𝙈𝙖𝙡𝙚 ( 𝔼𝕟𝕫𝕠 𝕍𝕠𝕘𝕣𝕚𝕟𝕔𝕚𝕔 𝕩 𝕄𝕒𝕥𝕚𝕒𝕤 ℝ𝕖𝕔𝕒𝕝𝕥)

Capitulo 2

Enzo paso la mitad de la noche mirando el techo, no lograba conciliar el sueño y eso lo frustraba un poco. No supo cuando pero en algún momento cayó rendido y por fin logró dormir un poco.

El olor del café recién hecho lo despertó, abrió los ojos, la luz que escapaba por las ventanas era demasiado fuerte, tanto que lo cego por unos minutos.

Enzo se levantó lentamente, frotándose los ojos mientras se dirigía a la cocina. Encontró a Rafa preparando el desayuno, con una expresión tranquila y amistosa.

—Buen día, dormilón —dijo Rafa con una sonrisa, ofreciéndole una taza de café.

—Buen día... ¿Qué hora es? —preguntó Enzo, aceptando la taza y sorbiendo un poco del café.

—Son casi las diez. Te dejé dormir un poco más, pensé que lo necesitabas— Dijo sentándose a su lado.

—Gracias— Rafa hizo un gesto restándole importancia.

—¿Cómo te sentís?— Enzo alzo los hombros sin dar una respuesta.

—No estoy seguro —dijo Enzo después de un momento, mirando su taza de café—. Me siento un poco perdido todavía.

Rafa guardo silencio mirando su taza.

—Enzo... No es que te esté echando de mi casa ni nada de eso, pero ¿no crees que no puedes esconderte aquí para siempre? Mati se escuchaba preocupado por vos...— Enzo lo miro confundido. —Conteste tu teléfono en la mañana, no dejaba de sonar y...— Rafa soltó un suspiro sonoro.

—Y ¿qué le dijiste? —preguntó Enzo, sintiéndose un poco nervioso.

—Le dije que estabas aquí, que estabas bien, descansando. Le prometí que te diría que estaba preocupado y que quería hablar con vos —respondió Rafa, mirando a Enzo con seriedad.

Enzo dejo la taza de lado y paso sus manos por su rostro.

...

Enzo estaba de regreso a casa, Rafael tenía una cita o algo así y el no quería quedarse solo en casa. Decidió tomar una ducha para despejarse antes de enfrentar el resto del día.

Pero al parecer la vida tenía otros planes para él, pues, al llegar a casa se encontró con nadie mas que con Matías. No sabía desde que hora había estado el ahí, a no ser de que Rafael le hubiera dado información, sin duda era un pequeño traidor.

—Mati— Dijo tratando de sonar lo más tranquilo posible.

Matías solo lo observaba de brazos cruzados, se veía molesto.

—Lo siento, Mati. No esperaba encontrarte aquí —respondió Enzo con sinceridad, sintiendo un nudo en el estómago ante la expresión molesta de Matías.

Matías no respondió de inmediato, su mirada fija en Enzo. Parecía estar procesando algo antes de hablar.

—Lo sabrías si por lo menos contestarás las llamadas— Dijo Matías sin cambiar su expresión.

Enzo se sintió aún más incómodo ante la mirada severa de Matías y sus palabras directas. Sabía que había evitado deliberadamente comunicarse, pero enfrentar la decepción de Matías era difícil. Sin decir nada, abrió la puerta de su departamento e hizo una seña indicándole que pase. Matías entro al departamento y camino acomodándose en la sala.

—¿Y? ¿Me dirás de una vez que te pasa?— Dijo Matías. —Male y yo estábamos preocupados por vos ayer.

Siempre tenía que mencionar a Malena.