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En el mundo, lastimosamente, hay personas que tienen la desdicha de vivir la mayor parte de su vida, o toda, recibiendo malos tratos, recibiendo el desprecio de los que están por encima de ellos, tanto en poder, belleza, dinero, etc...
En el mundo mágico, tu trato dependía de cuánto poder mágico poseyeras, cuánto más poder, mejor te trataban, claro, también importaba tu estatus social.
De vez en cuando te preguntabas porque las personas a veces tenían que sufrir tanto, solo por un maldito régimen establecido, o sea, todos somos iguales, somos personas, tenemos sentimientos, odiamos, amamos, reímos, nos podemos tristes y también felices... entonces ¿Porque tenías que ser denigrado y hasta algunos casos, condenado a muerte por no tener nada de poder mágico?
Para tu suerte, habías nacido con todos los privilegios del mundo. Tus papás te amaban incondicionalmente, tenías mucho poder mágico, y tu familia era noble. Pero no por ello significaba que eras como esas otras personas las cuales abusaban de su situación. Lastimosamente no podías ser héroe de todos, así que hacías lo necesario por las personas que te rodeaban.
Suspiraste para tus adentros antes de ver al dueño de tu corazón pasar a tu lado, te diste la vuelta y lo alcanzaste para abrazar su brazo – Raaaa-yyyyy-neeee, que bueno que te veo, justo estaba pensando en ti.
Rayne Ames, el más reciente Visionario Divino. Lo conocías desde hace mucho antes gracias a que sus familias eran muy buenos amigos. Antes no se llevaban muy bien que digamos, pero cuando él pequeño Finn vino al mundo, tanto él como su familia empezaron a ir a su casa y viceversa ya que tu hermana de la misma edad que Finn se llevaban muy bien entre ellos dos y claro, mandaban a Rayne y a ti a cuidarlos.
Eso antes de una tragedia que cambió sus vidas, tus padres los apoyaron, y gracias a ello pudieron salir adelante.Desde ahí empezó una pequeña amistad que con forme fueron pasando los años hicieron que ambos llegaran a sentir algo más que solo eso, los dos se atraían mutuamente, y aunque Rayne jamás había hablado de esos sentimientos hacia ti, y parecía querer retenerlos lo más posible, tú casi que lo gritabas a los 4 vientos.
Pero eso no quería decir que no lo demostrara, indirectamente, pero lo hacía. Siempre se preocupaba por ti, te regalaba cosas que sabía que te gustaban, el siempre estaba atento contigo ya que eras lo único que le importaba.
Tu no sabías eso... ya que a tus pensamientos, el no te correspondía, pero tampoco te preocupaba mucho, tenías toda una vida para enamorarlo, claro, mientras no saliera alguna tipa y se interpusiera entre ustedes dos, de momento estabas bien con su compañía, y te era feliz que él no se quejara de tu comportamiento tan "asfixiante" según tú, era inevitable, no podías actuar normal con la única persona que te soportaba y que para colmo, te tenía tan enamorada. Aunque a ojos de él, tu eras la chica perfecta.
El con su semblante de siempre solo se limitó a seguir caminando contigo pegada a su brazo – ¿Qué estabas pensando?
– En qué eres muy guapo obvio. Además ando pensando en cómo serán los nuevos estudiantes y aspirantes a Visionario Divino este año.
– ¿Porque? nunca te había escuchado interesada en ello.
– No lo sé, presiento que esta vez tendremos a alguien especial.
– Hm ¿Especial en qué sentido? – Rayne gruñó inconscientemente cuando dijiste "especial" pero lo disimuló rápidamente.
– Ay no lo sé, alguien que sin duda alguna nos dejará asombrados... Además este año ¿también estará Finn no es así? – El asintió – Que emoción, espero haga amigos que lo apoyen.
– Por cierto, el viejo te mando a llamar, te quiere en la Agencia en media hora.
– Ay, yo que quería pasar más tiempo contigo – Te separaste de su brazo – Iré yéndome entonces, nos vemos luego bombón – Le lanzaste un beso invisible antes de irte.
– ¿Bom...bon? que hay con esos apodos... – Rayne quedó con una cara de confusión antes de seguir caminando a donde sea que fuera a ir.
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