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A la mañana siguiente después de un mañanero la pareja se dirigió a la cocina para cocinar el desayuno juntas, ya que Ryujin le había escrito a su trabajadora Liz que le daba el día libre.

— ¿Batido de mora o fresa? — preguntó Yeji.

— De mora — respondió Ryujin mientras estaba pendiente al sartén en el que estaba cocinado huevos revueltos.

Terminaron de cocinar el desayuno y lo sirvieron,ahora estaban comiendo mientras conversaban de lo más normal, se regalaban sonrisas que hacían alborotar el interior de las dos. Su momento fue interrumpido por el sonido del timbre.

— Ay que pereza,no quiero ir — se quejó Ryujin.

— Voy yo, no te preocupes — mencionó Yeji.

— Bebé, se supone que nadie debe saber que ESTO existe — afirmó haciendo énfasis en "esto".

— Jijiji es cierto — rió tiernamente.

— Ya vengo — se levantó y antes de alejarse se acercó a acariciar la mejilla de la pelirroja.

Ryujin se dirigió hacia la entrada de su casa lata abrir la puerta, al ver a la persona que estaba en frente suyo se sorprendió demasiado y solo quería que la tierra la tragase.

— ¡Hola Ryujin! — saludó Heejin — Traje esto para tu gatita, pensé en ella toda la noche, pobrecita — Le entregó una funda de regalo a Ryujin y se llevó la mano al corazón por la pena que sentía.

— HEEJIN no esperaba verte aquí — casi que gritó el nombre de su ex, para que Yeji lograra escucharla — Gracias por el detalle.

— También traje Soju y algunos snacks

— Wow, no sé qué decir — sonrió nerviosamente.

— Te ves jodidamente bien, por la poca ropa que llevas puedo asumir que tuviste sexo — dijo Heejin bastante asombrada.

Cerca de la entrada ya se encontraba Yeji que al escuchar a la pelinegra decir el nombre de su ex rápidamente se levantó de su asiento y fue a ver qué ocurría. Llegó justo en el momento en el que Heejin dice su ultimo diálogo.

— ¿Qué? Nooo claro que no — reía la pelinegra tratando de disimular.

— Vamos Ryujin, mírate llevas puesto unos shorts diminutos y una blusa muy reveladora — entró a la casa — Hasta podría jurar que la persona con la que estuviste está aquí.

—Heeji basta, me estás avergonzando — tapó su rostro con la funda de regalo.

— Bueno, ya vengo iré por lo que traje al carro.

Ryujin en ese momento caminó súper rápido al comedor pero se dio cuenta que Yeji estaba espiando todo arrimada a una pared, se comenzó a reír ,se aceró a ella y la tomó de las mejillas — Parece que tenemos visita ¿qué hacemos? ¿Te vas a esconder?

Yeji juntó sus labios con los de la pelinegra, tenía un objetivo en ese momento y no le importaba nada más que cumplirlo. Quería que la ex de la pelinegra las viera y sonrío porque al abrir los ojos un poco en medio del beso pudo observar que Heejin ya estaba dentro de la casa y estaba buscando a Ryujin.

— Ay amor besas tan rico — dijo Yeji en un tono emocionado y alto.

Heejin claramente la escucho y casi que corrió hacia dicha pared para ver lo que ocurría y lo que vio fue a Ryujin y Yeji moviendo sus narices inocentemente mientras se sonreían una a la otra.

— AAAAAHHHH ¿CON HWANG YEJI? — gritó súper emocionada — NO LO PUEDO CREEEEER.

— Dios mío — se quejó Ryujin y Yeji se reía porque había cumplido su objetivo.

Perfect Velvet | Ryeji auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora