Faith [Parte 1: Los Anillos del Núcleo]

Capítulo 25: Honeyuan

Retrocediendo un poco en el tiempo, nos encontramos al rey Soizic Eckhart llegando a su reino un día después de que Flint Lennon hubo llegado a Elvauty; agradeció mucho que el transporte de Wisgent era mucho más rápido, sino hubiera tardado probablemente tres días o más.

El Reino de Honeyuan se encontraba en medio del desierto, en Phrygía, bastante lejos de Wisgent. Era tan grande como lo fue una vez el Palacio de Tychi, solo que este resplandecía de colores cálidos, aunque todas las estructuras estaban hechas de piedra clara y los techos con forma de medio circulo estaban pintados de piedra anaranjada que brillaba con el reflejo del sol.
El reino estaba rodeado por una larga y alta muralla y torres en cada esquina; había bastantes casas y edificios, todos iguales al palacio, solo que estos más pequeños y sin torres.

Cuando Soizic entro al reino, rápidamente cinco guardias con armaduras negras con dorado y plateado lo escoltaron hasta el castillo. Gente alrededor, que hacía compras o paseaba, se le quedaban viendo y cuando el Rey les devolvía la mirada hacían una leve inclinación con respeto, haciendo que sus ropajes de tela delgada dieran oleadas.
La mayoría tenía el cabello muy largo o demasiado corto, no había ningún punto intermedio; y así como sus reyes, todos en ese reino se caracterizaban por tener los ojos rasgados.

Después de un largo camino en el suelo cementado alrededor de pilares, estatuas, fuentes de agua o algunas palmeras en zonas verdes, llegó al palacio, que únicamente una torre gruesa, pero circular, parecía llegar a la altura de las nubes. Al entrar por los grandes portones oscuros con detalles dorados, paso rápidamente dejando a los guardias detrás en el camino encerado que conducía a los tronos, el cual en el centro era rojo como una estrecha alfombra, pero a los lados le seguía un color verde pantanoso y después de ese color estaban unas líneas doradas.

Subió los gruesos y cortos escalones curveados que guiaban a los dos tronos, sin embargo, rodeo los tronos de piedra y entro a la pared detrás de estos, que se abrió cuando dio unos golpecitos con los puños como si fuera un tipo de clave para que la pared se abriera como una puerta. Al interior había una sala, llena de personas con batas rojo fuego y verde cocodrilo, con pergaminos y caminando de un lado a otro alrededor de un cubo flotante que estaba en el centro.

La caja daba giros lentos, moviéndose por energía proveniente de una plataforma que tenía debajo que parecía rodearlo, como magia, y en las esquinas de la caja había otros cubos mucho más pequeños como soporte para transmitir la energía y hacer que el cubo del medio flotara. Todos en la sala se dieron vuelta a él cuándo la pared volvió a ser una pared y no una puerta.

—¿Algún comportamiento anormal del Carrgy? —pregunto el rey, acercándose al centro.

—Hace un día comenzó a emitir más energía y creemos que ahora gira más rápido debido a eso —informó un señor moreno con una bata verde y apuntando con su pergamino al cubo flotante, denominado Carrgy.

—Consejo —Soizic alzo la voz y esta vez todos se reunieron a su alrededor—, me llevaré el anillo por petición de nuestra Diosa Electra de acuerdo al plan que nos asignó. Necesito que lo detengan y lo abran.

Saco una Inx del bolsillo de su pantalón y al ver que todos intercambiaban miradas de terror, el rey pregunto qué pasaba.

—La energía ha sido de mucha ayuda para el reino... —contestó un miembro del consejo— si lo detenemos tememos que el balance se desequilibre...

—Que se desequilibre el reino no es nada comparado con ocasionar su destrucción por nuestro egoísmo. Ahora, escuchen a su Rey e introduzcan el anillo a la Inx.

El Consejo obediente detuvo el mecanismo del Carrgy, el cual dejo de flotar y de verse energía a su alrededor. La caja descendió y hubo un momento de completo silencio hasta que se abrió automáticamente desde una esquina, dejando ver el hueco interior donde había un pequeño anillo pegado a un alambre.
Un hombre del Consejo acerco la Inx y de inmediato el anillo se desprendió de aquel alambre y se introdujo en ella.