♡¦capítulo 35

1.4K 143 9
                                    

Las cosas se habían acomodado en la vida de Jungkook y Jimin.

Porque ahora, tenían la certeza de que nada les arruinaría sus planes,, ahora podían estar seguros y tener una vida tranquila.

Porque Jungkook no iba  a negar que JoIn representaba un problema para sus vidas, pero ahora, que el alfa ya estaba pagando por sus crímenes, no había porque restringirse en ciertas cosas. Ahora podían salir a cualquier lugar sin el temor de que algo malo podía pasarles.


Además, estaba feliz, muy feliz, mirar a su omega siendo la persona más feliz del mundo era todo para el. Jimin mantenía una sonrisa siempre en su rostro, se sentís más animado y extrovertido.

Cada vez que lo miraba se prometía así mismo hacerlo feliz y hacerlo sonreír siempre. Cuidarlo protegerlo.
Y mucho más ahora que estaban a la espera de su primer cachorrito. Es que Jungkook era el ser más feliz y dichoso, no solo tenía a su lado el omega más hermoso, con un corazón de oro, ahora venía en camino esa personita qué se convertiría en su todo, al igual que Jimin.


Él se encargaría de hacerlos felices a ambos.

Y ahora, Jungkook estaba por disfrutar una de las etapas más lindas, el embarazo de su omega. Su madre le había dicho que el embarazo de un omega era versátil, al momento Jimin podría estar feliz y siendo la una masita, pidiendo sus antojos raros, pero iban a ver momentos donde su omega se sentiría mal, lloraría, se enojaría, lo dejaría durmiendo en el sofá, y en los peores casos, fuera del nido.

Pero Jungkook estaba dispuesto a soportar de todo, a complacer a su omega y hacer las cosas como se las pidiera.

Como justo en ese momento, su omega ya tenía tres meses de gestación. Su pancita no era tan notoria, pero Jungkook esperaba ansioso el día en que creciera.


Su omega le estaba pidiendo fresas con chocolate, y había sido muy específico en pedir chocolate amargo, tal y como su aroma.


Así que Jungkook buscaba como loco el chocolate amargo, y se estaba desesperando al no encontrarlo, había de varios, pero no del amargo.

— Alfa —Le llamó su omega, Jungkook dio respingo, Jimin había ido a buscar las fresas mientras él iba por el chocolate


¿Como le decía a su omega embarazada que no había chocolate amargo?



Lo miro a los ojos y le pidió a la luna piedad.

— Ángel...


— Mira las fresas, están enormes y se ven jugosas. ¿Y el chocolate? —Pregunto.


— Bueno... Mi amor, creo que no hay chocolate amargo.

La sonrisa de Jimin se borró. ¿Como que no había chocolate amargo?.

— Pero hay de este. —Le mostró del chocolate normal. —Mira, también hay con nueces.


— Pero yo quiero amargo —le dijo con un notable puchero. —Así como tu aroma alfa.


Los ojos de Jimin se pusieron acuosos, no quería hacerlo llorar.

— Cariño, podemos ir a otro lugar si quieres, pero no llores. —Le consoló Jungkook abrazándolo y Jimin lloro más.


— Es que quiero chocolate. Pero no se porque me dieron ganas de llorar. Es tonto estarlo haciendo por eso.


— Claro que no. No es tonto.


LOVE♡KMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora