Capítulo 4: Japón

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¿Honestamente? Odio completa y totalmente a mi compañero de equipo en algunas situaciones.

¡Osc! — He perdido la cuenta de cuántas veces lo he llamado por su nombre en los últimos 45 minutos.

— ¡No! — ¿Acaso no se sabía otra palabra?

¡Por favor! — Estaba prácticamente de rodillas a un lado de su sillón blanco.

A ver, a lo mejor muchos os estaréis preguntando cómo he llegado a la situación de estar rogándole a Oscar, pero todo tiene una simple explicación.

¡Que no! ¡No quiero saberlo! — Era un borde. Yo que sólo le quería hacer un favor.

¡Vamos! — Miré la pantalla del móvil intentando arrancar por trigésima vez — Aries: Con el ingreso de ven...

— ¡Cállate! — Se tapó los oídos con sus manos como si fuese un niño pequeño y yo empecé a intentar apartárselas para que por fin pudiese escucharme.

Estábamos llamando un poco la atención. Muy raro era que no nos hubiesen echado la bronca ya, porque estábamos siendo un tanto ruidosos.

Yo sólo quería hacer un acto de buena fe: Leerle el horóscopo del fin de semana a Oscar para que así se sintiese confiado como regalo de cumple.
Porque si, mañana es su cumpleaños.

El equipo - y yo, obviamente - le ha preparado una especie de fiesta sorpresa mañana después de la qualy. Hemos pensado en que como después de la clasificación tenemos que ir a la Fan Stage, yo me encargue de entretenerlo lo suficiente para que al equipo le dé tiempo de preparar todo en el motor home, ya que durante la clasificación en sí no iban a tener tiempo suficiente.
Por la mañana durante los libres 3 comprarían una tarta para él - ha habido incluso votación por el sabor - y la esconderíamos hasta que fuese la fiesta.
Esperemos que no hayan colisiones durante la sesión para que podamos hacer la fiesta. Si no, todo el plan se iría a la mierda.

¡Vamos! ¡Por favor! ¡Y prometo no molestarte nunca jamás! — Me miró con una ceja enarcada con incredulidad. Tiene razón, no podría hacer eso — ¡Durante este mes al completo! — Corregí.

Me miró pensativo como si estuviese determinando si le merecía la pena o no. Según él, este tipo de cosas eran totalmente cosas de redflags, pero a mi me parecía de lo más interesante.
A ver, no es que crea al completo en este tipo de cosas, pero cuando leo que a mi horóscopo le va a ir bien, siempre es un punto extra de moral. Saber que tienes los astros respaldándote siempre es buena noticia, ¿no?

Esto nunca jamás se repetirá. Este trato es de sólo una v...

— ¡Genial! — Ni siquiera había dicho que si, pero lo estaba diciendo indirectamente, así que eso cuenta como una afirmación y me lo voy a tomar como tal.

Me senté en el suelo con las piernas extendidas y el móvil en las manos mientras que él cruzaba las piernas en el sillón a lo indio para intentar escuchar con concentración.

Me van a hacer vudú o algo, ya ver... — Siseé para que se callase de una vez y dejase de replicar. Había accedido y ya no había vuelta atrás.

Carraspeé para aclarar mi voz con entusiasmo.

Una vez el año pasado intenté leerle a Oscar el horóscopo. Se vio tan confundido al principio que su cara era digna de un sticker.
Tuve que explicarle todo el royo de que no creo al 100% en estas cosas pero me gustan y él lo único que hacía era mirarme como si fuese la bruja de Blancanieves. Incluso me preguntó si era de los que hacía amarres y eso.
Después de contarle toda la historia me dijo que no quería que le leyese el horóscopo - puñalada trapera - y por mucho que lo intenté, no cambió de opinión.

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