Tónica y Jengibre

25 5 0
                                    



Prometí que publicaria ayer pero cambié de cel y no recordaba ninguna de mis contraseñas pero ajá...acá está gracias a quienes están leyendo de todo corazón

Celeste Figueroa no conseguía dormir ,de vuelta en aquella cama enorme  reproducía en su mente lo que había vivido hacia solo unos instantes junto aquel hombre que ahora vivía en su casa sin razón lógica alguna.

—Por favor Celeste, Hugo.–sintió su mirada–Qué somos amigos!!—.

Intrigada, así se sentía por aquel hombre se preguntaba ¿Que le aportaría a su vacio?¿Por qué intuía que su ayuda sería importante?Esas preguntas martillaban en su cabeza mientras se acercaba a él aceptando la mano extendida.

—Esta bien, Hugo–dijo sin tono en la voz ,desconfiaba de aquel de personalidad intensa ,por miedo ,temia tanto por tantas cosas vivía incompleta a penas agarrándose de los vestigios de lo que alguna vez ella había sido.

—Con qué me acompañas?–se dirigió al carro de bar agarrando un vaso.–Un anís?Te gustaría??—

—Estás loco?—abrió grande los ojos—No voy a tomar alcohol  a estas horas y menos contigo!–lo regañaba viéndolo preparar un trago para ella ignorando su habla.

—Ten!–la miró a los ojos.

—Te dije que no!!–le respondió viéndolo acercarse agarrando su brazo para colocar en su mano el vaso con el líquido casi a la fuerza.

—Bebe!–Fue casi una orden, dejándola algo aturdida para verlo sonreír de inmediato.

—Puedes beber!–Sonrió de medio lado —Te prometo que no tiene alcohol!—

Celeste dio un sorbo confundida sintiendo en su boca el gusto amargo y alimonado del trago se sintió tranquila y en paz por unos segundos.—Tónica y jengibre .—Reconoció aquel gusto particular automáticamente.

—Aún te gusta?—sonrió el hombre que tenia en frente mostrándole el frasco con las raíces en un líquido que parecía almíbar .

—Eso parece—A la señora Celeste se le escapó una tímida sonrisa .

—Este lo preparé yo..—Le señaló el macerado —Hace ya casi 4 años–estaba sorprendido de ver el frasco aún alli —Máximo estuvo friega y friega con que preparará el famoso macerado de don Enrique.—Veía a Céleste beber de nuevo—Me decía que tú tenias que probarlo que te encantaria y tuvo razón —

—Máximo tu amigo, el de cabello negro?—quiso confirmar.

—Ya veo que es inolvidable mi amigo–sonrió tranquilo—Ese mismo !Me alegra que lo recuerdes!—

—Tengo muchas preguntas...—acababa de beber su trago—Por qué mi marido lo odia tanto!!?—Céleste se levantó de una vez del sillón donde acompañaba a Hugo viéndolo ir a servirse otro trago.—Por qué tanto disgusto hacia Máximo, que le hicieron a Ángel? Tú tampoco que le caes bien no entiendo que haces aquí ?!¿Qué haces aquí?—Preguntó más directa alzando una ceja.

—Celeste— se acercó a ella con voz tenue colocando su cabello detras de su oreja analizando su rostro, el toque de su piel suave lo hizo suspirar—Tendrás que confiar...—Susurró en su oído dejándola sola en aquel salón.

"Tendrás que confiar" –Aquella frase martillaba en el cerebro de Celeste de vuelta en aquella cama.—Confiar en qué?confiar en quien??Aún sus preguntas no tenían respuestas el sueño donde Máximo la besaba parecía más una imaginación de su mente que un recuerdo la delgada línea  entre lo que había vivido y lo que creaba su cabeza para rellenar espacios cada vez se desdibujaba más pero algo era seguro y era que Hugo sabía al menos parte de ese pasado .

Hugo Sarracent en su cama aquella madrugada tampoco podía dormir sabía que Celeste estaría allí como hacía 4 años había intentado de recrear el mismo ambiente en el fondo sabía que ella bajaría lo sabia...

