ANTHONY LOCKWOOD one-shots

spectrum voice

Violet abrió la puerta de golpe entrando por completo a la cocina, sus pasos sonaban mas bruscos de lo normal debido a su enojo ante la escena que acababa de vivir en la biblioteca del lugar donde Lucy y George habían salido en el mismo estado que ella.

Tomo su mochila que descansaba en una de las sillas de la habitación y cuando iba a tomar su chaqueta la puerta se abrió detrás de ella. La persona a la que menos quería ver en ese momento apareció en el umbral de la puerta.

No se giro a verlo ni un segundo, Lockwood al verla colocándose el abrigo se apresuro a hablarle.

—¿Tu también te vas?

Lo miro unos segundos y siguió tomando sus cosas para marcharse a su hogar donde su abuela la estaría esperando, el castaño soltó un resoplido sin quitarle la mirada a la pelirroja. Violet hizo una mueca cuando la herida en su mano se hizo notar nuevamente cuando tomo su mochila sin cuidado, sacudió la mano en un intento por aliviar el dolor.

Lockwood lo noto, el caso del que regresaban no había salido del todo bien y era el principal motivo por el cuál había reprendido a sus amigos debido a los descuidos que los habían puesto en riesgo después de sellar una vieja tumba en el cementerio. George había entrado en el circulo olvidándose del protocolo y Lucy se había confiado de mas, si no fuera por Violet tal vez ninguno estaría ahí.

—Déjame ver tu herida.

Se acerco unos pasos hacia ella extendiendo su mano, Violet retrocedió con el ceño fruncido. Alzo su mano sana hacia el y en lenguaje de señas se comunico.

—No te quiero ver.

Dolido, Lockwood soltó un suspiro de cansancio cuando la pelirroja hizo el ademán de caminar hacia la puerta.

Le bloqueo el paso ganándose una mirada matadora de la chica.

—¿Quieres dejar de ser tan terca? Si te vas a esta hora tu abuela te va a matar, Violet.

La mencionada se quedo parada en su lugar cruzándose de brazos al caer en cuenta de que lo que decía Lockwood era correcto, no quería quedarse mas tiempo con el pero si llegaba a casa después del toque de queda su abuela no la dejaría salir más. Arrugó la nariz con molestia y se alejo del cuerpo del muchacho dejando su mochila en el piso con un resoplido.

—Te curare eso—le señalo con la mirada y se giro a buscar algo en los cajones de el mueble junto a la puerta.

A regañadientes se sentó en una de las sillas y le miro la espalda mientras seguía rebuscando en silencio. Lockwood todo el tiempo la había tratado con amabilidad desde que George los había presentado e incluso había aprendido lenguaje de señas en cuanto se entero de su nula capacidad de hablar sin embargo el hecho de que momentos antes les había gritado a Lucy y a ella por un tema sensible para ambas la había hecho enfurecer. La voz de el cráneo en el frasco se repetía una y otra vez en su cabeza, no solo parecía hablar con palabras cortas como los tipo dos lo hacían, sino que había tenido una conversación decente con Lucy y ella lo había escuchado insultarla con palabras hirientes sobre su inexistente voz.

Respiro mirando el mantel lleno de garabatos con una pequeña mueca, tomo una pluma de las que George había regado en la mesa esa mañana y comenzó a hacer dibujos sin sentido sobre la superficie. Encerró varias veces la frase que su amigo de lentes había escrito unos meses atrás y una leve sonrisa apareció en sus labios.

''Lockwood es un idiota''

El joven se sentó junto a ella con cuidado notando la atención de la pelirroja en el mantel y arrugando levemente el entrecejo, Violet no se esforzó en ocultar sus acciones y se giro a mirarlo sin expresión alguna.