TW: Las siete sin magia Libro 1: La emprendedora determinada y el tirano carmesí

Cap 6: Hora del almuerzo

"Ya Jenny, déjalo." dijo Millie ayudando a la escocesa de pelo marrón a levantarse para que esta le entregue a Grim.

"No volveré a esas clases aburridas." dijo él recuperando el aliento.

"Apapap, no más escándalos jovencito. Si no vas a clases no podrás ser un mago poderoso." respondió la pelirroja colocando un dedo en sus labios.

"No actúes como si fueras mi mamá." respondió Grim sacándole la lengua a Millie.

"Tú eres quien se comporta como un niño." pensó ella.

Luego de un par de clases más, por fin llegó la hora de comer. Las chicas del Ramshackle fueron a la cafetería luciendo sus nuevas faldas.

"Al fin, es hora de comer." dijo Grim salivando al ver la comida.

"Wow, un buffet en la cafetería, que elegante." dijo Millie impresionada por la barra de comida.

Mientras ellas iban a formarse frente a la barra, varios chicos no tardaron en echarles el ojo y les pedían que se sentaran con ellos, pero esto no pasó desapercibido por Ace, Deuce y sobretodo por Liānhúa.

"No lo intenten perdedores, ¡ellas se sentarán con nosotros!" dijo Ace a los chicos de una mesa que estaban sentados detrás de ellos, causando que estos le quiera aventar su comida.

Mientras tanto, las chicas estaban observando los platillos maravilladas.

"Pollo frito, pan de frijol, guiso de pavo..., ya quiero probarlo todo." dijo Jenny con estrellas en los ojos.

"Yo también." dijo Grim.

"Cálmense los dos, harán un alboroto." dijo Ace.

"Oye Millie, dame un poco de todo." dijo Grim corriendo hacia la pelirroja.

"No tan rápido Grim, deja que las damas escojan primero." dijo la pelirroja sujetando al gato de fuego.

Una por una, las mujeres fueron escogiendo sus platillos y se fueron a buscar una mesa donde sentarse. Sin embargo, Jo, Grim y Millie se quedaron atrás; Millie estaba comprando el pan y el latte que les debía a sus amigos y Josephine tenía dificultades para alcanzar su charola.

Desde su mesa, Huī ve esto y se acercó a Josephine.

"¿Quieres que te ayude?" le preguntó a la pequeña británica.

"Eh...sí por favor." dijo Jo.

Huī se para de puntillas y toma su charola y se la entrega a Jo, quien le da las gracias.

Cuando estaban a punto de irse, escuchan a Grim gritar "Oye Huī, ya que estás aquí, dile a Millie que me de un pan relleno y un pollo frito. Ella es muy mala y no quiere alimentarme."

"Ya te conseguí guiso de pavo y omelet de arroz." dijo la pelirroja.

"Lo siento Grim, pero ella es la prefecta, ella es quien manda." dijo Huī tomando a Grim y la comida de este. Sin embargo, cuando el par de reunió con Josephine para ir a su mesa, Huī chocó contra un par de chicos que tenía en frente.

"Oh, disculpa. No me fijé por dónde iba." dijo la nómada nerviosa.

"Tengan cuidado por donde van, par de pulgas." dijo el chico más alto dándose la vuelta para ver a las niñas con una mirada furiosa. Luego bajó la mira a su platillo y después al piso.

"¡Mi carbonara! ¡Rompiste la yema!"

"Que mal, jugar con el huevo siempre es lo mejor." dijo su compañero ligeramente más bajo.

"Lo sentimos...por favor, perdónenos." rogó Jo temblando.

"¡Más vale que paguen por su desastre, pulgas!" dijo el chico bajo. En eso, el primer chico ve el guiso de Grim y el hash brown de Josephine y una idea le viene a la mente.

"Como compensación, tendrán que darnos sus almuerzos."
Josephine y Grim jadean, pero el primero en hablar es el felino.

"¿Eh? ¡No voy a darles mi guiso, necesito mi proteína y estoy hambriento!"

"Grim, no grites." murmuró Josephine, sin embargo, ella jadeó cuando Grim dijo "Mejor tomen el almuerzo de ella, seguramente es más rico."

"N-N-No haré eso." dijo Josephine.

"Ya los oyeron, no les daremos nada, par de brutos." dijo Huī llevándose a su compañera, pero el chico grande la agarró del brazo y se lo apretó, lastimándola.

"¡Huī!" exclamó Jo.

"Oye pulga, así no es como le hablas a un alumno de grado superior al tuyo. Creo que debería enseñarte algo de respeto."

"Y yo creo que alguien debería enseñarte algo de caballerosidad." respondió Millie acercándose a los chicos.
"Suéltala"

"No te metas donde no te llaman." dijo el chico bajo.
"¿Acaso quieres que te demos una lección también, escarlata?"

"No, pero quienes van a recibir una lección son ustedes." dijo Millie poniendo su mirada seria.
"La mesa de maestros está allá, y solo bastará una llamada de auxilio para que terminen en el despacho de Crowley. Si no quieren eso, dejen a las niñas."

Los chicos en cambio, no sintieron miedo y solo se rieron de Millie.

"Mírenla, no tiene magia y se quiere hacer la heroína." dijo el chico que sostenía a Huī.
"Escucha bien muñeca, no metas tu nariz donde no te llaman. Última advertencia."

Al ver que Millie estaba siendo amenazada, Deuce se pone de pie para detenerlo.

"Disculpe, pero en el reglamento dice que está prohibido iniciar peleas con magia."

"¿Peleas? Oh, no estamos iniciando una pelea, solo vamos a enseñarle una lección a estas novatas." dijo el grandote.

"¡Ahora veamos de qué manera podemos aplastar a un par de pulgas!" gritó el flacucho a punto de soltarle un golpe a Huī hasta que Liānhúa vuela hacia él y le suelta un zarpazo detrás de la oreja.

Millie aprovecha esto para llevarse a las niñas; sin embargo, Grim vio lo que el halcón hizo y sonrió.

"Bien pensado, pollo gris" dijo iniciando una pelea con los chicos. Millie se preocupa y trata de detener a los animales, pero tiene dificultades para hacerlo, así que Ace y Deuce tuvieron que encargarse.