Él Omega Inesperado

Capítulo 6

Desde que se enteraron que eran pareja destinada, Bakugo y Todoroki, se han vuelto más unidos, hasta cierto punto.

Bakugo no ha dejado sus insultos y Todoroki sigue tan inexpresivo como siempre pero había algo diferente en ellos dos. Siempre estaban pendientes el uno del otro, preocupándose después de los entrenamientos, si han comido o si han dormido bien.

Ahora, el profesor Aizawa estaba informando sobre el siguiente actividad que sería muy importante para las notas finales se anunciaron los equipos, iban a hacer una simulación de héroes y villanos. Los equipos eran de tres contra tres. Todoroki fue escogido como villano, con Mineta e Iida. Por otro lado, tenemos a los héroes, obviamente, Bakugo, Kirishima y Sero.

Estaban todos listos en sus lugares, las reglas eran simples, el grupo que someta antes al enemigo gana. Por supuesto, los héroes debían procurar no lastimar a los villanos, aunque ellos no debían preocuparse de eso.

Todoroki sabía que sería muy difícil, sus compañeros era extremadamente fuertes en especial él omega. Habían decidido crear una trampa para los villanos con la ayuda de Mineta, los atraerán al lugar y quedarían atrapados, sin necesidad de lastimarlos. Escondieron las esferas de Mineta en una red que se soltaría apenas se rompiera. Así, Todoroki esperaba a que Iida trajera a los villanos.

Por otro lado, los villanos tenían claro que los héroes usarían el quirk de Mineta para atraparlos, así que pensaron en otro plan. Iban a separarse y atacar a los héroes uno a uno.

Todoroki no sabe cuando todo se fue al diablo. Los villanos no cayeron en la trampa, así que empezó una pelea intensa entre los héroes y los villanos. Peleaba con Kirishima y Sero intentando contenerlos a ambos. Era muy difícil contener los ataques a corta distancia de Kirishima y los de larga distancia de Sero no sabía donde estaban sus compañeros, ni Bakugo.

Hasta que escucho un grito bastante familiar que llamó su atención. Era Iida, había sido estampado contra un árbol por las explosiones de Bakugo y ahora este se acercaba a él, listo para lanzar otra explosión mucho más fuerte.

Pero, Mineta estaba cerca y eso es algo que el cenizo no notó. Rápidamente desató el nudo de la trampa y las esferas cayeron sobre Bakugo, agarrándole al suelo, sin poder moverse.

–¡Maldito, enano! ¡Voy a matarte!– gritó Bakugo intentando salir del agarre lanzando explosiones hasta donde sus brazos amarrados le permitían.

–Creo que no vas a poder matarme desde ahi, Bakugo– río Mineta mientras se acercaba a Bakugo con una sonrisa ganador.

Acercó su mano hacía Bakugo para someterlo finalmente pero, un rugido grave y fuerte los asustó a todos, cuando voltearon, se encontraron con un alpha enojado, con los ojos brillantes y los músculos tensos. Parecía que su quirk se había salido de control ya que estaba rodeado de hielo y fuego.

–Aléjate de mi omega– gruñó Todoroki mientras se acercaba lentamente hacia Bakugo. Mineta reaccionó rápido y se fue corriendo lejos de Bakugo. Iría a buscar un profesor, las cosas se habían salido de control.

–Todoroki, cálmate, estás fuera de control– Iida intentó aligerar la situación y acercarse al bicolor pero este le lanzó una mirada amenazante, sabía que si se quedaba ahí más tiempo el alpha lo atacaría. Se separó de ellos lentamente y fue a alertar a sus compañeros para que también se alejen. Tenían que pedir ayuda, no sabían si Bakugo estaría bien con el alpha, no quería que Todoroki lo lastimara pero no podia hacer más.

Bakugo estaba sorprendido incluso algo asustado, nunca había visto a un alpha enojado, ni tan cerca y menos sobre él. No sabía que decir, no sabía que hacer, no podía moverse así que cuando vió al alpha enojado acercándose al él se empezó a remover intentando liberarse, estaba al borde de la desesperación cuando notó que el alpha solo intentaba quemar las esferas a su alrededor, cosa que logró.

Con mucha delicadeza ayudó a levantar a su omega, lo abrazó y empezó a esparcir su aroma sobre el para calmarlo, al igual que acariciar su espalda y su cuello. A lo que él omega se dejó llevar, nunca se había sentido tan sumiso pero no le molestaba, estaba disfrutando el cariño de su alpha así que lo abrazó de vuelta, sosteniéndose de su cuello. El momento era perfecto, alpha y omega juntos, protegiendo y consolando mutuamente

El momento no duró demasiado, ya que llegó el profesor Aizawa alarmado por la seguridad de Bakugo. Su preocupación se relajó cuando vió al alpha y al omega simplemente abrazándose. Prefirió esperar alejado, al menos hasta que ambos reaccionen y Bakugo golpeé a Todoroki tan fuerte que lo mandará a la enfermería.