La novia de Jiraiya (mejor escrita)

cap 6

Se acuerdan cuándo Tsunade pago la apuesta con Jiraiya? Bien, porque quiero aclararles que eso paso hace meses. Su relación, sigue siendo relativamente inestable, pero eso siempre ha sucedido.

Punto de vista de Tsunade:

Ahg, que kimoto tan ajustado, me queda chico pero no puedo rehusarse a usarlo. Esa mujer Lidia cree que somos amigas, me está volviendo loca. Que si vamos a tomar un café, que si vamos a comprar ropa juntas que si vamos que si vamos que si vamos. Yo no quiero salir con ella" pensé estirando mi prenda.

- que lindo le queda el kimoto Tsunade-sama- me halago Shizune entrando a la habitación.

- Si claro, si respiró se me escapan las tetas- confesé con un tono irónico. De igual manera tenía cierta verdad.

- no sea así, Lidia lo intenta. Se que no le cae bien pero yo creo que merece una oportunidad-

- ¿Qué sabes tú de oportunidades Shizune? Yo soy amiga de Jiraiya, no de Lidia! No sé porque todos están tan entusiasmados con que sea su amiga, simplemente no quiero. No la soporto- mencioné con desprecio. - Ya viste lo rara que es? Cómo se viste, como se ríe, todo. Me provoca.. no lo sé! Asco!-

Mientras escuchaba las razones por las cuales Lidia era una buena persona, alguien entro en la habitación, interrumpiendo a mi alumna. Cosa que agradecí. Pero a penas ví quién era, no supe de que lado estar.

- Tsunade!- grito la vieja de la consejera - estás llegando tarde al festival de año nuevo! Quieres humillarnos como el año pasado?-

Cuándo escuché esas palabras quise golpear a su fea y arrugada cara. Cómo era capaz de hablarme de esa manera? Lo que pasó en el festival del año pasado no fue mi culpa!

Cerré la boca y seguí escuchando el reclamo, más bien, lo ignore pero fingiendo que escuchaba. Mire al espejo nuevamente, el kimoto de Lidia si era bonito. Me costaba admitirlo, tenía un buen estilo. Seguro que me queda mejor a mí" pensé con una sonrisa egoísta.

Estar cerca de Jiraiya se había vuelto algo habitual de nuevo, había logrado calmar mis nervios cada vez que lo veía. Nuestros actos sexuales me venían a la mente como flechas y se me revolvía el estómago cuando lo veía venir. De igual manera, ya había conseguido dejar de vomitar. La culpa me consumía constantemente, cada vez que recordaba lo que le había hecho a Jiraiya se me hacía un nudo en la garganta.

Volviendo al tema, como mencioné recién, Jiraiya había vuelto a ser el mismo conmigo. Bueno, no el mismo literalmente, pero ya habíamos vuelto a hablarnos y sorprendentemente Lidia accedió a que salgamos los fines de semana. Cuándo lo pensaba mucho me hacía enojar ¿Por qué tendría que pedirle permiso a esa estúpida para salir con mi mejor amigo? Es decir, si ahora yo era la "amiguita" del novio, y qué? Yo estuve antes, toda su vida. Ella no tenía derecho de nada sobre Jiraiya. Él era mío!

o bueno, no sé si es mío realmente. Jiraiya siempre me halagaba, siempre me decía cosas bonitas que yo contestaba con indiferencia. A pesar de que verdaderamente me alegrarán el día.
Últimamente, Jiraiya no me hacía esos comentarios. El hecho de que él no engañara a Lidia conmigo ese día en su casa me dan ganas de llorar. Se notaba mi disposición, estaba lista. Decidida a ser de él. Pero no, no pasó, y ahora nunca más pasará. Cómo dije ese día, no creo volver a tener el valor de hacer lo que hice.

Y ustedes me dirán, pero realmente no hiciste nada. Y lo sé, pero estoy acostumbrada a que los hombres tomen la iniciativa conmigo, en especial Jiraiya tomaba iniciativa cada vez que tenía oportunidad. Pero está vez no, no lo hizo, así que toqué su muslo y lo mire con expresión inocente. Tuve mi mano en su pierna por horas y su reacción fue nula. El solo pensar que Lidia lo tenía a su disposición y yo no me ponía histérica.