4. Malas noticias

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Allie

Está bien, quizás hay algo que aún no les he contado. La verdad era que luego de casi cuatro años con Walker interponiéndose en mi vida y en todo lo que hacía, al fin tuve un poco de paz cuando se cambió de escuela, así que también tuve tiempo para otro tipo de cosas como... salir con alguien.

Así que era oficial, estaba viendo a un chico y su nombre era Charlie. Lo había conocido a inicios de años cuando lo transfirieron junto a su hermana a mi escuela. Era de último grado y unos de los mejores estudiantes a punto de graduarse.

¿Cómo podría describirlo? Decir que era el chico perfecto sonaba muy cliché pero en verdad lo era. Tenía aquella personalidad extrovertida y protectora, además era muy cariñoso, amable y con un gran sentido del humor. Realmente el sueño de cualquier chica, he de decir que incluso se llevaba muy bien con mis amigas a pesar de lo complicadas que podían ser ellas.

Charlie era del tipo de persona que se adaptaba rápido y se encariñaba con los demás instantáneamente. Amaba a los animales, también amaba el baloncesto y por supuesto me amaba a mí. Tal y como era, aquello era más de lo que podía pedir.

—Deberíamos aplicar a la misma universidad-Dijo mientras caminábamos tomados de la mano hasta mi salón.

Lo miré confundida. A decir verdad, su propuesta me tomó por sorpresa.

—Bueno, es muy pronto para decidir eso, considerando que aún no es mi último año.

Le sonreí nerviosa.

Charlie levantó una ceja. -¿Allie Kang, la que tiene toda su vida planeada piensa que es muy pronto para decidir algo?

—Sí pero....

Él me sonrió. —No te preocupes Al, sé que ambos habíamos planeado cosas muy distintas antes de conocernos y ahora que estamos juntos la situación se complica un poco. Pero eso no impedirá para nada nuestra relación.

Entonces, luego de decir eso me atrajo hacia él y me rodeo con sus brazos.
—Puede que nuestras universidades estén alejadas una de la otra, sin embargo eso no será ningún obstáculo para ver a mi linda novia cada fin de semana.

Sentí como el corazón me saltaba de alegría, amaba la forma en como él nunca se hacía problemas con nada y buscaba la solución para que todo marchara perfectamente.

Era una sensación tan placentera, como si estuviera sobre las nubes, estaba tan pero tan enamorada, no había nada ni nadie que pudiera arruinar aquel momento...

—¡Abran paso, el futuro presidente escolar está aquí!

Escuché aquella voz y toda la magia se acabó, quizás si había alguien que podía arruinar el momento.

Miré a un costado y vi a Walker con su gigantesco panel de pie frente a nosotros.

—Regla número 124 de la escuela, no hacer demostraciones de afecto en público-Dijo él mientras Charlie y yo aún estábamos abrazados.

—Ve por el otro lado Scobell, este pasillo es muy grande— Añadí sin darle importancia.

Walker negó y con una sonrisa maliciosa intentó pasar por en medio de nosotros hasta que tuvimos que separarnos.

—¿Qué sucede amigo?— Soltó Charlie fastidiado. A lo que Walker solo le respondió con una mirada furtiva y luego se dirigió a mí. —¿Lo conoces?

—Es mi vecino-Añadí. —Alguien sin importancia.

El demonio al parecer me escuchó y me hizo a un lado con su hombro mientras entraba al salón. —No me retes Kang, ahora que he vuelto tu vida dejará de ser tan fácil—. Susurró para que solo yo pudiera oírlo.

𝑲𝑰𝑺𝑺 𝑶𝑹 𝑲𝑰𝑳𝑳 / Walker Scobell Donde viven las historias. Descúbrelo ahora