Parte 2

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#Hannigram #AcuerdosMatrimoniales #Au #Parte2

Cuando Hannibal aceptó tener esa reunión en casa del señor Graham no esperaba encontrar una fiesta.

Frunció el ceño inmediatamente, odiaba las aglomeraciones y más si eran puros jovencitos, se arrepintió  de no hacer la reunión en su oficina.

Hannibal tenía al Sr. Graham en sus manos, su compañía estaba en números rojos y él podía aprovechar eso. Lanzarlo a quiebra y quedarse con su compañía después de todo había hecho un imperio de esa manera.

Podía oler la desesperación del viejo.

— Lo siento Sr. Lecter, había olvidado que hoy era el cumpleaños de mi hijo, sólo... Ignoralo es algo sin importancia.

— Hmmm, prefiero un lugar con más privacidad.

—Sí claro, vamos a mí despacho —El señor Graham lo condujo a su despacho .

Hannibal siguió al viejo, la casa era bonita y a Hannibal le gusto la decoración quizás podía quedarse también con la casa. Percibió un delicioso olor con su olfato que logró agitar a su Alfa interior, recorrió con la mirada el lugar y vio a lo lejos a un joven muy bonito, con lentes y vestido con una camisa a cuadro, abrazado a una mujer. Era él, lo sabía, ese exquisito aroma pertenecía a él. El joven le regreso la mirada por unos segundos y luego la apartó.

—Hannibal... —lo llamó el viejo. — No te quedes atrás.

—Él es... ¿Quién es él?

— Oh si, es mí hijo, ya ves cómo son los Omegas con sus tonterías siempre.—Dejo que Hannibal entrará al despacho antes de volver a hablar— En fin hablemos de negocio.

Geralt entre cerro los ojos antes de ver a Bill. Al parecer el viejo tenía cosas mucho más valiosa que los bienes materiales.

El despacho era sombrío, se parecía mucho al propio, había muchos libros y documentos y un solo porta retrato en donde se podía apreciar a viejo y a una mujer que debía ser la esposa y que Hannibal reconoció como la mujer que abrazaba al joven Omega que vio hace un momento ahora pudo apreciar mejor los rasgo de ese omega, era precioso.

La reunión no fue tan larga, en realidad el viejo solo se la pasó suplicando en que no comprara su compañía, quería que se volviera su socio en su lugar y que invirtiera. Hannibal no podía dejar de ver al muchacho en la foto.

— Hermoso.—dijo sin pensar.

El Sr. Graham se dio cuenta del interés de Hannibal por su hijo, era obvio que no podía dejar de ver la foto y cambio su estrategia. Sabía que Hannibal Lecter era un tiburón en los negocios pero a veces hasta el depredador mas feroz podía caer por el pecesito adecuado.

—Entonces... ¿No quieres invertir?

—No.

—Y... ¿Que tal una unión familiar? Veo que te ha interesado mi pequeño hijo Omega, digo podríamos arreglar algo y...

—No... No estoy interesado en una relación y mucho menos con un mocoso. —Respondió. La verdad la propuesta le había pillado por sorpresa y lo había descolocado, su corazón había latido más rápido de lo normal y de pronto sus manos empezaron a sudar de solo imaginar tenerlo para él pero jamás se aprovecharía, él odiaba que hicieran negocios con Omegas de hecho tenía una pequeña hermana Omega y sabía como eran discriminados.

—Oh que lástima, mi hijo esta cumpliendo su mayoría de edad y ya sabes... Debo buscarle un marido pronto, quien sabe. —Graham hizo una pausa para ver la reacción de Hannibal.— Ahora que voy a quiebra quizás algún viejo me de una buena suma por él.

Hannibal no pudo evitar gruñir de indignación al escuchar a ese viejo hablar de su hijo como mercancía y de solo imaginar a ese inocente Omega en manos de algún depravado, sus pupilas se dilataron de rabia.

El viejo sabía que teclas tocar, por algo decían que el diablo era mas sabio por viejo que por diablo.

—Lo quiero. —dijo Hannibal sin pensarlo. —Puedes quedarte tu compañía y voy a invertir en ella a cambio de tu hijo.

Vio al viejo reír y su sangre hirvió, el condenado había conseguido lo que quería.

—Hecho. - le dió la mano a Hannibal para cerrar el trato. —Quién lo diría, esta reunión fue más corta de lo que esperaba y con resultados magníficos. Ven voy a presentarte a mi hijo.

—No, no tiene que ser ahora. —Dijo Hannibal. No quería hacer esto ahora, de pronto se sentía nervioso.

—Esta bien.

Hannibal pudo respirar nuevamente. No estaba preparado, de hecho jamás había hecho algo así pero es que el olor de ese Omega hizo algo en él, sí, tenía que ser eso, de otra manera no podía explicar el como la reunión salió totalmente diferente a lo esperado.

Ya iba en retirada, pensando como demonios decirle a su familia que lo único que consiguió en esa reunión fue ¿Comprometerse?.

Ya estaba en dirección de la salida cuando vio al viejo Bill llamar a su hijo, su corazón empezó a latir rápidamente. Maldito viejo.

—Hannibal este es mi hijo William, hijo él es Hannibal Lecter.

Hannibal vio al muchacho sonreír de forma tensa y lo saludó  de forma tímida, tuvo que usar todo su autocontrol para mantener su rostro con seriedad.

—Hmm..

—Papá, nunca me habías presentado a...

—Él es tu prometido Will.

—¿Qué?

Hannibal vio el pánico en los ojos del muchacho y quiso maldecir nuevamente al viejo.

—Hola —Fue lo único que pudo decir.

#Conti?

Acuerdos Matrimoniales [Hannigram]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora