𝐍𝐎𝐕𝐈𝐎

549 45 18
                                    

Cristian se sentía aturdido, no era muy fan de las juntadas familiares donde venían hasta los primos segundos con los que ni siquiera tenía relación, realmente odiaba esos asados

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cristian se sentía aturdido, no era muy fan de las juntadas familiares donde venían hasta los primos segundos con los que ni siquiera tenía relación, realmente odiaba esos asados. Pero ese día no estaba pensando en eso, su cabeza estaba en otro lado, o más bien en la persona sentada a su derecha, Lisandro, su algo.
Ambos se habían conocido ni bien empezaron la secundaria, y su amistad perduró todos los años, hasta llegar a este, su último año escolar, dónde ambos confesaron sentirse atraído por el contrario. Decidieron ir despacio, no querían arruinar su amistad ni tampoco apurar las cosas, solo dejar fluir todo, pero la verdad es que ambos se morían por estar de novio con el otro.
Miro a su acompañante, quien charlaba tranquilo con su prima, Lisandro ya era uno más en la familia Romero, desde que ambos se volvieron mejores amigos se la pasaban de casa en casa, por lo que eran parte de la familia del otro. Cuando se armaba alguna juntada en las familias, debían invitar al otro, si no sus parientes se enojarían al no verlos.

-Ey Cuti- su tía lo llamo, por lo que le prestó atención -¿Cuando le vas a preguntar para que sea tu novio a Licha?- la mujer le sonrió.

-Ay mamá, déjalo a Cuti en paz, lo hará cuando el quiera, no lo jodas- su primo lo defendió, haciendo reír a los que estaban escuchando esa charla.

La comida transcurrió tranquila, Cristian disfrutaba un poco más estás juntadas desde que Lisandro asistía a ellas. Pasado el almuerzo llegó la sobremesa, toda la familia seguía charlando, más que nada de los chusmerios del barrio, a los cuales Licha les prestaba mucha atención, tiene alma de vieja chusma.

-Licha, ¿podemos ir a hablar adentro?- es lo que le susurro Romero a su acompañante, el cual asintió dudoso. No sabía de qué quería hablar su algo.

Ambos abandonaron la mesa del patio para entrar al living, donde se sentaron en el sillón. 

-Y bien, ¿de qué querés hablar?- Lisandro sonrió algo confundido.

-Viste que el otro día me junte con el Nahue, que vos no pudiste ir- Martínez asiente, sin entender nada todavía -Y bueno, Nahuel me dijo, que vos le dijiste que me pregunte, por qué todavía no soy tu novio- Lisandro abre los ojos sorprendido -¿Por que le dijiste eso?- 

Lisandro se encogió de hombros y miro hacia otro lado, se había puesto demasiado nervioso, luego mataría a Nahuel por decir eso.

-¿Son muchas las ganas que tenés de que yo te pregunte eso no?- vuelve a preguntar Romero.

-No.. osea, no quiero presionarte ni nada de eso- Martínez responde rápido.

-No igual de eso quiero hablar, yo no me siento presionado, pero ya me lo dijeron varias personas- suspiro Cristian.

-Pero yo no hable con nadie más ey- negó Lisandro.

-Ya se que no, lo que pasa es que es medio lógico que digan eso, tipo ya estamos como hace cinco meses y no te pregunto si sos mí novio todavía, porque no me siento preparado-

-Esta bien Cris, no tenes porque preguntarme, no pasa nada- Lisandro lo mira y Cristian mira hacia otro lado nervioso.

-Tengo ganas de llorar culiao'- Romero ríe nervioso.

-¿Porque Cuti?-

-Por lo que te quiero decir- suspira mirando sus manos, con las cuales juega nervioso. Otras dos manos aparecen sobre estás, Lisandro entrelaza sus manos para darle apoyo. 

-Decime lo que quieras Cris- Martínez le sonríe, animandolo a hablar.

