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— No puedo creer que no te hayas sacado de la cabeza a ese sujeto —recita Hyunjin desde detrás del escritorio del mayor, con las piernas sobre este

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— No puedo creer que no te hayas sacado de la cabeza a ese sujeto —recita Hyunjin desde detrás del escritorio del mayor, con las piernas sobre este. Había oído la loca historia de su amigo y era espectacular. Aunque, como tío de Haneul tenía que aceptar que encontrar a un eslabón perdido podría retrasar los planes de Minho de obtener su libertad al hacerse cargo de la empresa— pero, ¿entonces qué pasará con tus planes de hacerte cargo de la compañía? Cuando tu padre se entere de tus andadas, te castigará. Y no solo a ti.

Susurra, dándole una calada a su cigarro. Detrás de esa computadora, con los dedos cruzados, a pocas horas de ir a recoger a su hija, Minho se mantiene pensando.

Tampoco había pensado en aquella opción. La opción de perderlo todo antes de tiempo. Aun así, la esperanza de ver a la persona que tanto amaba y tenerlo ya, ante sus ojos, no se comparaba a los constantes sueños, donde él lo hacía suyo. Y no lo dejaría ir.

Estaba loco por él como Jeongin no tenía idea. Como siempre lo estuvo desde antes.

— No lo sé. Qué decisión debería tomar. Pero si debería escoger entre una de ellas. Sé que hoy voy a conquistar su corazón de manera oficial. —pronuncia con una sonrisa segura, observando el logo de su empresa en su computadora. Una bonita cara aparece en ella. El rostro de su elegante hermano está en ella. Después de todo, todo lo que ven es suyo.

Los logros han sido suyos.

Su padre no podría echarlo así como así.

Perdería miles de empresarios a su nombre, si él moviera dichas fichas de este tablero de ajedrez.

— ¿Cómo harás eso cazador lobezno? —ríe agarrando algunas cartas de su saco. Minho levanta su mirada y sonríe, negando, colocando su barbilla sobre sus delicadas manos.

— Hoy irá con su hija. Pienso recogerlo y pasar una linda tarde a su lado. Pero, al final, lo llevaré conmigo. Nadie se ha podido resistir hasta ahora a mis encantos. —sonríe y niega con una sonrisa encantadora. Hyunjin avienta la baraja sobre la mesa, sacando al rey. Minho tiene razón en decir eso, pero Jeongin no es como los demás. En su largo pero corto historial, más de miles de chicas han pasado de su camino al descubrir su sexualidad. Sin embargo, cuando el mayor habla de "chicos", todos van por la recompensa del rey. Su dinero.

¿Qué podría diferenciar a Jeongin de los demás?

Una historia entre ellos. Fácil podría tener la misma historia y desear más. ¿Cómo estaba tan seguro de Minho que esa persona quería algo serio? Si tan solo hasta ahora, esa misma técnica la han usado varios. Engatusarlo. Jugar con su pesimismo y hacerle ver las estrellas. No cree que haya un solo hombre en este mundo que sea leal, incluido él no lo sería.

— ¿Qué te hace pensar que será tan fácil? —sonríe y mira a las pantallas fuera de la empresa. Allá arriba, en la gran pantalla se puede ver a la persona más grande de Corea, ser la cara de la belleza de su país.

NIGHT MEET [JEONGHO][FINALIZADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora