No siempre puedes confiar.

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Velirus estaba haciendo un análisis de los daños de la nave, valiéndose de su traje de supervivencia espacial específicamente diseñado para su especie.

Suspiró antes de llevarse una de sus manos al casco, notando el como su cristal se empaño un poco por su aliento. Vio a su escuadrón asignado, una amalgama de diversas especies alienígenas, algunos, la minoría, poseían un aspecto minimamente "humanoide", habiendo desde tragdanians hasta neptunianos. El resto eran más como él, teniendo un aspecto que él mismo consideraba más natural, pues apenas tenían rasgos "humanos", y en su lugar portaban más características extrañas, habiendo desde centurionitas, centauromorfos marcianos, venuritas, keplerians y algún que otro kurukandell fuera de sí mismo.

Activó sus propulsores para analizar el resto de daños en la zona, pero justo entonces su comunicador sonó, era el capitán Ussop tratando de llamarle. Sin muchos ánimos contestó, calibrando su comunicador a "monolínea", así evitando que, por alguna circunstancia, algún otro miembro de su escuadrón pueda oír la conversación. Era una posibilidad remota, mas nunca cero.

-Capitán Ussop, aquí el general Velirus del escuadrón AKL-193...

-Descansa soldado, no necesitas ser tan formal...

-Ah, discúlpeme capitán -Respondió el kurukandell llevándose una mano a la nuca.

-Al caso, necesito que venga a mi oficina de inmediato, debo hablar de algo importante contigo... asegúrate que nadie te siga.

-Eh, voy de inmediato capitán -El kurukandell colgó el comunicador, luego activo sus propulsores ubicados debajo de la zona que contenía sus alas sólidas, en cierto modo dándole un aspecto de escarabajo.

En la sala del capitán, el kurukandell entró tras accionar el cerrojo, cerrando pronto la puerta. No alcanzó a estar un minuto ahí dentro cuando Ussop, sin mirarlo, sino que mirando por la ventana de su oficina, le habló.

-¿Sabes por qué los humanos somos llamados "herederos del Elemento"? -Ussop mantenía uno de sus brazos cruzado detrás de su cuerpo, pero Velirus pudo ver una extraño brillo celeste frente a su cuerpo, como si estuviese usando el chip de su brazo, pero era raro, el capitán había tenido una operación en la que se lo extirparon.

-Eh... no realmente, me hago la idea, pero...

-Somos llamados así por un par de motivos, entre ellos nuestro anormalmente alto nivel de teknitracina en sangre, superior al 90%. Ahora, ¿recuerdas lo que era ese compuesto? Tranquilo, yo te lo diré -Ussop hizo una leve pausa para suspirar- la teknitracina es en realidad una proteína simple, tan simple que, con lo que se hace un aminoácido común se pueden hacer 500 proteínas de T.E.K. Su función es permitir un "enlace" entre un organismo vivo y la radiación del Elemento, y es esta misma la que permite cosas como "energizar" las máquinas.

-¿A-a qué busca llegar capitán?

-Voy por pasos amigo... el punto al que quiero llegar es... ¿recuerdas cuales fueron mis argumentos para mandarlos a "ellos" tres y nadie más a lo que tú y yo sabemos bien es una misión casi suicida? -Dijo el capitán sin siquiera voltear a su general, aunque por los ojos de insecto del kurukandell le permitieron ver, con algo de preocupación, el como se dibujaba una macabra sonrisa en el reflejo del cristal.

-E-eh... us-usted me explicó de forma m-muy superficial aquello, s-solo me dijo que "ellos irían y no había derecho a discusión"...

-Si, eso fue lo que te dije... digamos que me estaba guardando los detalles para más adelante, y bien, ahora es ese "más adelante"... iré punto por punto del por qué decidí eso... jejeje... -El capitán se detuvo un momento, se dio la vuelta y tomó un vaso de cristal lleno de whiskey, dándole un sorbo- el más simple, ese japonés... él estuvo en las guerras contra los kroundals hace casi 30 años, él ha visto la verdadera cara de nuestro enemigo, y si bien todos los veteranos han sido silenciados en base a amenazas y pagos en grandes sumas de créditos. El problema es que ese japonés con padres mexicanos y con tendencias suicidas, es de los pocos que no ha sido silenciado con los métodos que dije, sino que solo está callado porque "no le interesa hablar". Ya ves a dónde voy, si los kroundals logran sacarle algo a ese "kamikase", podemos dar por perdidos nuestros puestos en el poder.

-¿Q-qué sabe ese japonés como para que nos afecte así?

-Claro, eres mucho más joven que yo... no sabes lo que él sabe... bueno, segundo tenemos a esa...

-¡O-oiga! ¡n-no me ignore así!

El humano volteó a verlo con un rostro de indiferencia, antes de seguir su monólogo.

-Como decía, esa tragdanian, ¿no te parece extraño e irónico que siendo ella una miembro de la raza más lujuriosa del universo conocido sea apenas lujuriosa, y solo con Samuel? Que desperdicio... bueno, ella es la más lista de los 3, y si se lo propusiese podría decodificar toda la información de la Milky Way, y aunque tiene cierta voluntad, por un precio alto estoy seguro que ella entregaría dicha información al enemigo.

Hubo un incómodo silencio entre ambos, hasta que el humano volvió a hablar.

-Pero el peor sin dudas es Petrikov, y es simple el por qué. Sus niveles de teknitracina en sangre son casi del 100%, y es cómico, es de quien menos me tengo que desconfiar que llegue a traicionarnos, tiene todo un historial familiar dentro de la Federación, el problema es ese nivel en su sangre, más que ser peligroso por lo que sabe, es peligroso por lo que es, una bomba de tiempo andante. El verdadero problema con él es justo eso, su T.E.K es tan alto que actúa sin pensar, y tomando en cuenta que está perdidamente enamorado de esa.... de esa, pues, si ella nos traiciona él lo hará igual.

Durante unos momentos el kurukandell estuvo callado, tratando de entender la razón por la que el capitán le comentaba eso, hasta que de golpe su mente llegó a una conclusión que le heló su sangre blanca.

-N-no...

-Digamos que quiero, no, todos los altos cargos de la Federación que sabemos de ellos 3, los queremos m...

Fue interrumpido por una repentina sacudida de la nave, como si algo muy grande la hubiese golpeado. Acto seguido una alarma de emergencia de luces rojas se hizo presente, con el aviso de "un ataque sorpresa".

-Ah... -Dijo Ussop levantándose del suelo, pues había caído contra este- bueno, ¿qué espera Velirus? Vaya a su nave a iniciar el proceso defensivo.

-G-gh... -Con algo de esfuerzo y desconfianza, el kurukandell salió de la habitación, no sin antes dar una última mirada al capitán.

Pronto Ussop se quedó solo de nuevo, y como si nada estuviese pasando se sirvió más whisky, bebiendo lentamente mientras observaba la ventana que daba al espacio. Vio varias naves kroundal revoloteando las inmediaciones, y en vez de siquiera preocuparse, sólo sonrió de forma algo extraña, pero llena de alegría.

Un pequeño destello azul llegó a su ojo izquierdo, de forma parpadeante, molestandole. Puso un dedo en su oreja, tocando un pequeño dispositivo del mismo color de su canal auditivo, creando desde su pupila una pantalla cibernetica holográfica.

-Ya tardaban -Dijo el humano a la extraña figura al otro lado del canal.

-Hicimos lo que nos pidió, esperamos órdenes, "capitán".

-Bien... bien en verdad...

Intra SpatiumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora