El tenia hombros grandes y mucha fuerza, porque logro tirarme al suelo. Estaba muy irritada con esto. Ninguno en su sano juicio debería tirar a una chica, a no ser que quiera un buen escándalo. Pero, en ese momento, no era muy adecuado para mi montar uno por un simple choque. Todavía no conocía a nadie, y podría toparme con la gente equivocada, así que presentí que lo mejor seria levantarme, limpiarme e irme. Si. Eso era lo mejor por ahora. Willow seguía en mis manos, aunque estaba inquieto, pues se quería salir de mi agarre y movía mucho la nariz con tal de olfatear algo de esta nueva persona. Muy pocas veces lo había visto tan curioso, sabia que si lo era, los conejos son animales muy curiosos y siempre quieren andar jugando.
Pensé que ya había estado suficientes segundos en el piso para aclararme algo: ODIABA tener el trasero en el suelo de la gran cuidad. Eso fue para mi una de las primeras situaciones incomodas en una cuidad como esta, por lo tanto, meritaba un recuerdo. Podría haber seguido pensando que hacer y quejándome en mi mente hasta que vi una pequeña sombra. Por mera curiosidad, mire para arriba y, efectivamente, había una mano. No cualquier mano. La mano del hombre que me empujo. Naturalmente, me puse mas roja que una mora. Por lo general, este rojo en mi piel duraba poco, por suerte, así que tuve el valor suficiente para mirarlo.
Tenia pelo claro, sin rozar a rubio, era un lindo color marrón claro (algo así como el de las castañas). Sus ojos eran verdes, unos lindos ojos verdes claro, con algunos toques celeste; rastro de que se le cambiaban de color. Sus facciones eran suaves, tenia unas lindas mejillas y labios no muy finos. Era alto, y con unos hombros realmente fuertes. Después de escanearlo, tome su mano y el me levanto.
- Perdón, no te vi, estaba distraído - se disculpo, su voz era el toque final para que su exterior fuera perfecto. Pero, el interior me daba mas misterios.
- Si, esta bien. Yo también lo estaba. Fue mi culpa, por no mirar. - vi que había sonreído, estaba nervioso. Me preguntaba de que.
- No me siento satisfecho de que solo me perdones.
- Ah, no? Que mas hago? - empezaba a ponerme nerviosa, no sabia si tendría que haberle hablado. Tenia ganas de salir corriendo de ahí.
- Vamos por un café. - se me había iluminado la vida, prácticamente. Con la hambre que tenia podría comerme kilos de cualquier cosa. Pero segundos mas tarde, me estrelle otra vez con mi cruda realidad.
- No traje dinero, perdón. - en esas 4 palabras se había ido mi esperanza de comer.
- Invito yo. - Y en esas 2, al parecer, la esperanza había regresado.
Me limite a sonreír, esperaba a que lo interpretara como un si amistoso. Y, fue como una misión cumplida ya que a los segundos, tomo mi muñeca y me dirigió a una pastelería cercana. Willow inmediatamente intento treparse por mi brazo para alcanzar la mano de este chico. Pronto pensé que, ni siquiera sabia su nombre y ya iba a comer con el. Que apresurados. Pero por ahora me convenía hacerle caso, parecía que sabia donde estaban las cosas en esta ciudad, y me iba a dar de comer. Que mejor que eso?
Apenas entre de la mano con el, el olor a te de canela y manzanilla a mi derecha y el olor a café recién echo con azúcar y crema de mi izquierda y, el maravilloso olor de los pasteles de coco y medialunas del frente mio me inundaron las fosas nasales. Era como un deleite para mis pulmones el solo hecho de olerlos y sabia que pronto iba a saborearlos. Era mi paraíso. Vi a mi costado que una señora con su hija estaba comiendo una porción de un pastel de chocolate con algo de helado arriba. Sentía todas mis tripas rugir y tuve la necesidad, solo por un segundo, de sacarles esa porción y estamparmela en la boca. Pero me contuve. Sentía una mirada fija, y como siempre, mire. Era el otra vez. Le sonreí, me llevo a una mesa.Deje a Willow en mi regazo, pero como moría de hambre como yo, el tenia la suerte de que esta mesa estuviera al lado de unas plantas y no dudaba en darle unos mordiscos de vez en cuando, cuando podía el mordía. La mesera nos trajo las cartas, todo concurría con normalidad.
- Y tu nombre es...?
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Si les gusta la historia podrían recomendarla? Gracias n.n
Atte: Autora :3

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Error 404
AdventureJamas sentí que pertenecía allí, sentía todo tan cuadrado. Tenia mi vida planeada ahí. Cada momento, cada vestido, cada peinado, y, hasta quizá, palabra. Y mi inconformidad me llevo a una ciudad que totalmente desconocía, y estoy decidida a jugar mi...