Seguimos caminando, no había nadie, literalmente nadie en toda la calle, no había siquiera ruido, todo estaba desolado y arruinado, parecía que los dias normales fueron hace tiempo cuando tan solo ayer estaba en la escuela, que curioso.
De pronto vimos a un caminante parado dandonos la espalda, en realidad en ese momento no estaba seguro de si era un caminante o una persona normal, pero papá ya sabía que eso no era una persona.
–Ssh... Quédate aquí hijo.– desenvaino su cuchillo y se puso de cuclillas, yo hice lo mismo, y observé cómo papá acababa con un caminante por la espalda, enterrando el cuchillo en su cabeza. –Listo, puedes venir.–
Yo solo me acerqué en silencio y tomé nuevamente su mano, tenía mucho miedo y trataba de ignorar el hecho de que estábamos al lado de un cadaver, además el olor empezaba a ser molesto, supuse que tendría que acostumbrarme a ello aun que una parte de mi no quería, quería que todo esto solo fuera algo pasajero.
Seguimos caminando hasta llegar a la estación de policía más cercana la cual estaba a 30 minutos caminando, no era mucho, Pero entonces cuando llegamos nuestras esperanzas se fueron al suelo al ver la estación con los vidrios rotos y todo abandonado y arruinado.
–Esto es lo que me temía...– La frustración en su voz era notable.
–¿Y ahora que hacemos papá? ¿Regresamos a casa?– Pregunté de manera inocente pues estaba claro que eso ya no era una opción.
–No, no podemos regresar, tenemos que seguir avanzando a algún lugar seguro, debe haber un lugar dónde hayan podido contener esto.– Dijo seguro de sus palabras
–Pe-Pero-- – Fuí interrumpido
–Escucha hijo– Se pusó a mi altura y me tomó de los hombros. –Sé que esto va a ser difícil, pero tenemos que dejar nuestro hogar atrás, ya no es seguro, y si un hogar ya no es seguro deja de ser un hogar, tenemos que encontrar ayuda, estoy seguro de que hay algún lugar con sobrevivientes no muy lejos.
–Papá... Tengo miedo...– Comencé a llorar y el me abrazó, los abrazos de papá siempre me hacían sentir mejor, incluso en las situaciones difíciles, en esta ocasión no era diferente pero aún así el miedo no se iba del todo, y es que claro, acababa de cumplir años hace una semana, nueve años para ser exactos.
–Tranquilo mi niño, mientras yo esté aquí yo te protegeré, lo prometo, no dejaré que nada malo te pase incluso si eso significa dar mi vida a cambio.–
–¿P-Prometes que... Que nunca me dejaras? –Pregunté aún llorando.
Se tomó un momento para responder –Lo prometo, ahora hay que movernos anda.– El abrazo se rompió y el tomó mi mano, comenzamos a caminar alejandos de aquel lugar.
Y así nuestro viaje comenzó, aún que no sabía a donde íbamos, por lo que decidí preguntar...
–Papá...– Llamé su atención y este volteó su mirada hacia mi. –¿A dónde iremos ahora?– Preginté con curiosidad.
–A un lugar de macon, conozco a una persona ahí que tal vez pueda ayudarnos en esto.– Aseguró con una sonrisa
Creía saber a quien se refería pues había hablado de el en un par de ocasiones, según sus palabras, era un gran amigo, el y toda su familia, aun que nunca lo escuché decir nombres, solo supe que ellos era dueños de un gran negocio por ahí en macon, no pregunté mas y solo le seguí el paso caminando a su lado.

ESTÁS LEYENDO
Una Amistad Entre La Muerte. | The Walking Dead (Clementine X Lector) (S1)
Fanfiction(T/N), Un niño de 9 años cuya vida era pacífica y normal para cualquier niño de su edad, lastima que eso estaba por dar un giro de 180 grados, el virus se propagó rápidamente y el mundo se fue al carajo, sin embargo, el niño tuvo mucha suerte y pudo...