Princesa | FirstKhao

capítulo 8

"— ¿vas a coquetear conmigo? — preguntó Khaotung, mirando al mayor a los ojos. — ¿ya no somos mejores amigos?

— no, princesa. tu mejor amigo, va a coquetear contigo. — le sonrió con seguridad."

Khaotung despertó en el medio de la cama, solo.

con lentitud se sentó, diciéndose a si mismo que era un tonto por volver a soñar con que First se le declaraba, aunque a diferencia de las veces anteriores, su sueño no acabó con un beso.

esta vez acabó cuando se durmió entre los brazos del más alto.

¿por qué volvieron esos sueños? First nunca se le declararía, porque es su mejor amigo.

por primera vez, soñar con aquello lo hizo llorar desconsoladamente. en ese momento no le importó que alguien pudiera escucharlo.

acercó las rodillas a su pecho, y se abrazó a si mismo, dejando las lágrimas fluir por sus mejillas. necesitaba sacar ese nudo de su garganta. quería acabar con esa opresión en el pecho.

¿podría llamar a Gun y a Neo a esas horas de la mañana, pedirles que compren helado, y llorar frente a ellos hasta que se drene su amor por First?

— buenos días... — las palabras de First perdieron intensidad a la vez que abría la puerta, y sus miradas se encontraban. — ¿por qué lloras, princesa?

inmediatamente el mayor dejó en el escritorio la bandeja con el desayuno, para sentarse tras él, rodeándolo en un abrazo.

— ¿qué haces aquí? — Khaotung secó sus mejillas con su polera de pijama, como si eso quitara lo que el mayor acababa de ver.

— dormí contigo, princesa. — contestó con confusión. — tu madre entró para pedirte ayuda con su correo electrónico. como yo estaba despierto, decidí ir en tu lugar para dejarte dormir y volver con el desayuno.

— ¿lo de anoche no fue un sueño? — perfecto, acababa de hacer el ridículo. — tú, lo que dijiste. — ¿qué era lo que First le había dicho?

— lo de anoche fue muy real, princesa. — First dejó besos en su mejilla. — conversamos. me dijiste lo que sentías, yo te dije lo que siento. incluso te advertí que voy a coquetear contigo.

— ¿no lo dices por querer hacerme sentir bien? — el menor volvió a insistir con aquello. — no te obligues a estar enamorado de mí, First.

el mayor lo hizo voltear, quedando frente a frente. — si soy totalmente honesto, creo que he estado enamorado de ti desde que nos conocimos. — le sonrió. — me convencí de que era solo un trato amistoso, pero en el último tiempo no te he estado viendo con ojos de amigo.

— ¿cómo me ves?

— como mi princesa, — acarició su mejilla lentamente. — la persona que quiero en mis brazos al terminar cada juego, llevando mi camiseta-

— eso es lo que hacemos siendo amigos. — rodó los ojos, pero la mano de First se posó en su nuca, atrayéndolo más cerca de su rostro.

— ¿sabes qué quiero cada vez que estás entre mis brazos, princesa? — le preguntó, viéndolo a los ojos, para luego mirar sus labios. — besarte.

Khaotung comenzaba a tentarse de cumplir el deseo de ambos, pero todavía seguía creyendo que aquello no era real.

¿las alucinaciones podrían durar tanto en el tiempo?

el menor intentó alejarse, pero el otro no lo permitió. — ¿realmente lo quieres?

con su acostumbrada fuerza, First lo levantó para dejarlo sentado en sus piernas. — lo quiero. no dudes de mis sentimientos, princesa. te he amado cada día desde que te conocí. si te llamé mejor amigo, es porque lo eres. nadie me conoce mejor que tú, nadie me ha acompañado más que tú. dudo que alguien me ame más que tú.