C116: ¿Cirujano?

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Peter arrastró el cuerpo cojo y ensangrentado de Sabertooth de vuelta a su celda, arrojándolo sin ceremonias dentro. Deja salir un suspiro cansado mientras cerraba la puerta de la celda detrás de él. "No puedo esperar a meterme en la cama y escuchar música hasta que me duerma..."

Las barras de metal alienígenas tararearon débilmente con un campo de fuerza, diseñado para mantener contenidos incluso a los prisioneros más poderosos. Miró a su alrededor a las otras celdas, notando que tanto Toad como Juggernaut estaban despiertos y haciendo sus primeros intentos de escapar.

La lengua de Toad se disparó, con la esperanza de deslizarse entre las barras, pero en el instante en que hizo contacto con el campo de fuerza, una ráfaga de electricidad lo atravesó. El gritó de dolor, retrayendo su lengua y mirando fijamente a Peter con odio en los ojos.

"Wad da fuq wasat?!( ¡¿Qué diablos fue eso?!)" Toad se arrastra, su lengua se adormece por el voltaje.

Juggernaut, por otro lado, estaba golpeando implacablemente las barras de su celda. Cada golpe se encontró con una oleada de energía del mismo campo de fuerza, enviando sacudidas de electricidad a través de su enorme marco. Pero a pesar del dolor, continuó su asalto, decidido a liberarse.

"¿Crees que esto me va a contener?" El juggernaut rugió, golpeando los puños contra las barras de nuevo. "¡Estás muerto cuando salgo de aquí!"

Peter se rió, cruzando los brazos. "Sí, sí. Estoy tan asustado~"

El sapo gruñó, se lanzó contra las barras de nuevo, solo para ser electrocutado una vez más. "¡Te arrepentirás! ¡Solo espera a que Magneto se entere de esto! ¡Te va a matar a ti y a todos los que has amado!"

Peter negó con la cabeza, con una sonrisa formándose en sus labios. "Bueno, estaba planeando alimentarlos hoy, pero ahora no estoy tan seguro..." murmuró, encogiéndose de hombros con indiferencia. "De todos modos, ponte cómodo. Porque podrías estar aquí por un tiempo..."

Con eso, se dio la vuelta y se alejó, los sonidos de sus gritos de enojo se desvanecían detrás de él.

...

Mientras Peter bajaba por la rampa de su barco, que se cerraba de forma segura detrás de él, su almohadilla de datos sonó de repente, el sonido resonando en el tranquilo hangar.

Peter frunció el ceño, sacando el dispositivo de su bolsillo. Medio esperaba que fuera uno de sus maestros o Padme, pero para su sorpresa, el identificador de llamadas decía "Peggy".

"?" Parecía confundido, habiendo estado con ella hace menos de diez minutos, pero de todos modos respondió a la llamada. "¿Qué pasa?"

"Peter, ¿dónde estás?" La voz de Peggy era urgente, llada de preocupación. "Tenemos una emergencia".

La frente de Peter se ha frundo. "¿Qué está pasando?"

"Xavier llamó. Tenemos que llegar a la escuela ahora". El tono de Peggy no dejó espacio para discutir.

Peter asintió, ya se movía. "En camino".

Terminó la llamada y salió del hangar, su mente corriendo con posibilidades.

¿Atacó Magneto?'

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El cielo nocturno estaba despejado cuando Peter y Peggy volaron uno de los viejos helicópteros de Dreykov a la Escuela de Xavier. El vuelo tardó menos de veinte minutos, después de haber aparcado la Sala Roja bastante cerca.

Cuando se acercaban a la mansión, los ojos de Peter se abrieron de par en par al ver lo que se da. "..."

El patio delantero parecía una zona de guerra. Los cráteres y los escombros llenaban el suelo, y la mansión en sí llevaba las cicatrices de la batalla. Alrededor del veinte por ciento se estaba desmoronando y destruyendo, principalmente en el medio, donde una vez estuvo la puerta principal.

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