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Jeongyeon, Sana y Jihyo a veces pensaban que Momo sufría de estrés postraumático, con validas razones. Quizás era algo obvio que sucediera luego de todo lo que la chica habia vivido y el hecho de que nunca lo hablo con nadie, ni tampoco asistió a ningún tipo de terapia. Así que era casi normal encontrarla viendo televisión en la sala a las cuatro de la mañana, de paso al ir a buscar un vaso de agua a la cocina. Aunque esos días las señales eran los gritos cargados de terror que lanzaba entre sueños.

Las tres compartían miradas preocupadas viendo a la ojerosa chica desayunar desganada. —Oye, Mo...

—Si van a empezar con sus malditos sermones, mejor me voy, puedo ver la estúpida compasión en sus rostros. — Se puso de pie, llevando su tazón hasta el lavadero. — Es muy temprano para que inicien con su mierda.

—Nos preocupamos por ti.

—Y no necesito que lo hagan, estoy bien. —Gruño, caminando hacia la salida para tomar su mochila y colocarse sus zapatos, se retiró con un portazo.

Jeongyeon suspiro. —Déjala, Zyo, ella sola pedirá ayuda a este paso.

—Solo espero que no sea muy tarde. —Sana suspiro.





Dahyun tenía una expresión relajada en su rostro mientras paseaba a su perrito Ari, le gustaba pasear por los grandes patios de su hogar, su infancia no habia sido la mejor pero de grande pudo disfrutar más del lugar. — ¡Busca la pelota, Ari! —El animal salió disparado en dirección a la pelota de tenis, como si estuviera compitiendo con alguien más para atraparla primero. —Tan tierno.

—Es raro verte fuera. —Rodó los ojos sin voltear. Myungsoo rio por lo bajo. —Eres de las que aman su cueva más que el exterior.

—Muy gracioso.

—Vamos hermanita. —Rodeo sus hombros con su brazo derecho. —Sabes que soy chistoso.

—La gente se ríe de ti, no contigo.

— ¡Oye! —Ambos rieron, era una conversación normal entre ellos. —Pensé que estarías con las chicas.

—Esa era la idea pero Chae y Mina están ocupadas con compras para su casa, Tzuyu y Shuhua ultimando detalles para su boda y es un día muy caluroso para salir.

Rodó los ojos, dando un leve zape en la parte trasera de la cabeza de la omega. —Yah, pequeña idiota, es un día perfecto para salir. —Dahyun estaba lista para quejarse pero el teléfono del chico la interrumpió. —Bien, debo irme, tengo una reunión con papá.

— ¿Todo bien?

—Sí, es la reunión trimestral de siempre, solo vine a buscar mi almuerzo. —Dejo un corto beso en la cabeza de la chica. —Nos vemos en la cena.

—Suerte.





—La siguiente presentación que tendremos será que Japón. —Todos celebraron, ella solo apretó sus manos entre sí, era una buena noticia. —Un estudio de danza nos invitó para una competencia. Es anual es solo se puede ingresar si ellos se contactan con las escuelas, y fuimos elegidos para ser parte de los participantes, obviamente esto quiere decir que debemos esforzarnos mucho para llegar lejos. —La joven beta, dueña del estudio donde trabajaba, se veía emocionada y muy feliz. —Saben que esto es un logro muy grande para nosotros, digo, no somos financiados por ningún tipo de empresa o donaciones. Así que estoy muy feliz.

Lucky #17Donde viven las historias. Descúbrelo ahora