Amanecí el día con lo que es un humor de perros, estuve practicamente sobrepensando toda la noche, aparte de el dolor que tenía pracicamente en toda la cara y el moratón que futuramente se creara. Sobre a lo que estuve sobrepensando, tenía miedo de lo que podía pasarle hoy a las chicas de ayer, es decir, no se de lo que ese chico es capaz de hacer, no creo que les fuera a hacer mucha cosa, quizá un aviso, una mera discursión o que ellas vengan a disculparse conmigo, o al menos eso es lo que espero.
Me levante de la cama para agarrar mi uniforme, aunque al ponermelo note que era demasiado grande para mi y que tenía un oloe diferente, me miré en el espejo que tenía en la habitación viendo que era lo suficientemente grande como para que se viera el chupetón y la mordida que estaba en mi trapecio, asi que corriendo hacia mi armario note que todas mis camisas para el instituto fueron reemplazadas por camisas como estas. Maldita sea él, lo tiene todo malditamente calculado, asi que me terminé de vestir y me puse un pañuelo en el cuello, luego pediré algo de maquillaje puesto que no iba a ir enseñando la marca rojiza y violeta que estaba allí porque tengo algo de dignidad ¿vale?
Llegué a la parada del bus, después de haber ido practicamente corriendo, aunque al subir a este e ir hacia el instituto tenia un mal presentimiento de todo, cmo que había algo pesado que estaba en mi pecho, intenté ignorarlo lo máximo posible y centrarme en la música que iba escuchando.
Llegué al instituto, como de normal y tras cambiarme las zapatillas normales a las que podía utilizar en el instituto, caminé hacia mi clase, donde me senté en mi pupitre y fue allí donde sentí un aura completamente pesada, como melancólica, triste. Me sentía bastante incómodo y extrañado, al no estar acostumbrado y al no entender el porque de este tipo de pesadez.
En lo que llegaban el resto de gente se me acercaron May y Lia, las cuales casi se me abalanzan encima en un abrazo, a lo que yo se lo devolví algo bastante extrañado al hacer bastante tiempo de no haber tenido prácticamente ninguna amistad.
-¿Qué tal estás? ¿por qué llevas pañuelo? nunca te vi con ellos puestos- me preguntó Lia, a lo que yo únicamente atiné a sonrojarme hasta las orejas, aunque no quisiera, por amor a lo que sea, que vergüenza.
-¿¡Es un chu-?!- medio gritó May y la tapé la boca rápidamente y las arrastré a ambas hasta el baño, intentando evitar todas aquellas miradas curiosas.
Una vez estuvimos dentro del baño, en el cual no había nadie, ellas empezaron a prácticamente interrogarme con preguntas tipo "¿tienes novio? ¿quién es? ¿es guapo? ¿es de clase? ¿es del instituto? ¿es un hyung?"
-ya callaos por favor- dije totalmente avergonzado- no, no tengo novio, digamos que es un lío, no es de clase y si es del instituto- mentí, por favor, no las iba a decir que fue mi admirador secreto, las conozco de no mucho y no tengo tanta confianza todavía.
-¿Quieres que te de algo de maquillaje? para que no tengas que levar el pañuelo y tengas calor- me preguntó Lia a lo que asentí y ella sacó de su mochila un neceser pequeño, donde ella guardaba su maquillaje.
-Quitatelo, no puede ser tan malo- ordenó May a lo que con vergüenza quité el pañuelo dejando ver la gran marca en mi trapecio, gracias a eso ellas se quedaron algo bastante sorprendidas.
-¿Seguro que no te liaste con un canibal? ese chupeton es enorme- acusó May mientras Lia me aplicaba la base en el chupetón, empezando así a taparlo.
Al terminar de maquillarme, que tambien fue en la cara al estar ya un poco morada por el golpe de ayer, salimos del baño, como si nada, aunque si sentí algo detrás a lo que miré y ví que alguien se había metido en una de las clases rápidamente, aunque no le dí demasiada importancia ya que íbamos a llegar tarde a clases.
Entramos a la clase, sentándonos cada uno en nuestros sitios y entró la profesora, aunque nos dijo que las dos chicas de ayer habían desaparecido desde después de las clases, a lo que me quedé algo bastante en shock, me puse incluso pálido y me quedé observando mi mesa, completamente ido. Estuve todas las clases en mi mundo estaban pasando tantas cosas en tan poco tiempo.
Al final de las clases me dirigía hacia mi taquilla, de la cual al abrirla cayó una nota al suelo a lo que me agaché a recogerlo notando que era otra carta de mi admirador aunque además había otra foto, la foto era de cuando Lia y May me estaban maquillando. En la nota ponía lo siguiente:
"Eres mío angelito, me hierve la sangre de tan solo verte con ellas, además de que te estan tapando mi marca, la marca de que eres solo mío, de nadie más, mierda, me pones tan celoso mi niño, el pensar que ellas te estan tocando cuando yo todavía no puedo ni tocarte, me vuelves loco, aunque no te preocupes a ellas no las haré nada, se disculparon contigo y se ve que son buenas, aunque las otras chicas no tuvieron el mismo destino, acuerdate de que eres mío, solo mio, en casa tienes otra sorpresa, te quiero mi angelito."
¿Qué cojones? ¿qué es lo que les a hecho? ¿porque las chicas han desaparecido? mierda, creo que a la próxima no voy a dejar pasar este sentimiento pesado. Guardé todo rápidamente en mi mochila al escuchar a gente acercarse hacia donde estoy. Estas eran May y Lia, las cuales me estuvieron buscando desde el timbre de la última clase, y una vez estas se me acercaron nos llegó a los tres una notifcación, la cual si ya de por si estaba en shock estaba que me desmayaba.
"Se descubre las muertes de las dos estudiantes desaparecidas en Seúl, ambas desaparecidas durante 24 horas. Los cuerpos de ambas chicas se encontró en una fábrica abandonada, presuntamente ambas se suicidaron, el equipo forense y policía estan averiguando más sobre este caso...."
El resto de la noticia no lo pude terminar de leer, estaba completamente asustado y temblando, de no ser por May, casi que me caía al suelo. según ellas estaba completamente pálido que a decir verdad no me extrañabaen absoluto.
Me fui al baño, para lavarme un poco la cara, y aunque sea despejarme un poco, tenía tantas ganas de vomitar, no me esperaba esto, aunque no sabía de lo que él era capaz de hacer. Me termine de lavar la cara y volví a ponerme el maquillaje que anteriormente le pedí a Lia que me volviera a prestar, y mientras me maquillaba entró alguien al baño, era un chico bastante alto y de pelo oscuro aunque llevaba mascarilla, no me quedé demasiado tiempo mirándole, era de mala educación.
Cuando el terminó de hacer sus cosas se acercó al lavabo, para lavarse las manos, y me llegó un olor bastante familiar aunque no pasó demasiado tiempo para que el se largase, aunque me dí cuenta que dejó algo en el lavabo, miré y fue una rosa con una etiqueta la cual decía "Para tí mi angelito" a lo que salí rápidamente del baño aunque ya no había nadie en los pasillos.
Mierda.
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Querido admirador secreto
RomanceYoung-ho, un estudiante de bachillerato recibirá una carta de amor, aunque al principio pensaba que era una de las tantas bromas de sus compañeros, todo se torna oscuro cuando intenta adivinar quien es ese gran "admirador secreto", sin embargo él no...