Siempre que el pasado queda sin resolver, vuelve a ti, lo quieras o no.
Era solo una fábula que se les cuenta a los niños, una de esas historias que todos se saben de memoria en su niñez, una fantasía más. Sin embargo, a medida que creces te das cue...
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CAPÍTULO DIEZ
Los odiaba con todo el odio que podía residir dentro de un mágico.
—¿Están aquí? —apreté la mandíbula con enojo después de hacer tal pregunta.
Barak asintió con su cabeza mientras miraba en la misma dirección que yo.
A lo lejos, en uno de los tantos campos de entrenamiento de la academia se encontraban ellos. Ellos, los culpables de lo que le estaba sucediendo a nuestras familias.
—¿Por qué están aquí? —preguntó de regreso, Barak.
No tenía la respuesta a esa pregunta, así que me abstuve de decir algo. Solamente, me quedé mirando en esa dirección con un gran odio en mi corazón, verlos sonreír y ser felices había sido lo suficiente para amargarme el resto del mes completo.
—Para arruinarnos la vida de nuevo, ¿quizás? —respondió Khalil, intentando sonar gracioso, pero todos sabíamos que él estaba igual de amargado que nosotros por su presencia.
Después de ese encuentro en Avdharu, decidimos irnos y buscar las respuestas en otro lado porque sabíamos que ellos no nos serían de mucha ayuda. No querían ayudarnos y aunque había podido conseguir la ayuda de Yheh, los demás de los hermanos no querían ofrecernos la mano para resolver lo de nuestros seres queridos.
Hasta el momento aún no teníamos la cura, nuestros padres seguían sin despertar y cada día el agotamiento y la espera comenzaban a desesperarnos.
¿Cómo era posible que aún no pudiera encontrar la cura?
—Buenos días, reyes. —uno de los que fue nuestros profesores se acercó a nosotros y dio una reverencia.
No lo miré ni por un solo segundo, no podía apartar la mirada de esa familia que nos había arruinado la vida, los odiaba, odiaba todo de ellos, pero por alguna extraña y quizás masoquista razón los encontraba a ellos interesantes, con muchos misterios y secretos, los cuales quería saber, pero no lo haría.
