Capítulo 12

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Advertencia de contenido sensible, leer con precaución

El día llega, Felix mira por décima vez su reflejo asegurándose qué todo está en orden, una camisa azul marino con dibujos de gatitos casi invisibles, un pantalón corto de jean, y un calzado veraniego bastante cómodo, un poco de bálsamo labial y rubor en sus mejillas. Debatió por un largo rato si llevar una pequeña mochila o una cartera para sus cosas, quería verse espectacular, deseaba reflejar esa felicidad que siente en todo su cuerpo.

—La cartera se ve mejor, puedes cruzar la correa por tu pecho y la tendrás siempre a mano. —Jeongin lo veía mientras desayunaba, algo tarde para Felix, pero aprecia que pueda acompañarlo mientras espera— ¿Cuáles son los planes?

—Pasear, almorzar, seguir paseando... —comentaba mientras volvía a dar giros frente al espejo—. No me quiso dar detalles, quería que todo sea sorpresa.

Miraba y pensaba si eligió el conjunto adecuado, pues este es el primer día del cortejo, pasarían todo el día juntos y Chan había mantenido la expectativa en alto de todo lo que planea.

—¿Vendrán aquí cuando terminen su cita?

—Bueno, supongo que Chan me acompañará hasta aquí, pero no creo que entre.

—Pregunto por si debo irme a dormir al departamento de Hyunjin. —Felix comenzó a reír, la propuesta del alfa había tomado por sorpresa a Jeongin y no paraba de bromear con eso.

—Tu solo quieres una excusa para meterte en su cama.

Revisó el cuello de su camisa y el borde inferior de sus pantalones cortos, aún quedan marcas en su cuerpo de su último cliente, a pesar de haber pasado tiempo siguen siendo un poco visibles. Pero las que quedan se mantienen ocultas debajo de su ropa, y Chan no le habló de ninguna actividad que involucre sacarse la ropa, así que está tranquilo.

Su teléfono sonó y vio el mensaje del alfa avisándole qué había llegado, estaba esperando en la puerta del edificio. Se despidió de su amigo y bajó el ascensor sintiendo ese nerviosismo expectante que le hace tiritar de vez en cuando, esas mariposas en el estómago que lo llenan de felicidad y le hacen respirar profundo para tratar de calmarse.

—Buenos días Felix. —Chan lo saluda con una enorme sonrisa, tiene en sus manos un ramo enorme de rosas que no duda en entregarle al omega.

Felix mira fascinado el ramo, es la primera vez que recibe rosas y se siente muy emocionado. Chan siente orgullo al ver como el omega observa con cierta ternura su primer regalo, siente el revoloteo en su estomago del nerviosismo creciente, la expectativa de su primera cita en el cortejo.

Felix le agradece y regresa a su departamento para dejar las rosas en un lugar seguro, asegurando más de una vez que no va a tardar mucho. Aprovecha la vuelta para contar las rosas, doce rosas rojas y una pequeña nota que leerá cuando regrese. Chan sonríe viendo cada pequeño movimiento del omega, afirmando en cada ocasión lo enamorado que está, pues adora la sonrisa de Felix, sus pecas adornando su rostro, el delicado trote que realiza con las puntas de sus pies, la forma en la que todo en él parece brillar cuando ríe y la suavidad de sus manos cuando se entrelazan con las suyas para caminar.

El alfa se pasaría todo el camino mirando solo a Felix, admirando su perfil, pero había mantenido toda la cita en un expectante secreto y era quien debía guiar sus pasos hacia cada uno de los lugares que había investigado para llevar al omega.

Siendo el primero de estos una galería de arte, pero con la particularidad que el lugar ofrece su espacio a artistas poco conocidos de la zona, y en esta ocasión gran parte está ocupado por los estudiantes de arte de la universidad.

Imperfectos [Omegaverse - ChanLix]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora