Capítulo 3: Compañeros de viaje

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El sol se había puesto hace ya varias horas, Demian pudo notarlo al abrir sus ojos y ver el cielo estrellado, se encontraba recostado en el suelo, sobre una gran manta, mientras otra mas pequeña cubría su cuerpo.

Cerca de él, una fogata se hallaba encendida, sosteniendo una cacerola en la que se hervía lo que parecía ser alguna clase de brebaje, probablemente perteneciente a la Chamán. Intentó levantarse sin éxito, pues su cuerpo aun estaba adolorido y entumecido.

-Yo que tu no me levantaría, no te has recuperado del todo todavía- dijo una vos femenina proveniente de la carreta, haciendo que el pelinegro volteara a verla, encontrándose con una vista un tanto peculiar.

-Eres una cebra- expresó con una voz monótona, en efecto, quien había hablado se trataba de una cebra, pero esta se veía casi caricaturesca, ojos grandes, hocico y cuerpo pequeños, dos enormes aretes de oro en sus orejas, y varios anillos en su cuello y pata izquierda, que le daban un aspecto algo tierno a perspectiva de Demian.

-En efecto, eres alguien observador ¿Puedo saber que eres tu, mi salvador?- preguntó acercándose a la fogata, dejando que el pelinegro la viese con mas detalle -Nunca vi nada como tu en mi vida, eres algo desconocido y eso me intriga-.

-Yo... Yo soy Demian Green, soy un humano- dijo sin quitar la mirada de la cebra, para él, ella era algo desconocido -¿No sabes que son? ¿No hay humanos aquí?-.

-De humanos nunca he oído hablar, pero creo conocer a alguien que pueda ayudar- dijo mientras tomaba un cucharón para remover el caldo que hervía suavemente -Una amiga mía, en un pueblo al oeste, podría tener información que tu duda conteste, si los humanos este mundo alguna vez han habitado, en su biblioteca ella debe tenerlo registrado- mientras hablaba, sirvió un poco del caldo en un cuenco de madera y se lo ofreció al pelinegro, quien la vio con dudas -Tus heridas aún no han sanado, y no lo harán si no estás bien alimentando, este brebaje calmara tu dolor, aunque debo admitir que no tiene buen sabor-.

Demian tomo el cuenco aún con dudas en su mirada, por lo que procedió a usar "Ojo analítico" en el brebaje, esperando que no se tratase de algo malo.

[Caldo del bosque: Misteriosa sopa creada a partir de ingredientes naturales cuidadosamente seleccionados, produce estado de Regeneración menor durante 8 hrs (Duración de efecto no acumulable)]

Con sus dudas disipadas, el pelinegro procedió a beber el brebaje de forma rápida, pues tal y como dijo la cebra, este tenía un mal sabor, pero el efecto lo valía.

[Has obtenido: Regeneración menor (tiempo de estado 7:59:59)]

-Gracias- dijo el pelinegro, sintiendo que el dolor de sus heridas desaparecía poco a poco, Obteniendo 50 PV debido a la relajación.

-No tienes que agradecer, luego de salvarme, es lo menos que puedo hacer- dijo mientras seguía revolviendo el caldo.

-Si lo ponemos de ese modo, creo que fuiste tu quien me salvó a mi- dijo con una sonrisa mientras se sentaba, haciendo caer la manta que lo cubría, dejando ver su torso, hombro y brazo izquierdo totalmente vendados -Oh valla-.

No había notado que no traía su armadura, lo que a su vez significaba que lo único que cubría su hombría, era aquella manta que ahora está a la altura de su cintura.

-De tu ropa no debes preocuparte, tuve que removerla para poder curarte, planeaba entregarla cuando te hubieses recuperado, pero si las quieres ahora, se encuentran a tu lado- el pelinegro volteó, encontrándose con que, efectivamente, su armadura se hallaba justo a su lado, junto a su daga y su brújula.

-He notado que hablas usando rimas ¿Eso es algo normal aquí?- preguntó, esperando no ser irrespetuoso.

-Las rimas son el dialecto tradicional que usan las cebras en mi tierra natal, pero si de alguna manera llegase a incomodarte, podría intentar dejar las rimas aparte- dijo mientras servía un cuenco de sopa para ella misma.

Un Sistema en My Little PonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora