Italian Vampires: Lazos De Sangre [Kookmin]

02 Tentación

Regresó a la mansión por la madrugada y sin guardaespaldas. Jimin y su audacia habían salido ilesos mientras se daban a la fuga.

Estaba sediento, llevaba días sin poder alimentarse bien, debido a que no podía tomar la sangre de Jeon por qué este no le dejaría, cosa que era más que obvia. Tendria que salir a cazar como en la antigüedad.

Correr a través los enormes árboles hace que el trayecto sea menos espantoso, usando su rapidez Jimin avanza con ligereza sintiendo como el aire le pega al rostro y su cuerpo se estremece ante la adrenalina, lo hace sentir vivo. Se detiene cuando se da cuenta que ha cruzado los límites que Jeon le ha puesto, un poderoso aroma a sangre flota en el aire y eso provoca una electricidad en todo su cuerpo.

Por unos instantes el peso de romper las ordenes de Jungkook le provocan fatiga, pero está pasa al olvido siendo sustituida por la sed.

La sangre le llama, sus colmillos han salido a flote y sus uñas ahora han sido remplazas por unas largas y filosas, algo se mueve por su izquierda y Jimin posa su vista en su presa, se queda quieto, escucha más ruidos y de pronto comienza moverse sigiloso rodeándolo.

Es un venado y se lame los labios a la espera que esté le de la espalda para así poder atacarlo rápidamente, lo hace rápido y fuerte. Jimin mata al venado mientras le clava las garras en el cuello para luego clavarle los colmillos, ahí tendido en el suelo Jimin se encarga de drenar toda la sangre del animal hasta dejarlo seco por completo.

—Hummmm, delicioso —Jadea dejando caer la carne llena de sangre sobre la tierra, tiene machada la barbilla y una gota de sangre le recorre la mejía, no tarda en limpiarla con su propia mano pintándose más la cara del color escarla.

Esta hecho un desastre y no puede importarme menos, a saciado su sed y eso es lo único que le importa. El vampiro se alza al aire y se echa a correr de nuevo.

Esta regresando al límite establecido cuando siente una fuerte punzada martillarle la cabeza, el dolor es insoportable y lo deja caer de rodillas mientras suelta un alto siseo.

—¿Te gusta romper las reglas Jimin? —Esa voz, es profunda y demandante, hace querer que Jimin baje la cabeza y muestre respeto, se siente como si traspasará todas sus capas mentales y derribará todo su poder.

Jimin está de rodillas con las manos apretandose la cabeza, inmóvil, como si una fuerza oscura le obligará a permanecer quieto por completo.

"No eres un lobo Jimin, el hecho de que Jungkook sea tu pareja no quiere decir que tiene ese poder gobernate sobre tí" —se mentalizo.

Dejando caer sus manos a los lados Jimin clamó a su animal interior y al instante sus colmillos resaltaron de nuevo, los ojos le brillaron en un profundo amarillo.

Tan brillantes como el sol. Como dos faros en la oscuridad.

—Las reglas fueron hechas para romperse Señor Jeon —elevó la vista y sus orbes chocaron con los penetrates ojos de Jungkook que le acechaban asesinos en la oscuridad, —¿Si no dígame cuál sería la diversión?

Jungkook está de pie delante de un tronco enorme, tenía los brazos cruzados y esta sin camisa dejando a la vista su piel blanca cubierta de tatuajes, Jimin los repasa con la mirada.

—De pié —gruñó.

Y Jimin se rió sin gracia. Aun así apoyado de su pie derecho Jimin se inclinó y se puso de pié mientras le retaba con la mirada.

Los ojos de Jungkook brillaron como brasas en la oscuridad y Jimin deja que sus uñas largas salga a flote de nuevo mientras comienza a moverse cauteloso formando círculos a su alrededor.