Será que sí?!

Capítulo 11

Lea

Despierto abrasada algo o a alguien, mientras me remuevo en mi lugar me acuerdo de lo que paso anoche y me siento vulnerable estando al lado de Marcus, el sigue siendo parte de mi vida y me duele estar asi con él, pero debo comprender que ellos solo querían protegerme.

Me doy la vuelta para verlo dormir tranquilo a mi lado, están lindo, sus ojos están cerrados, sus risos caen por su rostro dando una apariencia tierna y los rayos del sol que entran por la ventana de mi habitación iluminan todo el lugar y sobre todo su rostro, sin pensar en lo que hago decido tocar suavemente su piel, me sorprendo por lo suave que es, su respiración es relajado, por lo que creo que sigue dormido... me quedo un buen rato observándolo y me sorprendo a ver que sigue con la misma ropa de traje que tenía ayer, se me paro de él, y busco en mi closet algo para vestirme y algunas de las ropas que una vez Marcus dejo aquí, ya que venía seguido y algunas veces de quedaba a dormir.

Una vez que tengo todo lo que buscaba, me dirijo a la cama con las ropas en manos, les dejo las de en una de las sillas que tengo en mi habitación y me dirijo al baño.

Cuando salgo tengo unos jeans negro ajustados y un tenis blanco a juego con mi t-shel blanco, observo hacia la cama y veo que Marcus está sentado en la cama mirando cada paso que doy por la habitación.

-Hola como amaneciste princesa?

-Bien, hay esta un cambio de ropa, tranquilo es tuya se te quedo la última vez que dormiste aquí, está limpia, puedes usar el baño.

Le digo mientras señalo la ropa y el baño, él no me dice nada más y se levanta y se dirige donde le señale a buscar la ropa y luego entra al baño. Me ponga a recoger mi habitación y arreglar la cama, una vez que todo está limpio y ordenado me siento a esperar que termine, para bajar de desayunar y aclarar lo que me paso a noche y mi pequeña crisis.

Sin mucho esfuerzo me quedo envuelta en mis pensamiento que no me doy cuenta cuando Marcus sale ya cambiado y con el cabello mojado, sentándose a mi lado.

-¿Estas bien Lea?, has estado con la mirada perdida desde un rato.

-eh, a disculpa solo estaba pensando en lo que ha pasado en este tiempo, con nosotros con mi hermano, con los demás. Estoy cansado, siento que no puedo con todo esto.

Siento que me atrae a sus brazos y me abraza firmemente, un abrazo el cual yo correspondo sin titubear, y me a carisea la cabeza, amo cuando hace eso, me hace relajarme y olvidar todos los problemas.

-Oye olvida todo lo demás y concéntrate en nosotros sí, Yo siempre estaré aquí para ti y te ayudare a salir de donde tu propia mente te encierre, solo quiero que estés bien, eres lo más hermoso y puro que me ha pasado en mi vida, sin ti no soy nada.

-Sabes que tú también eres mi ancla, eres muy especial para mí. Aun cuando yo no soy la mejor persona y tengo mis momentos de querer dejar todo.

-Yo siempre estaré aquí para cuando me necesites, yo no dejare que tu mente sea lo que se apodere de tus decisiones. ¿Acepta ser mi novia?

La pregunta me tomo por sorpresa, pero me emociono que me pida ser su novia nuevamente, me separo de él y lo miro a los ojos para ver si me está hablando con sinceridad y solo veo admiración y amor en su mirada, sin pensar las cosas me tiro a sus brazos y lo beso, el cual es correspondido por él.

- Creo que eso es un sí.

- Sí, claro que sí.

No sé cuándo pero estamos recostados en la cama besándonos como si fuera lo más importante, hasta que siento que las cosas están subiendo de nivel y me separo, lo amo pero no estoy segura de dar el siguiente paso con él, nunca eh ido más allá de un beso con una persona, y tengo miedo de no hacerlo bien y que nunca quiera estar conmigo por no tener experiencia; yo y mi inseguridades.