-Vos sos muy bueno conmigo, nunca imaginé encontrar a alguien que me quiera tanto como vos, y que sea tan buena persona, y que yo no me anime a preguntarte- habla Cristian sin mirarlo.

-No pero no pasa nada que no me lo preguntes, quiero que hagas tu vida,  yo nomás quiero estar acompañándote- Lisandro apoya una de sus manos en la mejilla de Cristian para que así conecten miradas.

-Lo que pasa es que no se si en algún momento voy a estar preparado, ¿entendés?- Lisandro queda inmóvil mirando a Cristian, pero asiente luego de unos segundos -No quiero estemos mal, ni que me odies- Romero habla rápido -Me gustaría que encuentres a alguien que te quiera más que yo, porque soy un pibe con muchos problemas y muchas cosas en la cabeza- Martínez aleja sus manos del cuerpo del cordobés, y asiente despacio, girando su vista hacia cualquier rincón de la sala para que Romero no viera que sus ojos se había cristalizado -No llores Li, estamos grande ya-

-Si, no se- suspira Lisandro -No se que decirte, yo quería estar con vos- habla cabizbajo.

-Yo tambien quería estar con vos- Cristian responde mirando al gualeyo.

-Es que yo no te voy a esperar toda una vida Cuti-

-Y yo no quiero que me esperes tampoco, no te mereces esperar a nadie, ni sufrir, menos por mí- Cristian acerca su mano al rostro de Licha para quitar las pequeñas lágrimas -Me gustaría que seamos amigos- Lisandro levanta su cabeza y lo mira incrédulo -Tenés muchas personas en la fila para estar con vos, que son mejor que yo-

-Y pero yo te quiero elegir a vos, te elijo a vos- Martínez responde cabizbajo -¿Por que querés ser mí amigo? ¿No te gusto?-

-Si me gustas, te quiero un montón, pero no me siento suficiente para una relación ahora- exclama Cristian. El ambiente entre ellos estaba algo tenso, realmente Lisandro no podía creer lo que su "algo" le decía. -Vamos a mí habitación, así te podes lavar la cara y hablamos mejor si querés- Martínez asiente, y ambos suben las escaleras hasta el segundo piso de la casa.

Al llegar Lisandro fue hasta el baño a lavar su cara, y Romero lo estaba esperando en la puerta de su habitación, se había puesto nervioso otra vez, pero en esta ocasión estaba intentando ocultar su sonrisa.
Cuando Lisandro termino, el par de adentro a la habitación del cordobés, donde Martínez abrió los ojos de par en par.

-¡Sorpresa!- Cristian rie nervioso detrás suyo, pero se percata que Lisandro había vuelto a llorar, por lo que se acerca a abrazarlo.

-Sos un pelotudo- Martinez le devuelve el abrazo llorando en su hombro, pero está vez de felicidad.

La cama de Cristian estaba decorada con globos de corazones dorados y los chocolates favoritos de Lisandro, y en la pared había colgado un cartel que el mismo se había puesto a hacer, el cual decía la gran pregunta.

-¿Y? ¿Querés ser mí novio?-  pregunta Cristian al separarse del abrazo.

-Si, obvio- Lisandro limpia sus lágrimas con su mano, mientras Romero se vuelve a acercar a él.

-Estoy re preparado para ser tu novio- exclama Cristian, ambos sonríen y se besan siendo oficialmente novios.

yo sé que no es de lo mejor que les puedo dar, pero esto lo tenía escrito desde el año pasado así que tenía que subirlo en algún momento 😚

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

yo sé que no es de lo mejor que les puedo dar, pero esto lo tenía escrito desde el año pasado así que tenía que subirlo en algún momento 😚

además quería aprovechar para contarles que hice una historia nueva de shots pero de julienzo, así que vayan a ver qué ya subí un shot, y mañana voy a subir uno muy lindo 🥹

gracias por leer 💘

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 ; 𝐜𝐮𝐭𝐢𝐥𝐢𝐜𝐡𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora