Memorias

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Jiang Cheng observó a los presentes con una mirada fría y después se dirigió a Jin Ling.


─Deberías regresar con tu madre. -


Mencionó Jiang Wanyin, en cambio, Jin Ling solo se cruzó de brazos.


─¡Hump! -


Wei Wuxian no pudo evitar caer en la nostalgia al recordar a su hermana, el zorro necesitaba verla, abrazarla y conversar sobre sus aventuras. Jiang Wanyin se dio cuenta que el chico de túnicas oscuras había bajado la guardia, por lo que sacó a Zidian y fue hacia él.


─Líder Jiang, ¿Qué piensa hacer?-


Preguntó Lan Sizhui.


Jiang Wanyin permaneció callado y observó amenazante a Mo Xuanyu, la respuesta estaba clara, lo iba a golpear. Wei Wuxian sintió nervios al ver el impotente aspecto de Jiang Cheng, sobre todo de Zidian y entró en pánico.


─Solo existe una persona que puede usar ese poder... -


Mencionó Jiang Cheng levantando el látigo y a pesar que Mo Xuanyu salió corriendo, fue golpeado por el arma.


─¡Auch! eso dolió... -


Wei Ying aterrizó en el suelo y acarició su trasero con algo de dolor. Débil mente se puso de pie y con cuidado se ocultó detrás de Lan Zhan. Así que el dragón lo cubrió para protegerlo de otro ataque.


─Me sorprende que un Lan proteja a alguien que va por el camino del mal... -


Jiang Cheng amenazó con azotar nuevamente a Mo Xuanyu, pero este fue detenido por Lan Sizhui.


─Alto, creo que fue suficiente. Zidian nunca se equivoca, al ser un arma espiritual, ha hecho bien su trabajo. El cuerpo del joven Mo no está poseído, en cambio si hubiese sido el caso, Zidian hubiese separado el alma de su cuerpo. -


Jiang Cheng al escuchar al menor, apretó con fuerza el látigo. Después se dio la vuelta y se llevó consigo a Jin Ling sin ni siquiera despedirse. Al final, los demás siguieron su camino mientras Wei Ying no sabía si agradecerle o no al dragón por su protección. El zorro permaneció en silencio disfrutando del ambiente, hasta que rompió el silencio.


─Lan Zhan... ¿Por qué ocultaste la información sobre la cura? -


Preguntó Wei Ying.


─Shufu pidió que guardáramos el secreto, ya que es un asunto delicado. Los ancianos y médicos han trabajado duro para la posible cura. -


Respondió el dragón con tranquilidad.


─Estamos consientes de que puede que sea exitosa o no, aún así queremos ayudar a la comunidad dando el mejor esfuerzo. -


Mencionó Lan Sizhui inmediatamente.


—Estoy convencido que harán un buen trabajo, espero que todo este problema acabe pronto. -Respondió Wei Ying bastante entusiasmado.


Todos continuaron su paso hasta toparse con el bosque de las flores. Wei Wuxian sintió un aura de nostalgia al verlo, y no pudo evitar acercarse para agarrar unas cuantas flores. El zorro se atrevió en hacer una corona con las flores y colocarla sobre la cabeza del segundo dragón de jade. Los menores se sorprendieron y no sabían cómo reaccionar ante tal escena. Lan Wangji aceptó gustoso esa corona y entró al bosque disfrutando de su alrededor, mientras el zorro brincaba de un lado a otro.


─Es hermoso, ¿Verdad? -


Mencionó Wei Ying.


─Mn. -Respondió el segundo jade.


Más tarde, el grupo retomó su camino hasta llegar a Gusu. El zorro estaba hambriento y se quedó en el Jingshi esperando al dragón. Debido a su naturaleza curiosa, se puso de pie para husmear cada rincón de la residencia, hasta que se encontró con un libro. Este tenía guardado una peonia seca. Wei Ying al agarrarla, inmediatamente recordó varios momentos que pasó a lado del dragón antes de morir.


En una ocasión, el zorro y el dragón visitaron el bosque de las flores para jugar un poco. El zorro sabía que Lan Zhan le agradaban las peonias, por lo que buscó unas cuantas para lanzarlas sobre el dragón. Lan Wangji dejó a un lado su rostro frío y disfrutó de su compañía, sobre todo se quedó con una de las peonias como recuerdo. Wei Ying se divirtió mucha esa tarde. Después, ambos tuvieron un pequeño picnic a la luz de las estrellas en aquel bosque.


Ahora, el zorro se cuestiona: ¿Por qué todavía el dragón tiene esa flor? Wei Wuxian se dejó caer al suelo y poco a poco fue recuperando su memoria. Aquellos malos y buenos momentos llegaban en su mente, sobre todo el abuso por parte del dragón. En cuanto menos lo esperó, Lan Zhan entró al Jingshi y el zorro rápidamente guardó el libro.


─¡Lan Zhan! eres muy silencioso... ¿Trajiste algo para comer? -


Lan Wangji tomó asiento y de una canasta sacó varios platillos e inmediatamente Wei Wuxian se puso a comer como si no tuviese un mañana. Por mientras, Lan Zhan observaba de reojo al zorro.


─Lan Zhan, come, se va a poner frío. -


Ambos continuaron comiendo hasta terminar a tiempo, luego reposaron la cena. Al caer la noche, la residencia se mantuvo en silencio y la luz de la luna iluminó la residencia.


─Lan Zhan... -


Wei Ying observó fijamente a dragón ya que necesitaban hablar de ciertos temas, sobre todo del pasado. Wei Ying ya no podía seguir fingiendo. El par seguía en silencio, hasta que el dragón con toda calma, le vio fijamente.


─Wei Ying...

El bosque de las floresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora