• Quédate Conmigo •// Benjcot Blackwood

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Habíamos logrado llegar al amanecer sin que nadie muriera, claro que mi padre me había obligado a dormir en una habitación junto a él, lo más separado de Ben y aunque este no parecía contento se abstuvo de decir algo.

—no comas eso cariño—susurró Ben sacando unas vallas de mi plato —son malas para el bebé, este es mas dulce .

Le sonreí probando los frutos rojizos que puso en mi plato, ignorando el bufido disgustada de mi padre al otro lado de la mesa.

—nunca voy a entender por qué todos mis hijos terminan haciendo lo que se les da la gana en cuestión de sus parejas —negó Damon tomando de su copa.

—es curioso que digas eso cuando sin mal no recuerdo tú te casaste con Rhaenyra en contra de los deseos de su padre, el rey viserys —solte lanzándole una mirada

—pero ese no será tu caso—contestó con brusquedad — si no estás embarazada nos iremos mañana a primera hora.

Ben se tenso junto a mi .

—pero si lo está nos dará su aprobación para el matrimonio –le replicó con la misma brusquedad.

La tensión se solidificó en la mesa, había descubierto en las pocas horas que mi padre tenía aquí, que él y Ben podían llegar al mismo nivel de imprudencia y destrucción. Sin embargo, la puerta del comedor se abrió gracias a los siete.

—el maestre está aquí —anunció Alynne

Mi padre se puso de pie de prisa dejando su copa sobre la mesa.

—iré a ver si es de confianza —aviso antes de salir con Lady Alynne .

Mire mi plato sin ánimo, el hambre se me había esfumado por el estrés de la situación pues en cualquier caso terminaría en una confrontación.

—todo va a estar bien bonita —Ben acarició mi mano.

—esto va a terminar mal, no creo que mi padre se dé por vencido...

—yo tampoco lo haré

—no vale la pena —Le mire incrédula—vas a arriesgar tu casa, tu vida ¿por mi?

—tú y el bebé son todo lo que tengo, no hay más para mi —contestó molesto tomando mi rostro entre sus manos —perdí a mi familia cuando era un niño y he vivido en el caos desde entonces, pero contigo a mi lado, cuando me miras a los ojos siento que finalmente puedo crear una familia que me reciba en un lugar al que pueda llamar hogar.

Era tarde para intentar no llorar, las lágrimas caían sobre mis mejillas, ¿como podía haber tanto amor en sus ojos ?  No estaba segura, había aprendido a no apegarme a las personas o a las cosas por que siempre les perdía pero Benjicot me hacía sentir tan segura y protegida.

—bien —mi voz fue un susurro—pero yo me encargaré de mi padre después de que el maestre me revise.

El asintió renuente besando mi frente. Entramos en silencio al pabellón donde el maestre hablaba con mi padre . El anciano me hizo pasar a la habitación y me pidió que le explicara cuando había sido la última vez que Ben y yo habíamos tenido relaciónes.

—hace poco más de un par de semanas —le contestó Ben de inmediato —en un carruaje.

—Ben sal—le pedí con las mejillas calientes.

—pero...

—Lord Blackwood necesito que la princesa se sienta cómoda—le dijo el maestre abriendo la puerta.