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Sunoo había estado bastante concentrado en la idea de la relación a distancia con Sunghoon, por lo que apenas tenía tiempo para pensar en otras preocupaciones. Es por ese mismo motivo que había pedido sus vacaciones en el trabajo en primer lugar, después de todo esa semana sería complicada.
Eso hasta el día siguiente, cuando Jay y Jungwon se marcharon a su departamento y ellos quedaron solos nuevamente. Los planes surgieron como si nada. Sunghoon había revelado las fotografías de su cita en la biblioteca y estaba deseando mostrárselas, por lo que luego de que ambos tomaran un tranquilo desayuno y luego se vistieran, emprendieron camino hacia el departamento de Sunghoon.
De pronto, cuando iban de camino, un pensamiento intrusivo llegó a su mente.
¿Qué pasa si no funciona?
Sacudió su cabeza de inmediato, como si con esto pudiera disiparlo, al tiempo que llamaba la atención de su novio a su lado.
Sunghoon le dirigió la mirada por un breve segundo, para luego apartar la mano del volante y dirigirla hacia la suya, entrelazando sus dedos.
—¿Todo bien? —Pregunta, queriendo asegurarse.
—Todo bien —Sunoo reafirma, brindándole una sonrisa y presionando su mano también.
Sunghoon confío en su respuesta.
Minutos después se encontraban entrando en su departamento.
—Tengo una habitación pequeña en la que apenas cabe una cama —explica Sunghoon—, y como no vivo con nadie más, tenía dos opciones; usarla como bodega o transformarla en un estudio de revelación.
—¿Cuál escogiste? —Sunoo pregunta, aunque intuye la respuesta, mientras lo sigue por el pequeño pasillo.
—¿Qué piensas tú? —Sunghoon sonríe y abre la puerta de la pequeña habitación dejando que Sunoo entre primero.
La habitación tenía una ventana la cual tenía persianas oscuras, las lámparas sobre una pequeña mesa con bandejas de agua encima emitían una luz suave, y frente a la ventana había otra pequeña mesa con una luz roja.
—Este es mi pequeño cuarto oscuro para revelar las fotografías.
Sunoo miraba a su alrededor sin poder distinguir demasiado debido a la oscuridad, pero podía distinguir las cuerdas en la pared de un extremo a otro, con pequeñas pinzas que sostenían las fotografías.
—Esto se ve muy profesional —Sunoo siente la necesidad de murmurar debido al ambiente.
—En otra vida fui un fotógrafo profesional —Sunghoon ríe con suavidad.
—Yo creo que lo eres, pero en secreto —Sunoo se gira hacia él y se da cuenta de que esta más cerca de lo que pensaba.
La habitación era relativamente pequeña, las mesas y una silla en el interior dejaban menos espacio, por lo que ambos estaban muy cerca.