Casa Campos 4 años atrás

La señora Celeste miraba el fuego con rabia en los ojos, las lágrimas caían como lluvia y sus sollozos silenciosos eran ahogados, aquel año había sido complicado para su matrimonio le dolía inmensamente el amor que sentía por su marido.

—Señora Figueroa se encuentra bien?—la voz de aquel hombre que se había instalado en su casa junto con su amigo la asustó

—Sarracent?!!!–Se levantó arrancando las lágrimas de sus ojos con rapidez —Si si no más vine a por...a...

—No necesita explicarme—Interrumpió lo que había pasado en aquella casa con el matrimonio Campos Figueroa ya no era secreto para nadie.—Venga siéntese conmigo un poco no la voy a dejar regresarme a su recamara así —Agarró su mano guiandola hacia el sofá.

—Señor Sarracent...

—Hugo,por favor Celeste que somos amigos!!!—Céleste lo miró algo desconcertada.

—Si, ya somos amigos Celeste ya te vi llorar así que ni madres !!—Bromeó.

—Esta bien,Hugo.—sonrió.

—Y tu que haces despierto?–Quiso saber.

—Necesitaba alcohol —la miró serio esperando una reacción ,después de una larga pausa la escuchó reír y rieron los dos —Es la segunda sonrisa que le veo en menos de diez minutos algo estoy haciendo bien que ya no llora. —Céleste se sonrojó realmente ya no lloraba.

—Yo..yo ya me tengo ...

—No!!No te puedes ir ahora que te hice reir con qué me acompañas?—Preguntó el más joven.—Se que es tarde pero uno nunca sabe —

—Al final si que necesitabas alcohol —elle bromeó también —Ponme un anís !

—Marchando!

—Pero cómo?!!! Haces una reunión con la dueña de la casa y no fui invitado??!Hugo eso no se hace !!—Máximo llegó al salón también,habia bajado por agua y las risas aunque discretas habían llegado hasta él.Se acercó a Celeste—Tan hermosa siempre ,hasta con esos ojitos marchitos de llorar ,no me gusta que llores –Dijo sereno dijo provocando vergüenza en Celeste que de alguna forma se sintió protegida .

—Ay no seas así de sensible Máx!Que te pongo?!—El más rubio Preguntó, mientras Céleste se sentía a gusto con aquellos dos jóvenes que había empezado a conocer hacia tan poco .

—No tienes alli el macerado de don Enrique el de tonica y jengibre?—

—Ay como crees Máx aquí no tienen esa receta especial—alardeó.

—Que receta?—La mujer miraba sonriente
—Querida Celeste es un trago horrible pero delicioso—respondió Máximo

—Máx ya la dejaste más confundida—Bromeó Hugo .

—Es que es un gusto adquirido pero una vez aue lo adquieres ya es para siempre!!

—Pues vas a tener que prepararme un poco de ese famoso macerado —La mujer miró a Hugo, aun quedaban vestigios de lágrimas en sus ojos pero traía una sonrisa en los labios

—Será un placer !!

Actualidad de Celeste

Era una nueva mañana una nueva semana y la señora de la casa Campos había decidido que ya era hora de encontrar alguna rutina que se adaptara a su vida ,los recuerdos volverían en algún momento o no,los sueños sobre el fenix no dejaban de atormentarla pero no dejaría que eso la bloquease másera hora de avanzar y comenzaría vaciando su cuarto de closet enorme tenia muchísima ropa intacta que parecía no haber usado en ciglos ,decidió que otras personas más necesitadas le dieran un mejor uso ya llevaba horas clasificando atuendos vaciando uno de los compartimentos encontró una ranura dandose cuenta que era un cajón escondido paró todo lo que estaba haciendo para abrir aquel lugar sus dedos supieron abrirlo sin esfuerzo,ya sabían como dentro del cajón una caja con recortes  ,recortes de muchas cosas recortes que hablaban de los trapos sucios de la sociedad en la que vivía, recortes que hablaban de las amantes de los amigos de su marido, recortes que hablaban de fraude, de escándalos todos firmados por un tal Claudio Fornaris.



























Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 16 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Tu recuerdo en pausaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora