TW: Las siete sin magia Libro 1: La emprendedora determinada y el tirano carmesí

Cap 14: La redención de un matón

En el capítulo anterior, Deuce había entrado en su modo violento tras perder los huevos que compró y ver cómo los bravucones trataron de abusar de Millie.
Luego de haber molido a golpes a los chicos, soltó un grito de victoria que espantó a los presentes.

"¡Este chico está loco!" dijo el bravucón grande.

"¡Vámonos de aquí!" dijo su compañero levándolo para irse corriendo de ahí.

"¡LA PRÓXIMA VEZ QUE COMAN UN HUEVO, MÁS VALE QUE SE DISCULPEN, TARADOS!" gritó Deuce.

"¿Ese es...Deuce? ¿De verdad es él?" pensaba Millie llevándose una mano al pecho mientras inhalaba y exhalaba.

Una vez ella se calmó, se acercó a su compañero para intentar hablar con él, pero al poner una mano en su hombro, este se alteró y casi le suelta un puñetazo en la cara.

"¡Cálmate Deuce, soy yo!" dijo Millie.
"Ya pasó, estoy bien. Mírame."

Deuce se calma por un momento, pero en ese momento, se pone a llorar.

"¿Qué pasa?" preguntó la pelirroja.

"Lo...Lo hice otra vez, ¿verdad?" preguntó.
"¡AHHHH! ¡Yo estaba seguro que este año seria un estudiante modelo!"

Millie se acerca a ayudarlo, pero el chico la hace a un lado.

"¡Por favor, no me mires! Perdona que hayas tenido que ver este lado de mí." dijo Deuce llorando mientras le daba la espalda.

Millie se acercó tranquilamente y tocó el hombro de Deuce haciendo que este volteara, siendo sorprendido por la mano de la joven secándole las lagrimas.

"No tienes nada de que disculparte conmigo, solo te pido que me digas qué fue todo eso. Tal vez te pueda ayudar."

Deuce procede a contar su historia: antes era un matón de secundaria que gustaba de meterse en problemas y abusar de los débiles, pero cuando se enteró que su madre sufría por esto, decidió cambiar para bien y convertirse en un hombre del que ella se sentiría orgullosa, un estudiante modelo.

"Deuce, eso es...admirable de tu parte." dijo Millie conmovida.

"¿Admirable? Me viste golpear a un estudiante frente a tus ojos, ¿y dices que mi decisión es admirable? Metí la pata, arruiné todo." dijo el chico de espadas agitado.
"No quiero que me veas como esa persona de antes, es muy vergonzoso."

Deuce en ese momento baja la cabeza y oculta su rostro con las manos, pero en ese momento siente como Millie le da un abrazo y luego lo toma de las manos para que la vea.

"Deuce, solo porque quieras ser un estudiante modelo no significa que debas dejarte pisotear por cretinos como ellos."dijo Millie.
"Sí, la violencia no es la mejor manera de resolver las cosas, pero si lo reconoces, aún vas por buen camino."

"¿Huh?"

"Lo que quiero decir es que si te tienes que defender, defiéndete, demuestra que tienes dignidad. Un estudiante modelo también puede hacer eso. Solo no te pases de violento, ¿si?"

Deuce sostuvo las manos de Millie mientras más lágrimas caían por sus mejillas.

"Millie..." murmuró el joven.

"Además, si te sirve de consuelo, me salvaste de ellos y te agradezco mucho por eso. Y...si necesitas hablar de algo que te inquiete, puedes contar conmigo." dijo Millie.

Este momento le devuelve la sonrisa a Deuce.
"Je, tal vez tengas razón" dijo.
"Me alegra saber que estás bien, pero te prometo que si algún otro chico intenta hacerte eso de nuevo, no dudaré en hacerle entender a puños que eso no está bien."

Luego de reír un poco, los dos jóvenes decidieron volver a la tienda a comprar nuevos cartones de huevo.

"Espero que los pollitos descansen en paz." dijo Deuce.

"Ehhh Deuce..." dijo Millie.
"Esos huevos no eran fértiles. Los pollitos no salen de ellos."

"¿Q...Q..." tartamudeó Deuce mientras temblaba. De repente, levantó la cabeza y gritó "¿¡QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEÉ?! ¿ES EN SERIO?"

Luego de este pequeño incidente y conseguir huevos nuevos, Millie y Deuce volvieron a la cocina con los demás.

"Vaya, al fin llegan. Se demoraron mucho." dijo Ace.

"¡Por fin llegan, ya quiero seguir con el pastel de nueces!" dijo Grim emocionado.

Deuce le dejó las compras a Trey y
mientras Millie notó que Jenny tenía un pedazo de tela atado a su dedo pulgar.

"¿Qué te pasó Jenny?" preguntó la prefecta.

"Ah, hola Millie. Nada grave, solo me raspé con un pedazo de madera." dijo Jenny.

"Se clavó una astilla en el dedo mientras usaba una escalera en la biblioteca." dijo Cârovnika.

"Câro, no la quiero preocupar, ya tuve suficiente con Claire y Trey." dijo Jenny preocupada.
"Millie, te contaremos todo cuando volvamos al dormitorio."

Pasado esto, el grupo realizó el paso final de la repostería: la decoración del pastel. Los chicos y chicas untaron el pastel con la crema de nueces que hicieron usando sus varitas y espátulas.

"Miren, ya casi acabamos, que sencillo fue." dijo Josephine.

"Después de esto, tendré que lavarme." se quejó Raine.

"Lo hacen muy bien." dijo Trey.

"Nada malo sale cuando cuentas con Grim el magnífico." dice Grim sonriendo.

"No te confíes chiquitín. Entre más subes más alto caerás." dijo Jenny seguida por las carcajadas de Ace, cosa que se apagó cuando vieron a Deuce triste.

Luego de seguir decorando el pastel, Claire hizo un círculo en el tope y Grim colocó unos glacés en el círculo para darle el toque final.