

-Solo hay que mirar tus manos, te haz hecho pupita.-dice preocupada.

-¿A ti qué más te da si me he hecho daño?- respondo brusco.

-Tienes una herida hay que curarla.- es lo único que me responde antes de seguir caminando y perderse a lo lejos.

-La gente si que es rara.- niego con la cabeza, tanta historia para que al final se fuera.

Al fin de cuentas a nadie le importo.

Paro de pensar cuando veo a la niña de antes venir corriendo hasta mi, con una mochila en las manos.

-Lo siento por tardar.- dice agitada.

-¿Por qué haz vuelto?-

-Para curar tus heridas.- responde como mucha normalidad.

-¿Por qué la curarias tú?- le vuelvo a preguntar.

-Porque si no, nadie las curaria.-

Lo siguiente que hace es cogerme las manos con delicadeza, y limpiarlas con agua.

Creo que en lo poco que he vivido nadie se ha preocupado tanto por mi.

Nunca nadie me ha tratado con delicadeza.

Y me pregunto ¿De dónde salió una persona tan amable? como está niña.

-Listo.- no se en que momento termino.

-Gracias.-

-No te muevas que me olvide de algo.-

La miro extrañado, ya vastante es que me limpio las manos y me las secó.

Pero ella sigue buscando en esa pequeña mochila de abejas.

-Lo encontré.- saca un papelito que me lo coloca en la mano, me doy cuenta que me puso una tirita de un animal.