Aprendiendo A Amar

ESTOY ENAMORADO (1/2)

—Creo que necesito un poco de espacio.

Estaban frente a la casa de Sakura cuando este habló de la nada. Haruka observa a Suo, y logra notar cómo la sonrisa de él titubea para luego volverse completamente falsa. Puede reconocerlo, ha pasado más de un mes desde que caminan juntos, se abrazan y hablan más de lo normal. Hayato fácilmente podría ser la persona con la que Haruka más ha hablado en toda su vida. Así que, es fácil reconocer los pequeños detalles que antes podían pasar desapercibidos.

—¿He hecho algo para incomodarte?

La pregunta se siente como si hubiera sido forzada a salir, y Sakura reconoce que es la manera en la que Suo pide más explicaciones. Después de todo, Suo se ha esforzado para no incomodarlo, ha pedido permiso a Sakura antes de hacer algo y se ha asegurado de escucharlo siempre. Suo es muy atento, gracias a esto, Sakura se siente cómodo con todos los avances que han hecho. Incluso, el mismo Suo lo sabe, no hay manera en la que haya incomodado a Sakura en algún momento.

—No, no... Si-simplemente, necesito reflexionar.

Sakura siente que el calor sube a sus mejillas rápidamente, su corazón se acelera un poco a causa de su nerviosismo y evita la mirada de Suo. A Haruka le gustaría dar más explicaciones, después de todo, Suo le había dejado en claro que la comunicación es vital para que las relaciones funcionen. Sin embargo, aún es difícil para él expresarse con sinceridad sin ponerse nervioso y tartamudear, hablar de sentimientos no es algo que Sakura sea capaz de hacer, quizás muera de un ataque al corazón.

—Hmm... Está bien, entonces te veo mañana en clases, Sakura-kun.

Por alguna razón, Suo se escucha contento, pero Sakura no se atreve a mirarlo ni a responder, así que solo asiente con timidez. La mano de Suo lo toma a Sakura del mentón para obligarlo a levantar su cabeza, y él cede con un quejido, logrando observar el rostro sonriente de Suo con el ceño fruncido. A pesar de su mala cara, Haruka deja que el castaño aparte los mechones bicolores de su frente.

—¿Qué estás-

Suo no lo deja terminar, él se inclina para dejar un casto beso en la frente de Sakura, y luego retrocede con una sonrisa inocente. La cara de Haruka arde a causa del fuerte sonrojo que lo invade y, enseguida, se aleja como si hubiera sido electrocutado. Suo ha besado su frente. Sakura lleva su mano derecha hasta su frente, el lugar en donde fue besado, mientras observa a Suo teniendo un fuerte conflicto mental.

—¿Quieres otro beso, Sakura-kun?

—¡VETE A LA MIERDA!

Sí, Sakura quería otro beso, pero moriría antes de admitirlo. No repetirá lo que sucedió cuando Suo besó su mejilla por primera vez. Cada vez que recuerda que él le pidió otro beso, no puede evitar sonrojarse y juzgar todas las malas decisiones que ha tomado en su vida.

Suo, el muy maldito, se ríe, gozando la vergüenza que le hace pasar a Sakura. Haruka se vengará de él algún día, ¿quién se cree? Resoplando malhumorado, Sakura se dirige hacia su apartamento, no se despide de Suo porque no se lo merece, no obstante, cada dos pasos él se voltea para mirar a su vicecapitán, que sigue ahí de pie con una sonrisa, y siguen así hasta que Sakura finalmente ingresa a su vivienda.

Haruka cierra la puerta y se recarga contra ella, para luego deslizarse hasta quedar sentado en el frío suelo. Ha pasado más de un mes desde que inició su extraña relación con Suo, y si es sincero, no esperaba llegar tan lejos. Al principio aceptó pensando que Hayato se aburriría a la primera semana, lo cual no sucedió. Entonces, continuó, con el nuevo pensamiento de que probablemente le tomaría más tiempo, así que se dijo a sí mismo que Suo lo dejaría en un mes.