And now?

7.

~Evora Martin~

Gracias a que mi cita con mi ex novio había sido un total fracaso, accedí a terminar la velada con un completo desconocido que pronto me daría cuenta que era un chico encantador; después de haber evitado la conversación de lástima que mi hermana tendría conmigo, decidí subir a mi habitación y, para mi sorpresa, una llamada de mi más reciente contacto fue lo que me mantuvo despierta el resto de la noche, así que aquí estábamos.

—Ok, mi turno. ¿Eres team gatos o perros? —cuestionó.

—Verás, en realidad no soy fanática de las mascotas, o bueno, de los animales en concreto.

—¡Tiene que ser una broma! ¿Quién en su sano juicio podría no adorar a los animales? Lo lamento, pero hasta acá llegamos. Fue un placer conocerte, Evora Nisa Martin —reímos —. Ahora te toca a ti. ¡Por favor hazme olvidar que eres una repeledora de animales!

—Oye, hermanita, ¡creí que tendríamos una fiesta de pijamas! Esto ha sido un total fraude, la próxima vez preferiré quedarme en casa con mi esposo.

Dios, ¿acaso no sabe tocar la puerta? ¿o quedarse callada?

—Me encuentro algo ocupada. ¿Podemos reprogramarlo? 

—Ah, ya veo. Sigue teniendo sexo telefónico, al menos una de las dos tendrá una noche de pasión. ¡Pero recuerda que por tu culpa yo perdí la mía!

Isana sale de mi habitación estallando en risas mientras que todo el color sube a mis mejillas y, aunque sé que Giovanni no puede verme, la vergüenza me gana. Decido dejar la llamada hasta ahí con la promesa de seguir hablando al día siguiente, eso si es que los comentarios fuera de lugar de mi hermana mayor no lograron espantarlo.

~Clover Levesque~

La verdad no sé en que estaba pensando cuando accedí a tener una cita con ella. Es decir, no debería estar saliendo con mi ex novia, por algo las cosas habían terminado entre nosotros en primer lugar. Además, debería de concentrarme en recuperar a mi novia, si es que aún podría llamarla así depués de nuestra última conversación.

Ahora mismo no tengo ni idea de que hacer con mi vida.

Gracias a la reunión de ex alumnos, ahora tenía la necesidad de pensar en que hacer con los sentimientos que mi ex novia había vuelto a despertar, pero también tenía el dilema de que creía amar a mi novia y no quería dejarla ir; ¡todo era un desastre!

Recordé que mamá y papá habían salido a ver la película más reciente de Denzel Washington y que, por lo tanto, no estaban en casa. Así que esperé paciente a que mis pensamientos se pudieran organizar mientras terminaba de beber un vaso de agua, al menos eso parecía funcionarle a mi madre.

Intenté, en vano, conciliar el sueño después de que mi expedición de media noche no diera resultado.

Mi mente no dejaba de maquinar tantas cosas y nada a la vez.

A decir verdad, jamás me había encontrado en un problema similar y creo que justo por eso no sabía como arontarlo, así que, aunque fuera una solución temporal solamente, iría en busca de alguien que tuviera más experiencia en el ámbito de las mujeres.

Sí, quizás su historial no era el mejor, pero teniendo en cuenta la situación, no es que tuviera muchas más fuentes confiables a las que pudiera acudir por información; prácticamente mis opciones eran mi hermano gemelo o Wikipedia, era evidente la elección.

—¿Estás bien? Porque tienes una cara del asco, dormir no te vendría mal, ¿sabes? —lo miré mal —. Bien, ya entendí, el príncipe es bastante sensible. Ya no diré nada sobre tu aspecto.

—¡Rey777! ¡Rey777! ¿Sigues ahí? 

—Claro, mi hermano. ¡Vamos a acabar con esos nubs! —tomo asiento en su cama, esperando que quizás así le de más importancia a mi presencia en su habitación que a su amigo en el intercomunicador del videojuego —. Oh, lo siento, ¿querías jugar?

—Idiota. Ni siquiera sé por qué sigo buscándote tus consejos, debí escoger Wikipedia.

—Te hablo al rato, Clover necesita un poco de mi magia.

—Tranquilo, hermano, puedes seguir con tu estúpido juego. Ya veré yo que hacer.

—Una partida de Fortnite jamás mató a nadie. Pero ahora ya tienes mi completa atención, así que dime, ¿para que soy bueno? 

Es tu hermano, Clover, sigue siendo tu hermano.

—Está bien, si es que debes saberlo...

Atlas escuchó mi relato con más atención de la que esperaba y me aseguró que había echado al caño todo lo que Evora podría haber sentido por mí. Entonces supe que lo más sensato por hacer era lo que ya sabía: recuperar a Ember y dejarle las cosas claras, que entre mi ex novia y yo no pasaba nada. Solo esperaba que ella me creyera más de lo que yo creía esas palabras.