O3

119 17 16
                                    

Al día siguiente, Ivan volvió al mundo mortal para buscar a Rodrigo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al día siguiente, Ivan volvió al mundo mortal para buscar a Rodrigo. Esta vez estaba en una mansión que dedujo que era su hogar, y teniendo en cuenta que traspasó muchas habitaciones para encontrarlo puede decir que esa casa era excesivamente grande.

-Tú -dijo nada más encontrarlo sentado en el suelo de esa amplia y ordenada habitación que estaba al final del pasillo. Notó como Rodrigo había dado un gran brinco del susto-. Cada vez que me ves te asustas, estoy empezando a tomármelo a personal.

-Buenos días señor Yeomna. Disculpe que su repentina presencia me asuste, no esperaba que saliera de la absoluta nada.

Ignorando las palabras del castaño, Iván  fue directamente al punto-. Dos días.

-¿Dos días?

-Sí, ese estúpido trato de ser pareja, lo haré durante solo dos días, luego te suicidas y dejas de joder en la sede.

-Mmmh, con eso no me da tiempo a hacer todo lo que quiero, ¿puede ser una semana?

-Dije dos días.

-Bueno, yo soy quien decide cuándo suicidarme y te estoy diciendo que no lo haré hasta completar todo, así que una semana o seguiré molestando en esa sede de la que hablas.

-¿Me estás chantajeando?

-Tal vez.

Los ojos de Iván empezaron a brillar mientras una sonrisa burlona se formaba en sus labios. No sabía si estaba enojado o entusiasmado, probablemente una mezcla de ambos.

-Eres el primer mortal que se atreve a tanto. ¿No temes que cuando te lleve al mundo espiritual te haga pagar por todo dándote el peor momento de tu vida?

-Me da igual, sería solo durante el trayecto, ¿no? Y ya estaré muerto de todas formas.

El Pelinegro soltó una risa socarrona-. Una semana empezando desde hoy, cuando pasen estos 7 días te suicidas.

El castaño se levantó del suelo para quedar frente al pelinegro y alzar la mano derecha-. Trato -al ver que Iván no le daba la mano para zanjar el asunto, soltó una risita nerviosa y bajó la mano-. Como dije, usted no tiene que hacer gran cosa, ni siquiera actuar que me ama o algo así, solo cumplir mis simples peticiones.

-Vale, pues empieza a pedir.

Rodrigo rió bajo y tomó su mochila-. Ahora mismo no va a poder ser, señor Yeomna, tengo que ir a la Universidad.

Iván rodó los ojos con molestia-. ¿Si te vas a matar de qué sirve gastar tu poco tiempo de vida en responsabilidades?

-Intentar hacer vida normal también es parte de mis planes antes de morir.

-Sí que se complican los humanos.

-Jeje, así somos. Volveré en unas horas, puede acomodarse y esperar aquí -Rodrigo abrió la puerta-. Hasta luego -dijo con una gran sonrisa antes de salir.

𝖄𝗘𝗢𝗠𝗡𝗔 || 𝐑𝐎𝐃𝐑𝐈𝐕𝐀𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora