80 7 4
                                    

En estos últimos días las cosas no le han ido muy bien a John. Todo era extraño. Paul había estado faltado 3 días seguidos a clases; hasta a Ringo le llamó la atención. Por supuesto que John comenzaba a sospechar y esperaba que lo que estaba sucediendo no sea lo que él pensaba y le atemorizaba tanto de tan solo pensarlo...

John

—Oye George... —Llamé su atención mientras íbamos saliendo de la escuela—. ¿Sabes algo de Paul? Bueno hace días que no lo veo... Y tampoco estuvimos en contacto... Solo quería saber si le había pasado algo...

—Espera —Me miró confundido y parando en seco—. ¿No te lo dijo?

—¿Qué cosa...? —Me estaba comenzando a preocupar.

—Bueno, no sé cómo decirte John.... Mmm... —Decía Geo titubeante.

—Ve al grano George... —Me crucé de brazos.

—Lo que quiero decir e-es...

Y justo para el momento oportuno siempre alguien debe interrumpir.

—¡Esperen chicos! —Gritaba Ringo desde lo lejos alcanzandonos—. No se vayan si mi.

—Ahg, ¿Qué ibas a decir George? —Dije moviendo mis manos nervioso.

—Lo que intentaba decirte es que...

—¿De qué me perdí? —Dijo Rich volviendo a interrumpir, apoyándose en mi hombro.

—Ya por el amor de Dios —Me exalté y pasé mis dedos por mi frente de la desesperación.

Los otros dos me miraron exaltados también.

—¡Ya dilo George!

—¿Decir qué? —Ringo me miraba confundido.

—Lo que trataba de decir es que Paul se fue... —Geo desvió la vista.

—¿¡Cómo que se fue!? —Tomé a George por los hombros con desesperación.

—Bueno ya sabes... —Me miró nervioso—. Su intercambio ha terminado y tuvo que regresar a Francia.

—Y... No me lo dijo... —Solté a George y comencé a caminar rápido.

—Ay no pude despedirme de él —Decía un Ringo nostálgico detrás de mí.

—Ey... ¿A dónde vas tan apresurado, John? —George me seguía el paso junto a Ringo.

—Tengo algunas cosas que hacer... —Dije cortante mientras me perdía en un pensamiento repentino de mi mente.

—¿Está todo bien? —Preguntaron ambos detrás de mi.

—Solo queda una cosa por hacer... —Me alejé de ellos y terminé la charla—. Me iré a Francia...

Mientras caminaba a paso rápido, los dejé atrás. Cuando di vuelta la esquina corrí hasta casa. Tenía un pensamiento. Tal vez no sería lo correcto, pero no, no podía irse, justamente ahora. Lo necesito, lo necesito aquí conmigo. No estaba listo para dejarlo ir tan fácilmente. ¿Por qué no me lo dijo? Siempre nos contamos todo... Algo estaba mal... No sabía qué pero solo quedaba arreglar las cosas...
Una vez dentro de mi casa, subí rápidamente a mi habitación por mi documentación. Luego bajé a la sala y sin pensarlo dos veces, entré a la habitación de Mimi. Si quería realizar mi plan necesitaba dinero, abrí varios de los cajones hasta que pude encontrar lo que estaba buscando. Tomé un par de libras que servirían para después.
Rápidamente ya con todo lo que necesitaba, no lo dude, y salí de mi casa corriendo por las calles hasta llegar a la estación de trenes, en Liverpool.

𝐔𝐧 𝐄𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐫𝐨 𝐈𝐧𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐝𝐨 | McLennon [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora