LISBOA, PORTUGAL
─¿Y con esta pinta cómo me veo, hijo?.
Valentín alzó la vista de su tablet al oír la consulta de su padre y lo vió parado enfrente de la cama con un look diferente a los anteriores. Era la tercera vez consecutiva que el mayor entraba a su habitación y le preguntaba lo mismo, por lo que involuntariamente soltó un bufido fastidiado. Escaneó en detalle el nuevo conjunto de prendas que vestía y dejó en evidencia un gesto de inconformidad con el outfit, había algo que no lo estaba convenciendo.
─¿Por qué ponés esa cara, hijo? ¿tan fiero me queda lo que elegí?.─ inquirió extrañado Nicolás al observar la cara del menor. Sabía que su versión miniatura era muy crítico con él a la hora de opinar sobre lo que se ponía para salir, de modo que pensó por sí mismo que la opción escogida en esa ocasión estaba bastante bien y era la definitiva. No obstante, Valentín no opinaba igual
─No me gusta como te queda con esa remera negra, papi.─ confesó tajante y lleno de sinceridad el niño, meneando su cabeza de un lado a otro de forma negativa y saliendo de entre las sábanas, acercándose al grandote. Lo agarró de la mano y juntos caminaron hacia la habitación principal ─Una de color blanca te quedaría flama y si la combinas con esta gorra violeta, más piola te va a quedar el outfit.─ le indicó como si fuese un asesor de imagen, sacando del placard el último accesorio mencionado y saltando eufórico, intentando ubicarlo en donde correspondía
Otamendi aceptó la recomendación dada y se cambió de prenda al instante. Miró su apariencia en el espejo con una sonrisa orgullosa, había adiestrado demasiado bien a su heredero con el excelente gusto en combinar la ropa y el saber vestirse.
─¡Ahora sí, pa! estás facherito facherito.
─Tu ojo crítico nunca me falló, enano.─ Nicolás lo halagó, acercando su diestra a sus cabellos oscuros y despeinándolo con diversión ─Vamo' a tu pieza así te volves a acostar y yo me puedo ir a esa cena, ya se me hizo re tarde.
─Todavía no me contaste con quién te vas a juntar, ¿es con Jor y Fide?.─ indagó en un tono curioso, volteando su pequeño cuerpo para mirarlo con la misma sensación. El tatuado soltó una risa jovial y le palmeó con ligereza la espalda, incitándolo a que obedeciera primero su mandato
─Hasta que no te vea acostado y con las sábanas puestas hasta la frente, no te voy a contar.
No necesitó decir más nada, enseguida vió como Valentín se levantó de la cama y corrió en dirección a su propia habitación todo emocionado. Desde que le tuvo que avisar que probablemente no comerían juntos esa noche porque tenía una cena 'importante', el pequeño le taladró la cabeza con que le contará con quién, o quiénes, iba a reunirse, ya que para él era raro verlo salir un miércoles por la noche y más sabiendo que al día siguiente debía presentarse al entrenamiento pactado en el campus del Benfica. Hasta el momento no había conocido otro jugador más responsable, exigente y comprometido con su carrera futbolística como lo era su padre, por eso esa salida inesperada lo intrigaba.
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𝐋𝐈𝐒𝐁𝐎𝐀 | Nicolás Otamendi
Fanfiction𝐋 | Cuando se termina el amor, siempre quedan cuentas pendientes. Y se pagan muy caro. [ nicolás otamendi fanfic ] ⓒ spacexalvarez - 2024 Nicolás Otamendi x fem!oc ✐ in process