• Quédate Conmigo •// Benjcot Blackwood

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No estaba segura de qué hora era, afuera por
la ventana en cielo estaba oscuro y gris, mire alrededor de la habitación aún un poco desorientada por el sueño hasta que encontré a Ben dormido y desnudo junto a mi.  Mi corazón enloqueció y el calor inundó mi rostro al recordar lo que anoche había sucedido, la forma en que él me había tocado.

Tenía que preguntarle a la señora del hostal si podía conseguir un poco de té de Luna.  Me moví un poco fuera de la cama cuando Ben me agarró y tiro de mí sujetándome con sus fuertes brazos contra su cuerpo. Busque su rostro encontrado una oscura mirada.

—a donde vas sin mi bonita —susurró con voz ronca y una sonrisa traviesa.

—solo iba a darme un baño e ir por un té...

Un fuerte sonido atravesó la habitación interrumpió. Ben se puso de pie de inmediato colocándose su ropa,  tomando su espada y corriendo a la puerta.

—¡Quédate aquí!—rugió cuando vio mis intenciones de seguirle.

Incapaz de quedarme quieta me vestí y tomé la bolsa donde tenía los huevos. No tenía una espada pero encontré una de las dagas de ben, nerviosa por los ruidos que se escuchaban afuera.

No sabía si era bueno salir, ¿qué tal si empeoraba las cosas ? Camine de un lado a otro mordiéndome las uñas , quizás debía esperar a que él volviera. Estaba lista para volver a la cama cuando escuché un grito terrible.

Avance sin pensarlo a la puerta cuando está se abrió de golpe, mostrando a un hombre corpulento de barba larga y lleno de sangre que claramente no era de él ¿Donde estaba Ben? El hombre avanzó a mí sin pensarlo, intenté escapar de él pero me arrojó con su cuerpo sobre el mío.

—¡aléjate de mi mujer !

Ni siquiera le dio tiempo de reaccionar, Ben cortó su cabeza de un solo golpe haciéndola rodar, mi cuerpo se quedó pralidasado, a mi nunca me había gustado la muertes y ahora frente a mi, tenia Ben " el sangriento", un apodo al que le hacía honor pues ahora estaba prácticamente bañado en sangre.

—Rhaena —me miró preocupado.

Dejó caer su espada arrodillándose  frente a mí, sus manos ensangrentadas me tomaron con suavidad y me acunaron contra su pecho. Su respiración y corazón aún estaban acelerados por la batalla, él me había salvado de nuevo.

—estoy bien—mi voz se quebró—¿tú lo estás ?
Mis manos temblorosas tomaron su rostro, en busca de alguna herida pero él las detuvo.

— la sangre no es mía—murmuró besando una de mis manos.

—me asusté por que te escuché gritar y no volvías, pensé que te habían...—Mi voz se desvaneció.

—uno se escapó —dijo preocupado —salí a buscarlo pero cuando te escuché gritar volví corriendo.

Yo solo asentí, me sentía aún muy afectada. Ben ya había puesto su vida en riesgo por mi culpa demasiadas veces, tenía que llegar a Valle Arryn antes de que le sucediera algo. Tenía que alejarme de Ben para no ponerlo en riesgo.

—debemos irnos —murmure alejando mis manos de las suyas —necesitamos salir de aquí...

Corrí a buscar más ropa para Ben, pero mi cuerpo aún estaba demasiado entumecido y tembloroso.

—Rhaena...

Sus brazos me tomaron por la cintura, acercándome a su cálido pecho, tuve que levantar la cabeza para mirarle a los ojos , ¿como borraría su recuerdo de mi piel una vez nos separamos?