Capítulo 6

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No, no se había controlado.
Demasiado estrés y estupideces de los demás lo hacía explotar, y qué mejor que deshacerse de eso teniendo una ronda de sexo.
Esperar a que el peliverde termine de vestirse era irrelevante para Jaekyung. Debía saber si Dan se había quedado ahí. De ser eso, tendría que hacer lo que para menos humor tenía.
Y si pasaba, tendría que tomarlo ahí mismo.

El castaño ya estaba regresando por dónde se había adelantado.

—¿Por qué tardas tanto?

—Lucir bien cuesta, gracias –dijo con notable molestia.

—Apresúrate –dijo saliendo del callejón, chocando con un cuerpo más pequeño.

—¡Lo siento! Eh, ya he revisado y todo está despejado.

—Bien, entonces vámonos –arreglando su ropa, quitando el polvo que esta tomó cuando fue empujado a la pared.

—¿No deberíamos ir primero por los demás?

—¡Hyung!

La voz de Daehyun respondía a la pregunta de Dan.

—¡Hyung, mire lo que encontramos!

—¿Qué es eso?

—Cosas de... ¿Alguien que vivía?

—¿Ropa?

—Nos sirve, hay que volver mañana al centro comercial con más armas y los demás para conseguir.

—Hay que regresar, me estoy congelando.

Ni siquiera hace frío –susurró Dan.

Y caminaron de nuevo hacia el  carro para volver a su refugio.
Bueno, en ningún momento Dan tuvo oportunidad para hablar con el peliverde y pedirle el brazalete.
Seguía pensándolo mientras bajaban del carro y llegaban a la entrada del refugio, junto a la pequeña corriendo hacia él, abrazando su pierna derecha.

—Hola, oppa.

¿Por qué lo llamaba así?

—H-hola Minyo.

—Ya estamos por cenar –Namwook se acercaba respirando débilmente.

—¿Qué jugaron mientras nos esperaban?

—Las escondidas –dijeron juntos, pero Namwook sonó más cansado que ella.

—Bien, vamos a cenar –se acercó Yoongu.

—¡Papa, ven a ayudarnos!

—¡Van a hacer que cene mañana! Ya me voy.

—¡Quiero ayudar a Papa! ¿Puedo ir?

Eso también es raro, pues ¿Por qué le pregunta como si fuera su padre?

—Claro que sí, iré por ustedes cuando ya esté servida la cena.

—¡Siiiiii! –y tomó la mano de Yoongu para que la guiara.

Yoongu ahora se sentía aceptado por la pequeña, a pesar de haber dicho que no lo querían los niños, su personalidad le daba curiosidad a la pequeña, aparte de que era como un niño, para la  pequeña solo eso significaba una cosa; diversión, nada de aburrimiento y más diversión.

Después de pensarlo un poco más, tomó la mejor decisión, olvidar que se llevaban algo mal y mejor preguntar y reclamar su brazalete, pero de verdad tenía miedo de que le dijera que ya no lo tenía con él, como si lo hubiera perdido en algun momento del dia.
Decidió descartar eso ya que justo el peliverde lo tenía bajo su campera.

—Hmm, oye... ¿Podrías darme... Mi brazalete?

—Estoy ocupado.

—¿Por qué molestas tanto por un simple brazalete? –Jaekyung pasó por un lado y tenía que hacer eso.

Eso hizo que se quebrara. Él no sabía nada de él, por eso no sabía porque lo quería tanto de vuelta. Porque no era un simple brazalete, era EL brazalete que le había dado SU abuela.

—Es... Muy valioso para mí.

—Si tanto lo quieres, demuéstralo.

—¿Q-qué?

—Demuéstralo. Como... Sal de aquí sin nada armas. Si vuelves, te lo daré.

Esto estaba siendo muy... Infantil por parte del peliverde.
Pero no estaba dispuesto a hacer tal cosa, aún si le daba el brazalete. Prefería otra cosa como otro "reto".

—¡No voy a hacer eso! No lo haré.

—Entonces, ¿no quieres el brazalete?

—¡Si lo quiero! Pero..., No haré eso.

—Cobarde, ven –lo jaló del brazo y lo arrastró a la salida.

Una vez en el portón el peliverde lo abrió y se quitó el brazalete para dárselo a Dan, cerró la puerta detrás suyo, saliendo del refugio burlándose de Dan por ser "cobarde" porque no había nada afuera, supuestamente.
Hasta que una gran cantidad de zombies se acercaron corriendo, para estar deformados, podían correr.

El peliverde se paralizó y Dan también.

Pero el primero empezó a correr hacia donde sea, no importaba el rumbo, solo perder a los zombies.
Dan intentaba abrir el portón y darle paso, pero el seguro se había trabado, por el pánico pateó el cerrojo y tomo del brazo al peliverde intentando salvarlo.

—¡Suéltame! –siendo arrastrado por Dan.

—¿Estás bien? –cerrando el portón.

—Si, por poco muero.

No, ese gracias no llegaría jamás.

—Volvamos antes de que venga alguien. Por cierto, gracias por devolverme el brazalete.

—Solo por eso estabas jodiendo, idiota.

Bajó la mirada nervioso, e incómodo rió.

—¿Quién demonios salió? –Jaekyung estaba que echaba humo por los oidos.

—Estamos jugando, es todo –lo dijo como si hubiera sido lo más seguro.

—Lo sentimos.

—Solo él, no es mi culpa que sea un cobarde.

El burro hablando de orejas.

Cómo si él no tuviera miedo igual al de Dan.

Después de quedar más pálido que el papel, decía eso con el semblante más tranquilo. Caminando de nuevo dentro al refugio, con un cabiz bajo, sintiéndose culpable de lo que pasó hace ya una media hora.

Ya eran pasadas de las once, así que la pequeña ya se debía haber dormido junto con Yoongu, al entrar al lugar dónde dormían, pudo sentir tranquilidad. Se recostó junto a la pequeña y cerró los ojos, sonrió por el brazalete recuperado, y ahora si lo cuidaría con su alma.

Debido a lo cansado que se sentía por todo lo que había ocurrido en todo el día, demasiado estrés y movimiento lo habían puesto al mínimo. Su energía suponía que debía estar menos cien, todo lo que había corrido y sacudido su cuerpo, lo dejó por completo cansado, tanto que solo dejo su mente en blanco unos segundos y se durmió muy profundamente.

Tanto que hasta sintió un poco más suave dónde dormía, que era una especie de tapete delgado que estaba directamente en el piso, con solo una manta, pero era como un tapete hecho del algodón más fino y suave del universo.
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Edit:
Lo siento, pensé que ya los había subido. Me dió por entrar para escribir el próximo cap, y me di cuenta que no estaban publicados. 😭

Apocalypse Sex [Español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora