Siempre que el pasado queda sin resolver, vuelve a ti, lo quieras o no.
Era solo una fábula que se les cuenta a los niños, una de esas historias que todos se saben de memoria en su niñez, una fantasía más. Sin embargo, a medida que creces te das cue...
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CAPÍTULO TREINTA Y CINCO PARTE I
Diario de Zethah
Pueda que haya dolido.
No obstante, tenía algo en mí que serviría.
Hablé con destino, no compartió conmigo todo, pero yo tampoco con él.
Sabía que lo que se vendría.
Una guerra.
Justicia contra Injusticia.
Verdad contra Mentira
Ellos contra Nosotros.
¿Quién ganará?
Había llegado el día.
El día de la Coronación.
Cerré los ojos y tomé una larga respiración.
—¿Estás listo Atif? —abrí los ojos para encontrarme a mi madre dándome un vistazo de arriba abajo, asegurándose de que todo estuviera perfecto conmigo—, te queda bien el traje, pero a Adif le hubiera quedado mejor.
"Ignora sus comentarios." Repetí en mi cabeza. Hace mucho tiempo atrás que sus comentarios habían dejado de doler, quizás porque ya no había una relación mamá e hijo, o simplemente me había acostumbrado a sus tratos.
La miré con atención, estaba con un hermoso vestido de color verde decorado con flores, pero lo que más llamaba la atención era la impresionante corona sobre su cabeza, hecha con nada más ni nada menos que con la magia de Telamt.
Una reina no podía recibir menos.
—Espero que hagas un buen trabajo como rey—continuó diciendo—, no me he esforzado en criarte para ser el mejor como para que no hagas bien lo que tienes que hacer. Sabes bien, que debes reinar con la mente no con el corazón—agarró mi quijada entre sus manos, sus largas uñas se clavaron ligeramente en mi piel, sabía que estaba tratando de advertirme algo—. Si llegas a estropear todo el esfuerzo que tu padre y yo hemos hecho en colocar a Telamt sobre los demás reinos no querrás saber cuáles son las consecuencia, ¿entendido Atif?
